Dos lectores consultan a Richard Branson sobre el equilibrio necesario entre emprendimiento y familia. Descansar es una de las claves, según el creador del imperio Virgin
«¿Cómo delega? Yo creo verdaderamente en dar poder a la gente adecuada, escucharla, y hacerme a un lado para permitirles triunfar. ¿En qué momento de su asombrosa carrera aprendió que era necesario soltar? Jeff Hensley, Estados Unidos ¿Tiene algún consejo acerca de cómo crear tiempo de calidad para la familia? Mi negocio me lleva a menudo fuera de Reino Unido durante semanas en cada viaje» Tunde Akande, Inglaterra
«Las exigencias de poner en marcha una compañía son tan absorbentes que los problemas de ceder la responsabilidad a otros y crear espacio para la familia parecen insuperables. Ambos son asuntos que enfrentan los emprendedores de todo el mundo»
Equililbrio
Estas preguntas, ambas enviadas por lectores de las revistas Entrepreneur y American Express Open Forum, me hicieron recordar los primeros años de Virgin y nuestras batallas para establecernos en las industrias de la música y las aerolíneas, y luego expandirnos pese a la feroz competencia. Era una tarea que lo abarcaba todo. Yo tenía que observarme a mí mismo para asegurarme de que estaba soltando a tiempo para que mis gerentes pudieran crecer, y también de que estaba manteniendo el equilibrio adecuado entre la familia y el trabajo.
Afortunadamente, mi punto fuerte siempre ha sido identificar buenas ideas, atraer a gente grande y asegurarme de que mantenemos nuestro propósito y visión en nuestras muchas empresas.
Un momento importante ocurrió cuando creamos Virgin Records para operar al lado de nuestras tiendas de música: yo me mudé de la oficina y me establecí en un lugar separado. No se trataba de un cuartel general grandioso, sino de una casa-bote en uno de los canales de Londres.
Aunque era pequeño y en ocasiones húmedo, me sentí liberado al alejarme de la incesante actividad y ruido de los negocios cotidianos. Esto no sólo me dio tiempo para planear nuestras siguientes empresas, sino que también garantizaba que los gerentes en la oficina eran “dueños” de sus decisiones.
Mis esfuerzos por alejarme de las operaciones diarias del Virgin Group fueron la clave para el éxito duradero de muchas de nuestras compañías: no hubiéramos podido enfrentarnos a tantos sectores y mercados diferentes si yo hubiera mantenido una rienda corta sobre nuestra administración y desarrollo. Pero uno no puede simplemente entregar la responsabilidad a otros, es necesario encontrar y dar poder a la gente adecuada.
El secreto de mi éxito
El éxito que hemos tenido en esto se debe en parte a la estructura gerencial que creamos, la cual resultó una cultura de empoderamiento. Dado que nuestros CEO operan sus compañías como gerentes-dueños, nuestros empleados mantienen un verdadero sentido de orgullo y responsabilidad por sus negocios, y los gerentes pueden contratar a otros que tienen las capacidades adecuadas y encajan bien en su equipo particular Virgin.
Yo hablo regularmente con nuestros CEO, visito nuestras compañías alrededor del mundo y paso mucho tiempo promoviendo nuestros negocios, pero dejo que nuestros gerentes manejen sus compañías. Es interesante subrayar que un buen número de nuestros CEO exitosos vinieron de organizaciones grandes y burocráticas, pero a la larga prosperaron en nuestras empresas más ágiles y dinámicas.
David Cush, de Virgin America, es un ex ejecutivo de American Airlines; Neil Berkett, de Virgin Media, antes trabajaba para Lloyds Bank; y Tom Alexander, fundador de Virgin Mobile, era un ex empleado de British Telecom. En cada industria, han utilizado la marca Virgin para moldear la cultura y el propósito de su particular compañía.
El reto de crear tiempo para la familia es igualmente difícil, y está estrechamente ligado a la necesidad de delegar. Para muchos que están empezando en los negocios, la dificultad de simplemente sobrevivir puede hacer que piensen que lograr un balance entre el trabajo y la familia es imposible. Pero pasar tiempo alejado del trabajo es importante para mantener la perspectiva sobre los desafíos que enfrenta, y en consecuencia el futuro de su compañía.
Yo recurro a dos soluciones para ayudarme a tener ese equilibrio, aunque quizá no sean posibles para mucha gente. Desde aquella primera vez que me mudé a la casa-bote, siempre he tratado de trabajar desde mi casa, para así estar cerca de mi familia.
Cuando mi familia llegó a ser demasiado grande para el bote, nos mudamos a una casa en Holland Park, en Londres, y ahora vivimos en la isla Necker, en las islas Británicas Virgin. En segundo lugar, llevé a mi familia en mis viajes de negocios, particularmente cuando los chicos eran más jóvenes.
Esto significaba que no pasábamos mucho tiempo separados y yo veía frecuentemente a los niños cuando paseaban cerca de las reuniones, una bienvenida distracción de las preocupaciones del mundo de los negocios. Es asombrosos cómo la brillante sonrisa de un niño o sus preguntas pueden ayudar a descargar la tensión de la situación más difícil.
Muchos emprendedores no tienen la opción de operar una compañía desde su casa o llevar a su familia en viajes largos de negocios. Pero encontrar una solución que funcione en su caso es crucial para mantener un juicio saludable y una perspectiva a largo plazo. En mi caso, mi tiempo de descanso dedicado a disfrutar de la vida y de mi familia me ha ayudado a construir Virgin.
Nunca me arepenti de llevar a mi familia con migo y comparto plenamente lo que dice este Hombre. Muchas gracias.
Yo pienso que es algo que se tiene que aprender,por mi lado desafortunadamente estoy tratando de manejarlo,en estos momentos mi empresa esta creciendo y como uds saben es de mayor respnsabilidadesy mayores desafios por cumplir con tus obligaciones, pero les doy gracias porque por este tipo de articulos nos desconectamos un poco y nos sentamos a reflexionar , a planear y lo mas importante a colocarlo en marcha.
Hace dos meses inició el trabjao en nuestro empredimiento llamado ca²r, es verdad que nos falta comprometer a nuestros hijos, para que aprendan competencias para sus vidas, excelente el reportaje.