Al ciudadano medio de un país que atrasa le faltan herramientas para convertirse en ciudadano del mundo global. El idioma más importante es el del cerebro, que siendo el mismo en cualquier habitante del planeta, hay pocos países que lo enseñan a usar.
Finlandia es una lejana nación europea, que, con clima riguroso, famosa por sus miles de lagos y sus bosques de coníferas, tiene sin embargo mucho que enseñar sobre crecimiento a través de un formidable desarrollo educativo. Educar fue la apuesta que hicieron hace décadas con el futuro. Hoy la cuestión educativa es el quid de los debates. Hace tiempo afirmaron: somos demasiado pobres como para darnos el lujo de no invertir en educación. Con población escasa, limitados recursos y territorio difícil de habitar, fabrican muchos productos con alto valor agregado.
La clave es una educación abierta e igualitaria para ricos y pobres. Las condiciones naturales exigen alta capacidad práctica. Más que las soluciones concretas, lo importante, es que hicieron de la educación una política de estado y una plataforma para el futuro.
Los países que mejor funcionan en el mundo invierten en educación, ella es la industria pesada de cualquier nación porque es la que fabrica los ciudadanos del futuro. Al ciudadano medio de un país que atrasa le faltan herramientas para convertirse en ciudadano del mundo global. El idioma más importante es el del cerebro, que siendo el mismo en cualquier habitante del planeta, hay pocos países que lo enseñan a usar.
El secreto del cerebro de Einstein. Einstein donó su cerebro a la humanidad para que se estudiara sus diferencias con los cerebros comunes. Los investigadores analizaron los dichos de Einstein sobre su manera de pensar. Einstein pensaba en imágenes; para descubrir la teoría de la relatividad se imaginó viajando en la punta del rayo de luz. “Las palabras no influyen en mi pensamiento. Las entidades físicas que uso son imágenes que puedo reproducir y combinar. Las palabras las busco después, cuando el juego asociativo se afirma y puedo reproducirlo a voluntad”. Su dificultad de conceptualizar sin imágenes y de activar el pensamiento abstracto sin ellas, explica su fracaso escolar. Por otra parte, la cita demuestra que la imagen es una vía de acceso a la racionalidad. El físico Bohr dijo “el trabajo más importante de un científico es crear imágenes nuevas”, y Einstein “si no puedo dibujarlo, es que no lo entiendo” y “la imaginación importa tanto como el conocimiento”. El poder inteligente es un trabajo en equipo de los hemisferios cerebrales. Comparando su cerebro, llamó la atención es que su cableado (el cuerpo calloso que conecta los hemisferios) estaba más poblado de células glía, neuronas que hacen el trabajo de comunicación cerebral.
Las investigaciones demuestran que lo que lo convirtió en un genio no fue solamente el fruto de una inteligencia genética sino también de la inteligencia cristalizada, resultante del conocimiento, la experiencia y la imaginación. Así se agrandó la zona más importante del cerebro, por lo que se lo puede considerar un atleta de la mente. La “inteligencia fluida” resuelve problemas con independencia del conocimiento adquirido o “inteligencia cristalizada”. Lo que hizo grande a Einstein no fue el hardware que trajo al nacer, sino su software, es decir su forma de pensar.
¿Usted sabe cómo funciona su cerebro? Ante esta pregunta la mayoría de las personas responde con afirmaciones vagas o correctas pero que no implican saber cómo usar efectivamente los recursos de la mente. Nietzche decía que la mayor riqueza del hombre son los métodos, y tenía razón. La mayoría de las personas carece de una metodología intelectual y por lo tanto utiliza el método más primitivo e ineficaz: “la fuerza bruta”.
Fue Sarmiento quien dijo que la letra con sangre entra, sin embargo el esfuerzo por estudiar, si bien es necesario, tiene rendimientos decrecientes a medida que transcurre el tiempo. En la primera hora se posee toda la energía pero a medida que pasan las horas el cansancio disminuye la atención y finalmente cualquier agregado de tiempo alcanza un cero de productividad.
