El emprendedor debe tener la habilidad de exponer su negocio en el menor tiempo posible; debe decir en pocas palabras y claramente qué necesidad cubre su producto o servicio.
La primera impresión cuenta y mucho. Los emprendedores necesitan pulir su discurso como una tarea diaria para poderlo exponer en cualquier momento ante inversionistas potenciales.
En las escuelas de negocios le llaman elevator speech o charla de elevador por su cualidad de ser una frase muy corta que tendría que ser escuchada entre un piso y otro. El emprendedor debe ser capaz de decir en menos de 30 segundos cuál es la idea o potencial de su compañía para enganchar o atraer la atención del inversionista.
“No tienes dos horas, sólo 30 segundos para conectar con el empresario, si la idea lo emociona después te dará el tiempo para que le cuentes más. Puedes usar una analogía o metáfora para dar una idea clara, como: ‘somos el Fedex del reparto de comida’, después podrás contarle cómo funciona tu negocio”, explicó Nader Fathi, mentor de la aceleradora de negocios tecnológicos Plug and Play.
Las estrategias indispensables que debes poner en práctica al momento de hablar de tu emprendimiento son:
Las palabras precisas
El discurso debe ser muy claro sobre la necesidad que cubre el producto o servicio y destacar cuál sería el impacto que tendría en el mercado si se potenciara, señaló Haru Yamasaki, directora general del programa TechBa.
Con la camiseta puesta
Los accionistas potenciales buscan a personas que realmente estén apasionadas por su proyecto y que logren transmitir esa energía. “Al final me está convenciendo porque está convencido de sí mismo de que él es el mejor”, explica Alejandro Cobos, gerente de relaciones internacionales de la aceleradora Plug and Play.
Frases cortas
Al momento de hablar con los inversionistas potenciales, los emprendedores deben mirar a los ojos a su interlocutor, no centrarse en sus notas que de preferencia debe usar como guía con ideas de dos o tres palabras, recomienda Nader Fathi.
Habla con tu cuerpo
Fathi también aconseja usar el lenguaje corporal como un soporte del discurso de venta de la idea, utilizar las manos para hacer énfasis en las partes de la presentación que el emprendedor quiere.
La práctica hace al maestro
Antes de hacer tu presentación es necesario que entrenes mucho, no se puede olvidar que se perfeccionara conforme hagan más y más presentaciones.
Prepara las respuestas
Los emprendedores deben estar listos para las miles de preguntas que los inversionistas les harán, incluso de forma ácida.
“Es muy importante procurar que, aunque no tengan toda la información, sí el que puedan demostrar con seguridad que tienen un cabal conocimiento de su proyecto”, aconseja Haru Yamasaki.
Buscar inversión es una tarea compleja
Tener un proyecto sólido y con tracción, es decir, cifras de usuarios, clientes o ventas, ayuda a convencer a los potenciales aliados, sin embargo, el emprendedor debe mantenerse motivado a pesar de que no consiga tan fácilmente al socio que requiere.
“Es muy importante no darse por vencido porque buscar inversión es una tarea que no es nada trivial, es compleja, es muy importante que lo tengan en mente los emprendedores y que esté preparado a un no por respuesta”, aconseja Haru Yamasaki