No dejes que estas pensamientos arruinen tus planes para triunfar. Aprende a pensar diferente y adopta una actitud positiva.
Seguro has escuchado que la gente exitosa piensa diferente, que de alguna forma está hecha para actuar. Existe la noción de que algunos emprendedores combinan perfectamente las habilidades analíticas y de razonamiento con optimismo, creatividad y resolución de problemas.
Pero las personas exitosas tienen el mismo tipo de pensamientos negativos que todos los demás. Lo que las hace diferentes es la forma en la que reaccionan y los identifican. Aquí hay algunos pensamientos que pueden matar, aplastar y destruir el éxito.
1. “No soy un experto”
¿Te dices esta frase una y otra vez? Nadie comienza las cosas siendo un experto. Eso se construye con el tiempo y por medio de tu esfuerzo. Cuando consideres un proyecto o negocio, no te hagas esta pregunta, en lugar de eso piensa si te gusta el tema.
Si te apasiona, harás todo lo que puedas para obtener información. Para muchos campos de negocio, dos años de aprendizaje intenso pueden hacerte un experto. El proceso empieza contigo aceptando que esta experiencia es como un viaje. Asegúrate de que sea uno que disfrutes y en el que quieras pasar mucho tiempo cada día. Cambia este pensamiento a una pregunta: ¿En dónde encuentro lo que necesito saber?
2. “Ya lo han hecho antes”
¿Alguna vez te has dicho esto? Es verdad que hay algunas ideas que son nuevas. Si se te ocurre una nueva aplicación, lo más seguro es que ya exista un producto similar. Si ya estás trabajando en cierta industria tal vez veas que tus ideas las están poniendo en práctica otras personas, pero eso no importa.
Si sabes que mucha gente necesita tu producto o servicio el hecho de que la competencia existe sólo valida tus planes. En los negocios es mejor ser el primero, pero como el co-fundador de PayPal, Peter Thiel, dijo, “es mejor ser el último”. Darle vida a una idea y ejecutar tu plan mejor que otros importa más que la autenticidad de la misma. Reta este tipo de pensamiento al preguntar: ¿Cómo puedo mejorar esto?
3. “No conozco a las personas adecuadas”
Tal vez hayas escuchado la frase “todo tiene que ver con tu lista de contactos” desde que naciste. Es cierto de alguna manera: conocer a ciertas personas importa. Pero el problema es que mucha gente acepta su limitado círculo de contactos como un recurso con el que tienen que trabajar.
Usar una lista reducida como excusa para el fracaso es un pensamiento autolimitante. Busca todos los contactos que tengas. Contrario a lo que has escuchado, buscar a la gente correcta es fácil si te esfuerzas un poco, aunque no tengas su teléfono. Convierte este pensamiento en: ¿A quién debo conocer y cómo?
4. “Necesitas dinero para ganar dinero”
Es fácil pensar que hay una razón por la que otras personas son exitosas, por ejemplo porque fueron a mejores escuelas o tienen mejores habilidades personales. Mucha gente apunta al éxito de otras personas haciendo notar que tienen dinero y recursos.
Es fácil usar la falta de dinero como excusa para no progresar, pero en muchas áreas de negocio los recursos limitados pueden ser una bendición. Esto puede impulsarte a que tus operaciones sean lean y a tener una mente fresca y ajustar tu enfoque. Puedes ser muy exitoso si eres inteligente respecto a los gastos y planeación de negocios.
No necesitas dinero para ganar dinero, sólo se te debe ocurrir el costo exacto de tu primer producto, el cual puede ser completamente gratis. Mejor piensa: ¿Cómo puedo hacer mejor las cosas aprovechando que mi operación es pequeña?
5. “Yo siempre…”.
Cuando diriges un negocio, las líneas entre tu vida personal y profesional son borrosas. Tus atributos personales muchas veces dictan el éxito de tu negocio. Cuando pienses en tu negocio, piensa en lo que podría llegar a ser. El truco es verte a ti mismo de la forma en la que consideras el negocio: como un vehículo en crecimiento.
Cuando digas “yo siempre… (como “yo siempre arruino todo cuando hablo frente a la gente”) date cuenta que estás siendo muy negativo. Para hacer crecer un negocio primero debes crecer tú. Apuesta a que eres capaz de un cambio positivo. Recuerda considerar esto: No soy lo que una vez fui.
Dominar la forma en la que piensas es el primer paso hacia el éxito en una empresa. Es un objetivo que siempre se está moviendo y una meta que tal vez nunca alcances. Tratar de atrapar y cambiar estos pensamientos, es lo que hace que los emprendedores avancen en su viaje.