Dos hacheros trabajan en un aserradero. Uno derriba tan solo un árbol por día, el otro derriba 10. Tienen el mismo estado físico y el mismo tipo de hacha. El primero vive angustiado hasta que un día se anima a preguntarle cómo lo logra. El exitoso, que tenía buena onda, le pregunta qué hace al llegar a su casa. Llego destruido, como algo y me duermo. Y el exitoso le contesta: esa es la definición de locura que dio Einstein, es decir que te va mal pero seguís haciendo más de lo mismo. Y ¿tú qué haces al llegar a tu casa? Lo primero que hago es afilar el hacha, le responde..
Nuestra hacha es el cerebro, detrás de la apariencia de una persona exitosa hay un cerebro bien afilado. Ortega y Gasset dijo que el hombre es él y sus circunstancias. El economista Pareto descubrió la ley 80/20. Advirtió que hay un 20% de los factores de un problema que producen el 80% de los resultados. El que los descubre logra producir más en menos tiempo. Para eso hay que aprender a observar. Newton descubrió la ley de gravedad cuando una manzana cayó sobre su cabeza. La principal catástrofe es no saber lo que se quiere o querer sin eficacia ¿Sabe usted qué es lo que lo apasiona? ¿Flota o navega hacia su objetivo? Séneca dijo que no existen vientos favorables para quien no sabe a dónde quiere llegar.
El segundo es el idioma es el inglés. Es el idioma que debería dominar el ciudadano medio. ¿Por qué? Porque es el que hablan la ciencia y la tecnología. Por eso es el idioma universal por excelencia. Por otro lado las neurociencias han investigado que aprender otro idioma mejora el rendimiento del cerebro. El niño se aburre si no relaciona lo que aprende en la escuela con los sucesos de la vida y los términos en inglés son omnipresentes en la vida cotidiana. Aprender inglés es una oportunidad porque desde pequeño lo advierte y eso atrapa su curiosidad. Aprender la lengua nativa con reglas es una función del hemisferio izquierdo. La apertura al hemisferio derecho abre la senda al pensamiento creativo.
La neuroplasticidad es la capacidad del cerebro de reformarse a sí mismo a través de la educación y la experiencia. Por eso los niños de 9 a 99 años pueden aumentar su rendimiento aprendiendo a combinar estratégicamente los hemisferios cerebrales.
La revista «Second Language Research» publicó una investigación científica según la cual los estudiantes con bajo nivel de inglés utilizan el hemisferio derecho, el que no usan para la lengua materna. Actuando en equipo los hemisferios logran transferir y automatizar la ejecución veloz en distintas profesiones: así es como músicos, artistas y empresarios; mantienen el área creativa abierta para seguir inventando y aprendiendo.
Patricia Gayo, coach internacional en la enseñanza del idioma inglés y en brain training, en cursos presenciales y a distancia pudo extraer de su experiencia pedagógica que el hemisferio izquierdo es el conceptual y el derecho el creativo. El alumno principiante aprende con el derecho hasta que automatiza el idioma. La lengua nativa la sigue procesando el hemisferio izquierdo. Un estudiante de idiomas es un ejecutante en formación.
El hemisferio izquierdo se toma su tiempo y espera, es verbal, lógico y estratégico. El derecho es visual, emocional e intuitivo.
Cuando el cerebro los armoniza como un todo se unen el corazón y la razón. Un niño puede aprender desde pequeño dos idiomas. Para eso debe permanecer en un hábitat donde el inglés se incorpore con juegos, deportes, relatos, libros de cuentos y canciones. La música puede ser el camino conductor que conecte las áreas: social, emocional, afectiva y corporal, con la del lenguaje verbal y sus capacidades de lectura y escritura.
Se aconseja a los alumnos que pasen 21 días en un país de habla inglesa o que financien su viaje con el programa work and study.
