por Peter Economy* – INC
Todos tenemos relaciones tejidas con hilos: algunos fuertes y duraderos, otros desgastados y frágiles. Al enfocarnos en nuestras necesidades diarias, puede ser difícil descubrir cómo navegar por estas relaciones. Puede que nos sintamos frustrados cuando alguien no comparte nuestra perspectiva o se comporta de una manera que no apreciamos.
Pero si sabemos más sobre cómo entendernos a nosotros mismos y a los demás, podemos formar relaciones más saludables y satisfactorias. Aquí hay siete maneras de empezar:
1. Autodescubrimiento: La base de la armonía
Comienza con una mirada honesta a nosotros mismos, realizando una autoexploración. Con la autoexploración, podemos observar nuestras fortalezas y debilidades, patrones de comportamiento y desencadenantes. Luego podemos identificar formas de tomar decisiones más saludables.
2. Empatía: El puente hacia la comprensión
La empatía es la capacidad de leer el estado emocional de otra persona y luego compartirlo: sentir lo que la otra persona siente. Es vital para construir relaciones. Cuando puedes ponerte en los zapatos de otra persona, es más fácil ser comprensivo y dejar de hacer suposiciones sobre ella.
3. Escucha activa: El arte de la conexión
La escucha activa significa prestar atención total a lo que el orador está diciendo, entender el mensaje de esa persona y, finalmente, decir algo apropiado en respuesta. La escucha activa se puede enseñar, y cuando la utilizamos, obtenemos más de las conversaciones, actuamos con más respeto y construimos relaciones más sólidas. La escucha activa nos permite comunicarnos de manera más efectiva.
4. Comunicación efectiva: El lenguaje del amor
La comunicación juega un papel vital en el mantenimiento de relaciones saludables. Sin una comunicación efectiva, las personas no pueden construir y mantener relaciones de manera saludable. No pueden transmitir sus pensamientos, sentimientos y necesidades a los demás. Además, es probable que se desarrollen malentendidos, lo que puede llevar a conflictos que tal vez no se resuelvan de manera pacífica.
5. Establecer límites: Proteger tu bienestar
Los límites son una parte esencial para poder proteger tu salud emocional y mental: se trata de decirle a los demás tus límites y comunicar tus expectativas de una manera saludable. Recuerda que al establecer límites, estás demostrando un cierto nivel de respeto por ti mismo y por los demás.
6. Perdón: Dejar ir el pasado
Los resentimientos guardados durante mucho tiempo pueden envenenar las relaciones, pero el perdón no requiere condonar comportamientos que podrían ser dañinos. Se trata de dejar ir los sentimientos negativos que pueden bloquear la curación y el crecimiento.
7. Buscar apoyo: Construir una red de cuidado
Para algunos, esto ayuda al mantenerlos en su lugar con atención amorosa, consejos y aliento. Los terapeutas a menudo ayudan de esta manera. A veces, pueden ser amigos cercanos o familiares. A menudo, es una combinación de todos estos.
Usa estas estrategias en tus relaciones para profundizar las conexiones, resolver conflictos y crear una vida mejor y más gratificante para ti y tus seres queridos. Las relaciones requieren tiempo, esfuerzo y paciencia para desarrollarse, pero los resultados valen la pena