5 maneras en las que las personas resilientes usan sus habilidades para superar situaciones difíciles
La vida no nos lo pone fácil. Si no es un lío familiar es una crisis de pareja. Cuando no es ese proyecto que no quiere darse por vencido, y ya ni hablemos de las preocupaciones que tienes todos los días recorriendo tu mente.
Necesitamos lamer nuestras heridas y procesar todos esos pensamientos. No estancarse en la amargura demasiado tiempo es lo que te salvará de una mentalidad negativa y tóxica.
Aquí hay 5 maneras en las que las personas resilientes usan sus habilidades para superar situaciones difíciles:
1. Lo primero que hacen es evaluar correctamente la situación
Las personas resilientes emplean su inteligencia emocional para hacer un análisis honesto de la situación que puede estar afectándoles. Procesan cuidadosamente sus pensamientos y profundizan hasta llegar a la raíz del asunto.
Reflexiona esta pregunta: ¿Qué situación es la que te hace sentir como te estás sintiendo? Si hay algún asunto no resuelto que todavía te preocupa bucea en él para encontrar el origen. Si no lo haces te sentirás constantemente frustrado y enfadado.
2. No dejan que el drama se apodere de su cabeza
Las personas resilientes no permiten que su ego les domine, ellos reencuadran rápidamente la situación. La miran objetivamente y se preguntan “¿Qué está pasando?”.
Míralo como si fuera una técnica para contarte a ti mismo una historia diferente y llegar a una interpretación diferente. Así conseguirás llegar a una conclusión diferente
Esto es lo que te va a ayudar a sacar el drama de tu cabeza. Por eso siempre debes enfocarte en los hechos -en lo objetivo- y en el aquí y el ahora. Deja a tus fantasmas del pasado en el pasado.
3. Se ponen límites saludables
Si tu problema tiene que ver con los demás, probablemente sea más tu responsabilidad que la de ellos. Aprende a ponerte límites para que los demás -muchas veces sin ser conscientes de su egoísmo- no se aprovechen de ti.
La gente resiliente se recupera de las malas situaciones diciendo “no” a cualquier persona que interfiera con sus objetivos, horarios y especialmente con sus valores y principios.
No tienes que ser una persona que le dice sí a todos. Resístete cuando tus creencias se vean amenazadas. Aléjalos con firmeza, pero no con dureza, y traza líneas claras en la arena.
4. No dejan que la culpa les controle
Una vez analizada la situación con honestidad, las personas resilientes no se permiten sentirse culpables por cosas que no han hecho. Saben que no son responsables de las acciones y drama de otros, y nunca buscan vengarse por algo que alguien les hizo.
Libérate de todo el rencor y el odio pasado. Mirando al presente sin cicatrices es como conseguirás el futuro al que aspiras.
5. Reevaluan sus relaciones
Las personas resilientes evalúan los riesgos y beneficios que les aportan sus relaciones y consideran hasta qué punto les merece la pena.
Eres el promedio de las 5 personas con las que más tiempo pasas. Saca a las personas tóxicas de tu círculo, evita a las que te chupan la energía y sólo se preocupan por sí mismas. Y pasa más tiempo con gente que te hace sentir bien y te motiva a ser mejor cada día.
La resiliencia trata de actitud. Practicar estas formas de responder ante la adversidad es lo que te dará la capacidad de vivir una vida más feliz y con más sentido, pasando más tiempo en la luz que en las sombras de la vida.