Telefónica ha lanzado la red internacional de fondos tecnológicos de capital riesgo, Amérigo, con el objetivo de identificar y financiar, en su etapa de crecimiento y expansión, compañías innovadoras de alto impacto en el marco del nuevo mundo digital, y de convertirse además en una referencia para emprendedores en todo el mundo, más allá de los tradicionales núcleos de desarrollo del venture capital tecnológico, como Silicon Valley y Londres.
Impulsada desde Telefónica Digital, esta iniciativa sienta las bases para crear una red global de fondos de innovación que va a funcionar como plataforma abierta a la participación de otras empresas e instituciones, tanto públicas como privadas. Desde esta red se impulsarán nuevos proyectos de innovación tecnológica, a través de financiación directa gestionada por profesionales independientes del sector de capital riesgo.
El programa Amérigo inicia su actividad con un capital comprometido de unos 300 millones de euros, aportados por sus entidades impulsoras –en concreto Telefónica ha comprometido inicialmente inversiones de 68 millones de euros para los próximos cinco años– y los fondos suscritos al programa. Este capital inicial permitirá gestionar proyectos empresariales por valor de 1.000 millones de euros.
En una primera etapa, el programa se está canalizando ya en cuatro países, en concreto, España, Colombia, Chile y Brasil, donde Amérigo cuenta ya con la adhesión de los gobiernos y entidades financieras públicas de estos países así como de otros socios privados.
En España, esta iniciativa está apoyada en el marco del programa Innvierte por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), dependiente del Ministerio de Economía y Competitividad. Además, localmente el programa ha permitido realizar ya inversiones en cinco compañías tecnológicas que cuentan con 3,5 millones de usuarios.
Desde la red Amérigo se están seleccionando los mejores gestores de fondos tecnológicos de capital riesgo en cada país, especializados en el sector TIC. A través de estos gestores y los fondos tecnológicos constituidos para canalizar los recursos financieros, se pretende identificar la capacidad innovadora y emprendedora local y promoverla, con inversiones en el entorno de un millón de euros por proyecto, aunque variable en función del tamaño y la situación del proyecto.
Esta red global de fondos de innovación se convierte así en un mecanismo fundamental e independiente para financiar la innovación allí donde haya talento, esto es, en cualquier región del mundo. El objetivo es poder invertir más allá de los considerados hasta ahora como centros de referencia de capital riesgo y enfocar estos recursos en otros países europeos, Latinoamérica y Asia, entre otras áreas.
Además, gracias a su función como catalizador del talento local, esta red global de fondos de innovación también contribuye al desarrollo tecnológico y digital, y el incremento de la competitividad industrial en todas las regiones de actuación, ya que garantiza la consolidación local y expansión internacional de propuestas disruptivas, de nuevos servicios y modelos de negocio, en un ecosistema de innovación donde también participan tanto las Administraciones públicas locales como las compañías tecnológicas maduras ya existentes en esos mercados.
fuente: Sala de Prensa de Teléfonica