Los programas de metodología intelectual en inglés aceleran el aprendizaje del idioma y permiten optimizar el rendimiento cerebral. Incluyen: Speed Reading, Memory, Concentration, Study Methods, Speach and Comunication and Intelligence development. Los alumnos que usan el programa “Work and Study” en EEUU y Europa, pueden minimizar sus costos de viaje y estadía.
El idioma de las máquinas. El idioma tecnológico es el tercer idioma y es el que está cambiando al mundo. Tecno” referencia a tecnología y “filia” a simpatía o afición. La tecnofilia es la pasión exagerada por la tecnología. Tecnofobia es el rechazo a lo tecnológico como miedo irracional al que se justifica por la dependencia que genera desde el punto de vista físico o emocional. La brecha digital o analfabetismo tecnológico crece. “Mientras la tecnología sube por el ascensor el hombre asciende por escalera”. Esta es una deuda que se debe saldar con el conocimiento.
La tecnología se relaciona con el cerebro. Más allá de los componentes culturales en la administración del tiempo, hoy es notable la dificultad que tienen jóvenes y adultos en concentrarse a fondo en una sola tarea, en escuchar una larga sinfonía, en sostener un pensamiento o una experiencia, en leer sin ser invadido por ideas parásitas y en generar relaciones estables. Crece una atención saltarina, vagabunda, fragmentaria, multidireccional y multitarea que descrema la superficie de cosas y personas sin penetrar en su fondo.
La sensación concomitante es que se pierde algo importante, que intoxicarse con sucesos impide culminar con la tarea. Los medios generan una ansiedad que ellos mismos incentivan. Así se percibe un universo atractivo que magnetiza una atención flotante que se sorprende por su falta de linealidad, por su multiplicidad de opciones y por su capacidad de acercar realidades lejanas en un formato multimedial.
La ilusión de que no existen el espacio y el tiempo ofrece una percepción de presente continuo, en la que el tiempo pasa sin dejar secuelas y una espacialidad permanente evita el vacío de la soledad. Para McLuhan los medios de comunicación son extensiones del cerebro. Hoy las redes extienden el sistema nervioso. Para los tecnofóbicos es posible que el hombre de a poco sea una prótesis de lo mismo que inventó.
Sintonizar el sistema nervioso y el sistema digital. Hoy se educa para un mundo inexistente. El átomo es pasado, el símbolo de la época son los chips y la red. La red no tiene centro, ni certezas. Combina la simpleza del átomo con el desorden del caos. El chip de silicona y la fibra de vidrio de silicato se unen a velocidades fantásticas para revestir al mundo con un tejido de redes. Las redes tienen sólo nodos y conexiones. Los nodos se hacen más pequeños mientras que las conexiones crecen. Así como células poco inteligentes crearon el sistema inmunológico, una PC conectada con otras tejió la telaraña mundial «World Wide Web». En un mundo de especialistas unidos en red, la sabiduría retornará si promueve un diálogo global que descomponga el todo en partes pequeñas que contribuyan a entenderlo y mejorarlo. Este entramado se paralizaría sin ideas que motiven a trabajar en equipo. El poder del futuro será aprovechar la comunicación. En una red el talento se multiplica por el de todos. De lo que se trata entonces es de sincronizar el cerebro humano con las redes digitales, el sistema de redes que ha creado un poderoso y enigmático cerebro social.
Lo que no se mide no se puede mejorar. Cada año que pasa deja una marca en el cerebro y si no se mide no se puede superar. Actualizar como mide el (IQ), (coeficiente intelectual) es indispensable para saber cómo está funcionando la mente y al mismo tiempo conocer las neurotécnicas de entrenamiento mental que potenciarán su rendimiento. La mayoría de las personas han advertido que deben hacer un chequeo médico anual para detectar los síntomas de los problemas que pueden afectar su salud. Sin embargo la mayoría de las personas no evalúan su rendimiento intelectual lo cual es peligroso tal como revelan los estudios sobre el mal de Alzheimer.
