La educación universitaria se ha convertido en el requisito para ingresar en la era del conocimiento y para esto se necesitan instituciones educativas capaces de ofrecer esta capacitación.
Es el requisito para ingresar en la era del conocimiento que demanda ciudadanos con un aprendizaje continuo. Hay pocos graduados y menos todavía en las carreras que más de precisan, mientras que los pobres no tienen acceso a ella a pesar de ser gratuita.
El capital humano es más importante que capital físico y los recursos naturales; y es creado por la educación. El nivel educativo es el piso para el ingreso al mundo laboral. Así como el diploma de la escuela secundaria fue el pasaporte en la era industrial del siglo XX, hoy la educación universitaria se ha convertido en el requisito para ingresar en la era del conocimiento y para esto se necesitan instituciones educativas capaces de ofrecer esta capacitación.
Una sociedad intergeneracional
Es necesario que las personas con menos recursos accedan a la universidad. El Fondo de Solidaridad del Uruguay (FSU) fue creado hace 25 años para administrar becas para estudiantes con recursos escasos y ayudar a que puedan estudiar.
El FSU fue creado por Luis Alberto Lacalle (padre del actual presidente), y sigue vigente más allá de los cambios de gobierno, lo que debe ser así con las políticas de Estado. Desde su creación, se modificó, pero conservó su característica de solidaridad intergeneracional: los profesionales brindan apoyo a quienes inician o promedian sus estudios.
En los primeros años, los graduados que habían recibido la ayuda del Fondo eran pocos, siendo el 1% del total en 2001, en 2011 alcanzó el 15% y en 2019 fue el 22% del total. Las evidencias indican que los receptores de becas logran un impacto positivo disminuyendo las probabilidades de abandono y fortaleciendo su dedicación al estudio y la cantidad de materias aprobadas.
El monto de la beca es de 225 dólares. No hay exigencias académicas para solicitarla, pero para renovarla debe aprobar el 50% de lo que lleva cursado de la carrera, esto es un sano estímulo a la dedicación al estudio. El FSU se financia con los aportes que deben realizar los graduados cuyos ingresos mensuales sean superiores al mínimo no imponible de alrededor de 915 dólares, que comienzan a aportar 5 años después de haber aprobado la última materia de su carrera, y durante los siguientes veinticinco años, o cuando se alcancen 70 años de edad o se jubilen.
En la Argentina, la provincia de Entre Ríos ha creado el Instituto Becario, encargado de otorgar becas a estudiantes y se financia con recursos del estado provincial, y con el impuesto al ejercicio de profesiones liberales, que grava el 2 por ciento de su facturación total.
La igualdad de oportunidades no se logra con discursos; se requieren medidas concretas y efectivas. La adopción de esta medida permite becar a estudiantes con escasos recursos económicos, y aumentar la graduación, en las carreras científicas y tecnológicas del futuro.
Los años que vienen serán críticos para aprender de los errores del pasado y encauzar el sendero no solo del crecimiento económico, sino también de la igualdad y la inclusión social.
La catástrofe educativa
La educación ocupa el último lugar en las preocupaciones de los ciudadanos en Latinoamérica. Solo el 3% la considera muy importante. Los asiáticos invierten mucho más en la educación de sus hijos. Hay 758.000 estudiantes asiáticos en universidades estadounidenses y solo 80.200 de América Latina. En las pruebas internacionales PISA, para estudiantes de 15 años en lectura, matemáticas y ciencias, los asiáticos sacan las mejores calificaciones, mientras que los latinoamericanos se ubican entre los peores.
Algunos países abandonan la prueba PISA. En lugar de medirse y tratar de corregir su educación, hacen una negación total de la crisis. Vivimos en un mundo donde el trabajo mental se cotiza cada vez más, y las materias primas cada vez menos. La solución no vendrá de los gobiernos. Invertir en formar profesores rinde frutos a futuro y los gobiernos solo quieren ganar las próximas elecciones. La solución es crear una cultura obsesiva por la educación.
Cuando la gente habla de los mayores problemas de América Latina, por lo general comienza citando la corrupción gubernamental, el crimen y el desempleo. Lo que falta es crear una cultura familiar de obsesión con la educación. No solo es el fracaso de los gobiernos en mejorar los estándares educativos, sino de la falta de una conciencia de la ciudadanía sobre la importancia de tener buenos sistemas educativos.
La nueva encuesta de Latinobarómetro
Esta consultora regional de encuestas con sede en Chile, muestra que la educación ocupa el último lugar entre las mayores preocupaciones de la mayoría de los latinoamericanos, muy por debajo de la economía, la política y la corrupción. Solo el 3% de los latinoamericanos cita la educación entre los mayores problemas de su país.
