• La playa de estacionamiento
Las personas que con frecuencia participan de reuniones, saben lo fácil que es irse por las ramas. Cuando eso sucede, se pierde el foco del verdadero tema de discusión. Para evitarlo, cada vez que surge una buena idea no relacionada al tema, la reservamos en la playa de estacionamiento. Como resultado, nuestras reuniones son mucho más productivas.
• El buzón de sugerencias
Nunca habíamos usado esta herramienta tradicional en nuestra empresa. Pero estamos descubriendo lo bien que funciona para aquellas personas que no les gusta hablar en las reuniones. Probablemente su renuencia tenga que ver con el temor al ridículo o al rechazo público. Asimismo desarrollamos un programa de premios que fomenta entre los empleados el uso del buzón de sugerencias como vehículo de comunicación.
• El factor de reconocimiento
Ésto vincula mi compromiso de escuchar las inquietudes de las personas con mi convicción sobre el reconocimiento de los logros individuales. Constantemente, felicitamos a la gente por los resultados que logra. Premiamos la creación de soluciones, la excelencia en la ingeniería, la superación de los objetivos de venta, el cierre de ventas difíciles, la rentabilidad e incluso el trabajo efectivo conjunto entre Departamento Administrativo y el de Ingeniería.
• Focalizar en el Cliente
Incentivo a las personas a mantener abiertos los canales de comunicación con sus clientes. Nuestro negocio se basa en una «venta relacional». Hacemos un seguimiento del progreso de cada proyecto por lo que destinamos gran parte de nuestro tiempo a trabajar de manera estrecha con los clientes. Una buena comunicación fortalece las relaciones con nuestros clientes, asegura el correcto desarrollo de nuestro plan y permite que el proceso del proyecto sea dinámico. Mejor aún, una buena comunicación desarrolla la base necesaria para el crecimiento futuro del negocio.
Daniela de León