Con 49 millones de habitantes, de los cuales la mitad está por debajo de la línea de pobreza, según las cuestionadas cifras oficiales, el país anfitrión activará a través de la industria del fútbol su economía, la más vigorosa de un continente desfavorable.
A través de un pedido de la FIFA, la consultora estadounidense Grant Thornton elaboró en diciembre pasado un informe en el que se estima que el impacto económico del mundial sería de unos 7325 millones de dólares. Es decir, la economía sudafricana tendrá ingresos adicionales y un crecimiento en su PBI.