Anna Meyer – fuente: INC
Los mejores consejos son fáciles de entender, pero difíciles de ejecutar, según Marshall Goldsmith, coach ejecutivo y autor de Triggers, Mojo, y What Got You Here Won’t Get You There.
En un discurso virtual ante los galardonados del Inc. 5000, Goldsmith explicó que mientras entrenaba a líderes de empresas como Ford, Pfizer y la Clínica Mayo, aprendió que es fácil descartar las estrategias de liderazgo más simples porque parecen demasiado fáciles. Pero a menudo son las estrategias sencillas las que marcan la mayor diferencia para los fundadores porque son más fáciles de comprometer a largo plazo.
«Eres un director general, eres una persona muy ocupada, no tienes mucho tiempo. Si te doy cosas que te absorben demasiado tiempo, no las vas a hacer de todos modos», dice Goldsmith, y añade que este método probado sigue siendo uno que vale la pena enseñar hoy en día debido a su éxito comprobado.
Aquí, Goldsmith comparte un método sencillo para convertirse en un líder más eficaz.
1. Acostúmbrese a pedir opiniones
Goldsmith argumenta que los líderes no se hacen una simple pregunta lo suficiente: ¿Cómo puedo ser mejor? Los líderes deben adquirir el hábito de preguntar cómo pueden ser mejores gestores, jugadores de equipo y vendedores. Muchas veces, sus empleados y compañeros le señalarán cosas que ni siquiera están en su radar.
Algo que aprendió del consultor de gestión Peter Drucker destacó a Goldsmith cuando se trata de pedir retroalimentación. «Dijo: ‘El líder del pasado tendrá que [explicar] a los líderes del futuro cuando pregunten por qué gestionamos a los trabajadores del conocimiento cuando ellos saben más que nosotros», dice Goldsmith. En otras palabras, nunca dejes de aprender de tus empleados y compañeros.
2. Escuche las aportaciones, no las discuta
Una vez que pidas una opinión, Goldsmith dice que luches contra todo impulso de dar tu opinión y que, en cambio, escuches atentamente. Sea cual sea el feedback que recibas, toma nota, da las gracias, no juzgues y no hagas demasiadas promesas. En su lugar, Goldsmith sugiere que digas: «Voy a involucrarte a ti y a los demás implicados y voy a hacer un seguimiento».
Algo importante que los líderes deben tener en cuenta es que el liderazgo no es un concurso de popularidad y, por lo tanto, no debes sentirte obligado a satisfacer a todos. «Nunca prometiste como líder hacer todo lo que la gente sugiere», dice Goldsmith. «Prometiste preguntar y escuchar».
3. Haz un seguimiento
Aquí es donde actúas sobre lo que prometiste. La clave para hacer el cambio, según Goldsmith, es que tienes que hacer un seguimiento y mantenerlo.
«No se mejora cuando se escucha un discurso. No se mejora porque se lea un libro», dice. «Hay que trabajar en ello, hacer un seguimiento y mantenerse».