Cuando faltan menos de dos semanas para el evento de marketing del año, el WOM Marketing Update sigue sumando nuevos contenidos.
En esta ocasión, Paco Underhill, reconocido como el mayor especialista en shopper understanding del mundo, nos presenta las conclusiones de su nuevo libro, What Women Want, lanzando a fines de 2010.
En él, explica que las mujeres tienden a ser más resistentes a la recesión, tienen más dinero y menos tiempo así que los negocios se están adaptando a los gustos femeninos, desde cambiar los diseños de las tiendas hasta instalar cuartos de baño más agradables.
Paco Underhill se basó en sus experiencias en una consultora internacional y una firma de marketing para escribir «What Women Want: The Global Market Turns Female Friendly» («Lo que quieren las mujeres: el mercado global se vuelve amigo de lo femenino»), en el que explora cómo los negocios están respondiendo a un creciente poder económico de las mujeres.
Tradicionalmente las mujeres trabajaban en sectores como la educación y la sanidad, que tienden a ser más resistentes a los reveses económicos, mientras que más hombres lo hacen en sectores como la construcción y la fabricación, que generalmente soportan el mayor peso de una recesión.
Más del 80% de la pérdida de empleos durante la reciente recesión tuvo un impacto en los hombres, dijo Underhill, y desde el 2005 las mujeres menores de 30 años han ganado más dinero que los hombres en las grandes ciudades de Estados Unidos.
Underhill dijo que encontró una menor preocupación por las clientes mujeres cuando hizo inspecciones por sorpresa a las empresas.
«Yo iba al baño de mujeres, por ejemplo, y preguntaba ‘¿Crees que tu mujer entraría aquí?’ y la respuesta generalmente era ‘no'», dijo a Reuters. «Debemos prestar atención al consumidor femenino», apuntó.
Underhill dijo que la tienda minorista estadounidense Best Buy había conseguido una ventaja sobre sus rivales porque fue «mucho más rápido a la hora de captar las preferencias femeninas y lo que querían: educación, interacción, y sensación de tranquilidad, de no agobio».
El autor describió un «ambiente favorable a las mujeres» como aquel que las hace sentirse en casa, cómodo, seguro, higiénico, respetable y bajo control. La suciedad en los vestuarios, luz insuficiente, recepciones de hoteles «horribles», un servicio al cliente brusco y espejos deslucidos son una garantía de huida de la de las clientes, dijo.
El diseño de una tienda atractiva para el público femenino tiene unos bordes suaves, con predominio de madera más que de acero inoxidable y sillas confortables.
Con la mujer moderna haciendo malabares con el trabajo, la casa y los niños, el tiempo es un bien escaso, y esa es una de las razones por las que los grandes almacenes de estilo antiguo están perdiendo terreno frente a los comercios especializados, dijo Underhill.
Los grandes almacenes originales estaban diseñados «para la mujer de clase media que entraba por la puerta con la mitad del día para perder», escribió.
«Hoy, aunque la televisión por cable, las películas, las revistas e Internet no han usurpado exactamente el sitio de los grandes almacenes, han proporcionado lugares alternativos donde poder ver las últimas tendencias de la moda», apuntó.
Aunque las empresas se están adaptando a un ritmo cada vez mayor a las necesidades de las mujeres, Underhill dice que el mundo todavía pertenece en gran parte a los hombres, está diseñado por los hombres y dirigido por ellos.
Hacer el entorno más atractivo a los gustos femeninos no significa que vaya a ser menos atractivo para ellos.
Más información respecto del WOM Marketing Update en www.wom-latam.com/wmu