Una completa guía sobre las diferentes formas de pensar para desarrollar el buen hábito de usar la cabeza.
Todo razonamiento es pensamiento pero no todo pensamiento es razonamiento. La mente juega contra la razón de modos diversos: es pésima para calcular probabilidades, cree encontrar patrones inexistentes y les da significado divino, que hay causalidad donde hay solo casualidad, que puede orientar el curso de los hechos, que la oración cura a un enfermo y supone que hay gurúes con poderes especiales que generan ciertos resultados que en verdad son de naturaleza aleatoria.
Las conclusiones erróneas derivan de asociaciones incorrectas como en el siguiente test:
Imagine una sábana blanca, una tiza blanca y una camisa blanca. Ahora responda en un segundo: ¿qué bebe la vaca? Por un error al asociar muchos responden leche en vez de agua.
Factores psicológicos
El cerebro posee incluye instintos, emociones y pensamientos, que no armonizan dntre sí. Dijo Pascal que“el corazón tiene razones que la razón no entiende”. Mientras que la emoción lleva a la acción, la razón incentiva a sacar conclusiones. Así se disocian las emociones de los razonamientos.
La entropía da prioridad a conservar la energía. Es tan poderosa que precisa el descanso, ponerse en piloto automático, para no derrocharla. El menor esfuerzo (entropía) es más potente que buscar lo nuevo (creatividad). Crear requiere esfuerzo y energía, va contra la corriente y necesita aprendizaje.
Pensamiento automático o reflexivo
La condición necesaria es la relevante, no la aparente. Todo efecto tiene su causa. Pero la regularidad de los sucesos crea una ilusión. El método científico la elude combinando la inducción y la deducción para comprobar sus hipótesis. Experimenta para conocer la conexión causal. El cerebro se parece a una ciudad de noche, con algunas luces encendidas. A veces visitamos las zonas oscuras, buscando ideas para hallar soluciones creativas. Pero lo habitual es basarse en lo viejo conocido más que en lo nuevo por conocer.
El cerebro aplica la ley de menor esfuerzo y se dirige a lo que sabe. Pero el problema es algo nuevo que se soluciona con ideas. Se necesita saber encender y conectarse con otras neuronas, pero los patrones de pensamiento crean redes neuronales fijas y dominantes. El proceso creativo las desestructura mientras la memoria apela a los recuerdos, y entonces aplica conocimientos que no se adecuan a la ocasión.
Pensamiento rutinario o creativo
Un problema es algo nuevo y no puede resolverse con lo que sabe de memoria. No se puede pensar sin un problema como guía. Muchos confunden pensamiento con memoria, como cuando dicen “estuve pensando en vos”, o con creencias como en: “yo pienso de esta manera”. Por eso es un error el cartel THING (piense) que aparece en muchas empresas, porque a nadie se lo puede obligar a pensar sin un problema a la vista. El niño aprende casi todo antes de ingresar a la escuela.
La educación le enseñará a retener respuestas que automatiza. Hay algo muerto en las respuestas ya que así el niño no piensa, se le enseña a no pensar o que pensar es solo responder. Pensar de manera creativa requiere salir de esa cárcel y generar asociaciones y conexiones no convencionales. Pero no se las enseñan.
El pensamiento reproductivo, repite soluciones, algo que ocurrió. Luego el cerebro selecciona el enfoque más prometedor y excluye otros. Trabaja con patrones que simplifican lo complejo, automatizan las respuestas y reiteran lo típico o lo poco original. Pensando como siempre pensaste, vas a obtener idénticas conclusiones. El pensamiento creativo se pregunta sobre formas distintas de ver en lugar de bucear en la memoria. La idea es ampliar las respuestas, muchas de las cuales no serán convencionales y otras serán únicas. La trampa de tener todas las respuestas es que no se caerá del cerebro ni una sola idea.
Pensamiento vertical o lateral
Para Nietzche “los métodos son la mayor riqueza del hombre”. Si se carece de ellos se usa la fuerza bruta que a larga conduce al burn out o cerebro quemado. En materia creativa la mezcla de conceptos desinhibe el pensamiento para dar forma a nuevas ideas por combinación. Lo habitual es etiquetar en categorías separadas que no se tocan. Es como si el pensamiento se congelara. Cada cubito es una categoría; así también el pensamiento se congela. Hay métodos que evitan la fuerza bruta y los rendimientos decrecientes. Cuando a una gota de agua se le agrega otra, forman una sola gota de agua, solo que más grande. Cuando a un concepto se le agrega otro, puede surgir un concepto nuevo.