Al contrario de lo que muchos creen, la mayoría de los estudiantes asiáticos no son becados por sus gobiernos. La mayoría de ellos estudia en el extranjero con los ahorros de sus familias.
El cambio en la modalidad educativa
El cambio no debe ser solamente en la cultura de la gente sino en el modo en el cual se enseña. La implementación de técnicas de estudio innovadoras da resultados positivos en el aprendizaje, según ratifica la auditora PricewaterhouseCooper. Los estudiantes de UPN (la Universidad privada del Norte de Perú), que aprobaron los cursos de metodología intelectual mejoraron en 281% su comprensión y rapidez de lectura con el sistema impartido por el Instituto de Lectura Veloz, Estudio y Memoria (ILVEM), siendo la Universidad Privada del Norte (UPN) la única en implementarlo en Perú.
El método evalúa primero el proceso intelectual de los jóvenes, analiza la recepción de la información, memorización, expresión y aplicación, es decir, el uso inteligente del saber adquirido. Posteriormente, en base a los avances de las neurociencias en la educación, se dictan cursos para mejorar las habilidades de aprendizaje. No es una novedad que el Perú es uno de los países con el menor índice de comprensión lectora en el mundo, lo que lograron superar cambiando sus métodos tradicionales por técnicas educativas de avanzada.
Aprender en la acción
Uno de los cambios más importantes que demanda la formación universitaria es aprender a poner en marcha las teorías, ya que no hay nada más práctico que una buena teoría. ¿Qué debía haber pasado- Qué pasó- Cuál es la causa de la diferencia. Qué aprendimos de la experiencia? Si el error no se analiza, la curva del olvido lo elimina e impide aprender de la experiencia. La reflexión es parte del trabajo, no se puede vivir sin aprender, sin seleccionar lo bueno y eliminar la basura, porque si la basura entra se refleja en nuestros actos. Edison agradeció los 100 errores previos, porque sin ellos no hubiera inventado la lámpara eléctrica. El que no hace no se equivoca pero tampoco aprende.
La mejor inversión
El cerebro puede crecer en edad o en tamaño pero el desarrollo no es sólo crecer sino saber hacer. La materia prima del cerebro es la materia gris, y no crece simplemente como la lechuga sino con una educación de excelencia. El cerebro no fue creado para el hombre, es el resultado de la evolución. Heredó los instintos del reptil, las emociones del mamífero y en su corteza se instaló el pensamiento. Como estas áreas no conviven armoniosamente, el cerebro desarrolla sólo el 10% de su capacidad potencial.
Si no se desarrolla el cerebro lo moldea la realidad y se corre detrás de los sucesos. En piloto automático no se planea el futuro y el estudiante se limita a reaccionar cuando algo le pasa. Mientras la tecnología sube por el ascensor el ser humano sube por la escalera, eso genera tu brecha digital. Hay que invertir en el cerebro, si no se cree en la educación de la mente, se sigue probando con ignorar sus beneficios.
Crecimiento o desarrollo
Al imitar la naturaleza hay que diferenciar el crecimiento del desarrollo. Crecer es un proceso que dura años, el desarrollo requiere décadas. Una educación de excelencia es la industria pesada que produce el desarrollo enfrentando los desafíos. La fuerza contraria al desarrollo es conservar la energía, cuidarse y no arriesgar. Crecer es tener, desarrollo es inteligencia al usar el capital intelectual. En los asuntos humanos hay que volver a ser niño, rejuvenecer y volver a aprender.
Destrezas genéricas y técnicas
La primera tecnología creada por el hombre fue la lectura que remite al cazador agazapado estudiando las huellas de su presa. Esta tecnología genérica nos permitió comunicarnos de modo inimitable y hoy se encuentra devaluada y se llegó al analfabetismo funcional que es saber leer y no hacerlo por falta de tiempo. La vida es muy corta para aprender sólo de la experiencia, con el cuerpo y a los golpes.
Entrenamiento cognitivo
En las partidas de ajedrez rápido cada movida se hace en 5 segundos, y actúa exclusivamente el sistema del cerebro «rápido» o instintivo emocional. Pero el ajedrez es una actividad racional que exige de análisis y esfuerzo mental consciente. En las partidas rápidas el sistema «lento», que controla las ideas del sistema rápido, no tiene tiempo de emitir juicios y valoraciones y no puede cuestionar el uso de los patrones aprendidos por el rápido que acude al depósito que la experiencia le ha proporcionado.
No se puede cuestionar la utilidad de los patrones, porque su prioridad es dar una respuesta inmediata al contexto. El entrenamiento cognitivo transfiere algunos patrones útiles del sistema lento al sistema rápido.
