La toma de decisiones es lo que diferencia a un directivo de un ejecutivo. La toma de decisiones correctas es lo que diferencia a un gran directivo de otro. (Ojo, las malas decisiones también nos hacen mejores profesionales). Lo que está claro es que tomar decisiones tiene mucha relevancia en el mundo de los negocios. Por eso hoy analizamos las 10 formas de tomar decisiones más habituales. Recomendamos combinar varias para garantizar el éxito.
Confía en tu intuición: depende del momento y la decisión, es arriesgado, pero así es la vida. Eres un profesional por algo, tu instinto no debe fallarte (casi nunca)
Domina la información: estamos hartos de decirlo, una de las principales causas por las que fracasan negocios y directivos es por no tener información relevante y oficial.
Reflexiona en solitario: a veces necesitamos el silencio para ordenar la cabeza, eso no quiere decir que trabajemos solos, pero sí que tenemos que parar y escuchar nuestra propia opinión. Cuidado con las emociones, aquí pueden jugarte una mala pasada
No decidir: este blog no es para ti.
Analiza las cifras: eso te servirá para tomar decisiones con conocimiento de causa. No vayas a ciegas, no se lleva.
Pide consejo: no a un colectivo en general, si no a una persona de tu confianza. Alguien que te inspire y cuyo criterio consideres.
Actúa y luego piensa: no es nuestra recomendación, incluso en momentos de crisis, analizar las consecuencias de una acción es estratégico… si actúas sin pensar… puedes cagarla mucho, mucho.
Realiza una consulta pública: a veces debatir es una buena manera de ver los pros y los contras de tu idea y acertar con la decisión.
Déjaselo al azar: estás definitivamente loco de atar y o bien eres un genio o bien eres un necio. En cualquier caso el mundo es de ambos