Pensar por patrones cambia la realidad por la creencia. Este automatismo hace que el cerebro ignore la evidencia. El pensamiento lateral enseña a desafiar y evitar los caminos trillados o los pensamientos estructurados. Un error común es querer mejorar haciendo más de lo mismo, resistir el cambio y convivir con el problema.
Para el pensamiento lateral la solución no es hacerlo mejor, sino de otro modo. Una teoría única dominante o un razonamiento mecánico traba las opciones y marca la ruta al pensamiento que no puede transgredirlo.
El Role Playing + la estrategia de 6 sombreros para pensar evita caer en el automatismo. Para comprender usa el sombrero blanco que provee información y el rojo que aporta la emoción. Para analizar las causas juega con el blanco, para generar la acción positiva usa el amarillo; para evaluar alternativas, el negro; para generar, el verde; para decidir o planear, el rojo y el blanco y para dirigir, el azul. Para pasar a la acción: se saca los sombreros, porque el exceso de análisis provoca parálisis.
Pensamiento intuitivo y racional
Un error común es generalizar sin fundamento desde un hecho particular y extrapolar las conclusiones. Otra falla es ver todo como bueno o malo, sin matices. Algunos creen que pueden leer la mente del otro y saber lo que piensa. Están los que suponen conocer el futuro, una capacidad que no tienen, o los que usan sus emociones para justificar sus pensamientos y su modo de actuar.
Ante una situación que sale de control, imaginan desgracias y consecuencias negativas. La solución es ser consciente de esos prejuicios y poder observarlos. La trampa es que se ocultan a la percepción. Conviene concentrarse en una cosa a la vez. Las personas que hacen varias cosas a la vez lo que hacen es cambiar velozmente de una a otra.
Hay un costo asociado, el cerebro no está hecho para trabajar así sino para enfocar. La facultad de domar la atención vagabunda, es la raíz misma del juicio, del carácter y de la voluntad.
Pensar por conveniencia o en función de la realidad
Muchas decisiones siguen tendencias que dependen de los intereses y de la personalidad, que llevan a pensar que algo es cierto o mejor, cuando no lo es. Estas decisiones concuerdan con creencias y no consideran la evidencia en contrario y se aferran a eso invirtiendo más recursos a pesar de los fracasos. A veces se usan analogías sencillas para encontrar la lógica en problemas complejos. Violan las leyes estadísticas al basar las decisiones en muestras pequeñas.
La ilusión del control se da por exceso de confianza y arrogancia o por confiar demasiado en la propia capacidad. Al aumentar sin pruebas la probabilidad de éxito no hacen las investigaciones ni calculan la probabilidad.
Les resulta más fácil imaginar el resultado por pálpito que hallar la causa. Creen que cuanto más son, mejor será la decisión. Por presión social y evitar peleas, toman decisiones por mayoría alejadas de la verdad.
Pensar por anticipación o por regresión al pasado
La capacidad de aprendizaje del cerebro se debe a su capacidad de cambio, conocida como neuroplasticidad. La mente, con el pensamiento, puede modificar la estructura neuronal. No está biológicamente predestinado a ser menos creativo con la edad. La juventud lo lleva aceptar ideas más radicales. Buscando desafíos se sigue pensando como un joven aun con el pelo gris.
La actividad mental puede dar forma a redes neuronales muy concurridas que reciben un flujo sanguíneo mayor, lo que les provee más glucosa y más oxígeno; y cuando las neuronas se disparan juntas, se refuerza la sinapsis existente y se forman nuevas sinapsis. Las que permanecen inactivas se marchitan con una especie de poda, lo que no se usa se pierde. Por otro lado, existen estudios sobre el modo en que las emociones positivas facilitan el aprendizaje, aumentando la conexión neuronal y consolidando el cambio.
Dado que el cerebro cambia su estructura, la experiencia personal importa, más allá de su impacto subjetivo. Suceden cambios que afectan el bienestar y las relaciones. Hay razones para ser gentil con uno mismo, cultivar experiencias y aprender de ellas. Es que impactan en el cerebro, cambian el presente y crean el futuro.
