Carson Kropfl trató de meter su patineta en su casillero de su escuela o en su mochila, por lo que este pequeño de 12 años decidió resolver el problema por sí mismo. Fue entonces que decidió abrir su empresa Locker Board, una startup que fabrica monopatines pequeños con materiales reciclados. En los últimos meses su negocio ha vendido 310 patinetas, ha generado US$ 18,000 en ingresos y una inversión del mismísimo Richard Branson.
El estreno de la novena temporada de la versión estadounidense de Shark Tank en ABC contó con Branson como “tiburón” invitado y con la propuesta del joven patinador. Kropfl ensayó su pitch todos los días antes de dormir y el día que se presentó al programa, recibió ofertas de inversión de Branson, Mark Cuban y Robert Herjavec. En última instancia, Kropfl aceptó la oferta de Branson 65,000 dólares a cambio del 20% de su compañía.
“Él me hizo la oferta más alta y me dijo que yo le recordaba a sí mismo cuando era más joven”, dijo Kropfl a Entrepreneur Estados Unidos. “Quiero que esto se convierta en una compañía internacional que desarrolle productos frescos e inspire a la gente a soñar duro y trabajar duro” comentó el pequeño sobre la venta de su segunda empresa.
Para Carson, ser un emprendedor joven tiene sus ventajas. “Creo que lo mejor es que obtienes ayuda y mentoría de muchas personas”, comentó el joven empresario que tiene como mentores a Noah Reinhertz, líder de sostenibilidad de Nike, y Wing Lam, cofundador de Wahoo Fish Taco. Además de aprovechar cada momento, Carson dice que el otro mejor consejo que ha recibido es: “Siempre seguir soñando y nunca rendirse”.