La mucama Ramona, llorando, agarra su valija y sus dos bolsos y se despide de la patrona.
La señora, asombrada, le pregunta:
– ¿A dónde vas?
– Me voy a mi pueblito, a morir cerca de los míos.
– Pero, qué pasa …¿por qué decis eso?
– Señora Merceditas, usted misma dice que su esposo, el Dr. Costa Pérez es un excelente médico y que nunca se equivoca en sus diagnósticos…
– Si, eso es cierto, él nunca se equivoca en un diagnóstico… pero, ¿qué tiene que ver eso con tu salida de la casa?
– Por eso precisamente, el doctor esta mañana me apretó y acarició el culo y me diagnosticó:…»De esta noche no pasás».!