Pensamiento por sistema 1 o por sistema 2
Se tiene una sola mente pero varias formas de pensar. El sistema 1 es rápido y automático, opera sin ningún esfuerzo y responde de memoria. Rastrea la información que se adecue a la cuestión con la acción menos exigente. El sistema 2 se ocupa de actividades complejas, es más lento, racional y prudente. Observa y controla los pensamientos y las acciones, permite que se expresen y reprimiendo o modificándolos. Es un controlador que actúa cuando no hay respuestas del Sistema 1.
La consecuencia de las decisiones apresuradas son errores, opiniones sesgadas y juicios subjetivos. El Sistema 2 posterga las gratificantes sugerencias del sistema emocional e invierte esfuerzo cognitivo. La racionalidad se analiza por los errores más que por los triunfos. Entre los errores más frecuentes está el
efecto Halo que atribuye características a una persona según pistas parciales o atractivas, lo cual explica por qué se ama a las estrellas de cine, o por qué Steve Jobs en una especie de santo laico.
La ilusión de validez afecta a los expertos, provocando un exceso de confianza en predicciones infundadas y poniendo en duda la eficacia de reputados especialistas.
El Sistema 1 está preparado para creer, no para dudar y tiene tanto miedo que salta a conclusiones precipitadas. Así se entiende el fanatismo y la seguridad dogmática con que se sustentan en la ignorancia y por qué el escepticismo sigue siendo tan impopular. La racionalidad es la capacidad para amonestar a la parte vaga del pensamiento y capaz de develar o domar, los sesgos cognitivos naturales. Una persona “racional” no es la que tiene una visión más consistente, ni la que cuenta mejores historias. No es más racional quien rechaza las emociones en nombre de razón, sino quien es capaz de examinar sus prejuicios y errores.
Lo dijo Sócrates: “Una vida sin examinar no merece ser vivida».
Pensamiento natural y pensamiento analítico
La virtud de saber decidir evita la parálisis por exceso de análisis. Esta virtud se debilita por la arrogancia, por desconocer los métodos para decidir y por la falta de incentivos. La percepción hace creer que es el sol el que se mueve y no la tierra. El pensamiento natural salta directamente a la acción. Eso está bien para decisiones simples, como elegir la corbata para el traje, pero en asuntos serios o se plantea bien el problema o se resuelve el problema equivocado. Se aprecia más al intuitivo que al analítico. El intuitivo no justifica su decisión, juzga a la gente por su cara. El mundo es resultadista pero también se pierde jugando bien. La clave es poder separar las decisiones de los resultados.
Pensamiento reactivo o pensamiento proactivo
La escuela y la empresa castigan el error, premian poco al que acierta y no castigan al que provoca daños por no decidir. Incentivan a no hacer nada. El miedo a fracasar inhibe la decisión. El que no hace no se equivoca pero tampoco aprende. El deseo nubla la razón, pero en grupos adiestrados mejora la decisión. La sociedad de consumo ofrece un radar para imitar a ricos y famosos. Hay que contar con la brújula interior para conocerse a sí mismo, sin esa virtud no se puede decidir bien. Lo dijo Séneca «no existen los vientos favorables para el que no sabe a dónde quiere llegar».
Pensar fuera o dentro de la caja
La pandemia catalizó la capacidad de generar cosas nuevas aprendiendo a ver lo que otros no ven. Se trata de comprometerse con el cambio desarrollando habilidades como la escucha activa, entender lo que pasa, relacionarse con pares y realizar estudios en base a la colaboración y prestando atención a las fuentes externas que permiten pensar de otro modo. Deben ser curiosos y hacer hincapié en el aprendizaje continuo. Hay que dar un rol más destacado a las personas que a las tecnologías, porque, más allá del potencial del software y el hardware, las ideas siempre surgen del trabajo en equipo.