Los Imperios del conocimiento y de la mente deberían asociarse
Transitamos de la economía tradicional a la economía del conocimiento. Un joven llamado Bill, quien no terminó sus estudios en Harvard, logró tanto dinero como el que producen los habitantes de varios países juntos. Si Bill cambia sus cuentas de bancos mueve la economía de un país. Esto distingue a la vieja de la nueva economía. Con la historia no basta. Hay países milenarios y pobres como Egipto y otros que se convirtieron en ricos como India o China. Hay países jóvenes y ricos como Australia y Nueva Zelanda. En América Latina no. Aquí se piensa en crecer controlando el presupuesto, la inflación y exportando materias primas. Un país no es inmune a la tecnología, su edad no hace la diferencia, si no genera tecnología puede volverse irrelevante y desaparecer. Hay que utilizar franquicias sociales e imitar el éxito de países en programas como el FSU de Uruguay.
La educación universitaria debe implementar la enseñanza individualizada. Bill Gates debió abandonar la universidad porque se aburría y otros lo hacen porque disminuyen su autoestima ante estudiantes más rápidos. Mientras tanto el docente debe hacer maravillas para coordinar grupos con distintos niveles de inteligencia entre sus alumnos.
No son su tamaño ni sus recursos
Japón es un territorio pequeño que no sirve para la agricultura ni la ganadería, pero su territorio es una fábrica flotante que importa materia prima de todo el mundo, la convierte y exporta generando riquezas. Suiza sin océanos tiene una flota muy importante, sin cacao produce el mejor chocolate del mundo, cultivando el suelo 4 meses al año genera productos lácteos de calidad, exporta servicios y por su seguridad es la “caja fuerte” del mundo. El éxito de un país no depende de sus recursos, sino del conocimiento. América Latina duplicó sus patentes pero Corea las llevó de 50 a 3400 al año. En 1999 IBM produjo tantas patentes como167 países juntos.
Masas irreflexivas
El coeficiente intelectual promedio se redujo al empobrecerse el lenguaje, reducir el vocabulario, las sutilezas lingüísticas y el pensamiento complejo. Sin los tiempos verbales se habla siempre en un tiempo presente incapaz de proyectarse al futuro. Eliminar mayúsculas y puntuación fueron los golpes fatales. Eliminar la palabra señorita es renunciar a la estética y no mostrar las etapas que separan a una chica de una mujer. Menos verbos conjugados impiden expresar emociones y procesar pensamientos. La violencia proviene de la incapacidad de describir. Los dictadores traban el pensamiento rebajando el número y el significado de las palabras
¿Cómo reflexionar sin el condicional? ¿O pensar el futuro sin conjugar el tiempo? ¿O capturar una sucesión sin distinguir entre lo que podría haber sido, lo que fue, lo que es, lo que podría ser, y lo que será? Practiquemos el lenguaje aun siendo complicado. Simplificar la ortografía para bajar defectos, abolir géneros, tiempos, matices, destruye el IQ.
Los principios de la educación
Fueron consagrados por la UNESCO en su informe sobre la educación del siglo XXI. Allí privilegió las 4 A del aprendizaje: Aprender a ser, Aprender a aprender, Aprender a hacer, a trabajar, Aprender a convivir implica el descubrimiento gradual del otro, de lo que siente y piensa; de la capacidad de trabajar en equipo, de superar los obstáculos y compartir proyectos comunes.
La UNESCO recurrió a la fábula de Jean de La Fontaine: El labrador y sus hijos. Hijos «Guardaos (dijo el labrador) de vender el patrimonio, dejado por nuestros padres, veréis que esconde un tesoro.» ¿Y cuál es ese tesoro? La educación es todo lo que la Humanidad aprendió sobre sí misma sobre las virtudes del trabajo a lo largo de la historia: «El padre fue sabio al mostrarles, antes de morir, que la educación encierra un tesoro.
Know-how
El saber hacer conecta educación y trabajo. Porque Aprender sin saber hacer es no aprender nada. Antes de ir a la escuela aprendemos imitando el ejemplo familiar. Muchos profesionales no saben decidir sobre temas de su competencia. El sistema educativo no los prepara para trabajar, para vivir experiencias como protagonista, lo trata como a un espectador. Estar sentado escuchando al maestro es antinatural ya que fuimos diseñados para estar en movimiento. Para aprender hay que errar y distinguir el error bueno que es el error nuevo. Aprender es arriesgar y la pasividad no tiene riesgos. Hay que aprender la quinta A de la educación, es aprender a eliminar los conocimientos que ya no sirven y los vicios o malos hábitos que condicionan la conducta y por ende los resultados.