Pensamiento rígido o flexible
El pensamiento vertical sostiene fórmulas rígidas que no se confrontan con la realidad. Responde por “sí o por no” o por “blanco o negro”. No hay lugar para una tercera opción. Ante un conflicto, se quiebra aunque sea duro como el roble. Pero si actúa como el junco, se dobla pero no se rompe. Lo ideal es lograr el equilibrio y el balanceo. Hay rasgos o rituales buenos, que convertidos en hábitos hacen actuar mecánicamente. Ante situaciones nuevas la flexibilidad permite innovar e incorporar lo novedoso. Siendo flexible se abre la mente, se mira con apertura y se encuentra más de una solución . Una mente flexible y abierta, es un imán preparado para atraer las nuevas ideas que sacan de la zona de confort. Siendo inflexible no puede adaptarse a los cambios y no logra triunfar en los proyectos.
Como el junco, una actitud flexible ante la vida, permite afrontar las vicisitudes sin quebrarse. La rigidez trae aparejados sufrimiento, malestar y problemas psicológicos. Una actitud flexible, entiende los problemas como situaciones pasajeras que pueden afectar pero no destruir, porque como el junco, se las acompaña, sin dejar de hacer las cosas valiosas que al final darán la flexibilidad necesaria para atender los retos a afrontar.
Vamos viendo o pensamiento estratégico
El vamos viendo es ser como una hora arrastrada por el viento. El pensamiento estratégico se pregunta: ¿dónde estaba ayer? ¿dónde estoy hoy? ¿dónde quiero estar mañana? y ¿cómo haré para conseguirlo? Lo difícil es visualizar el futuro deseado y retroceder al presente que se necesita para lograrlo. Parte del futuro deseado y retrocede hasta lo que hay que hacer. Cuando la guía es el pasado, la experiencia condiciona y lo hace conservador.
Para saber que ocurrirá en el futuro lo mejor es es inventarlo. El pensamiento reflexivo, con sus fases de observación, problema, hipótesis, selección, y ejecución, se convierte en un pensamiento estratégico donde la razón se combina con la pasión. El pensamiento estratégico ve la película desde el final, la película que uno mismo debe realizar.
La estrategia es el elemento esencial de la gestión. El enemigo de cualquier plan es el tiempo, porque cuanto más lejano es el objetivo más falible será. El pensamiento estratégico se diseña para reducir la incertidumbre, otro enemigo que debilita el planeamiento pero que lo hace necesario. Es el arte de ordenar saberes y recursos para superar la distancia entre el plan y el resultado moviéndose entre la reflexión y la acción.
El modo de combatir la ley de Murphy para la cual todo lo que puede salir mal va a salir mal, es ser cuidadoso en los detalles. El intelectual trabaja con palabras y con ideas y el hombre de acción con personas y cosas. El concepto de creacción es la unión de la creatividad, el plan y la acción ejecutiva. La estrategia no separa el plan de la acción, es lograr que se concreten los propósitos. En esto radica la diferencia del Estratega con el Planificador, porque éste no conoce los resultados y no cuenta con instrumentos para prevenir los desvíos. El estratega debe lograr que la Acción garantice que la Reflexión se cumpla, y que la reflexión incorpore la lógica de la acción. Se debe transitar ese camino teniendo claros sus objetivos
La PNL (programación neurolingüística)
Enseña a hacer las copias del original. Programación significa organizar y repetir las conductas exitosas. Neuro se refiere a las percepciones sensoriales que generan estados interiores de tristeza o alegría. El cerebro las automatiza y las programa en patrones de conducta para no tener que pensar cada cosa que se hace. Lingüística se refiere a que las respuestas se manifiestan en lenguaje verbal o no verbal. Programación es la forma en que se encadenan las etapas.
Programar resultados de excelencia
El cerebro se programa con la educación y la experiencia. La PNL tiene su lado negativo: es la tendencia a crear hábitos y repetir respuestas aun en situaciones dónde no es recomendable. Por eso el dicho: nada fracasa tanto como el éxito ¿por qué cambiar si todo va bien? Hay que hacerlo porque los competidores combinan el bench marking– la comparación con los mejores-y la PNL – para imitar-.El antídoto es la destrucción creativa- destruirse uno mismo antes que lo haga un competidor. Curso acelerado de PNL 3 minutos.
El primer paso es tener in mente el objetivo. El segundo es trazar el plan y controlar su ejecución por si se aleja. El tercer punto es tener creatividad y flexibilidad para variar el plan cuando la realidad muestre que algo falla. Una mente productiva es rígida para repetir las conductas exitosas y flexible para adaptarse a esta era donde impera la aceleración vertiginosa de los cambios.