La neuroplasticidad es la capacidad del cerebro de modificarse con el aprendizaje y la experiencia. La memoria se expande por redes neuronales que reflejan los cambios que producen el aprender, practicar, entrenarse, trabajar y jugar. La pandemia más grave del siglo XXI será el mal de Alzheimer porque la edad física se extenderá pero: ¿de qué servirá si el cerebro no acompaña? Los años vienen solos pero la capacidad debe activarse. Nunca se detectó el mal de Alzheimer en ajedrecistas famosos. En cambio el ciudadano medio no blinda ni protege su cerebro con la neuróbica, que es equivalente del aerobismo a nivel del cerebro, es el entrenamiento neuronal. La probabilidad de tener Alzheimer en personas mayores de 80 años es del 50%. La medicina ha logrado que vivamos más años, la educación del cerebro puede hacer que los vivamos felizmente.
A continuación presentaremos algunos tests de medición del rendimiento para ir evaluando como funciona su cerebro. Lo importante es luego hacer un benchmarking, que es la comparación con modelos de excelencia para observar la diferencia. Tal como demuestran los cerebros mejores no es cuestión de suerte o de genética sino de los métodos que aplican. Esto implica que existe una oportunidad concreta de mejorar.
A- Para ver la diferencia entre un lector lento para leer un texto (columna izquierda) y un lector veloz leyendo el mismo texto (columna derecha)
B- Para determinar la velocidad y comprensión en la lectura hacer click aquí
Test de velocidad de lectura – Ilvem
Una vez que lo realicen el lector puede enviarle el resultado para calificarlo dentro del ranking de lectores (superlento, lento, normal, lector veloz)
C- La «gimnasia mental» es una buena forma de cuidar y mantener la memoria. Realice estos ejercicios:
1) Mantener la concentración. Lea el texto que una vez y cuente las letras F mientras lee:
FINISHED FIILES ARE THE RESULT OF YEARS OF SCIENTIFIC STUDY COMBINED WITH THE EXPERIENCE OF YEARS
2) Usar la memoria con inteligencia: ¿Cuántos números 9 hay entre el 1 y el 99?
3) Técnica para recordar: Utilice solamente círculos y rectas para dibujar las siguientes palabras: OBEDECER-DESESPERACION-TRIUNFO-VEJEZ.
4) Ejercicio de concentración y agilidad mental: http://ocio.historiaybiografias.com/juego_del_gatito.htm
5) Determine su edad mental: http://flashfabrica.com/f_learning/brain/brain.html
*Ver las respuestas al final de la nota
D- Notas publicadas. Para no abundar en este artículo puede leer las siguientes notas que amplían lo hasta aquí explicado:
Las neurociencias aún no entraron en las aulas – Clarín
Somos lo que leemos; y cuanto más rápido, mejor – Clarín
¿Cuántas clases de inteligencia logró desarrollar usted? – Clarín
Nota en la TV de Perú
Asista a un taller de neurociencias. En ellos se informa sobre la aplicación integral de las neurociencias a la educación, con el objetivo de optimizar el rendimiento intelectual, la realización económica y la salud física y mental. Se dirige a los que deseen aprender a mejorar el rendimiento. El cerebro debe entrenarse desde el nacimiento hasta el último día de la vida de cada persona.
Programa.
Modulo I
En la década del cerebro se descubrió la neuroplasticidad cerebral.
Como perfeccionar la conformación del cableado cerebral a cualquier edad.
Prevención de la salud física y mental.
Mejorar la productividad. Producir más en menos tiempo.
Modulo II
Benchmarking: Comparar su rendimiento con los modelos de la excelencia.
PNL (programación neurolinguística): programar el resultado deseado.
Smart power: poder inteligente. Querer con eficacia.
Poder blando (hemisferio derecho) y poder duro (hemisferio izquierdo)
Modulo III
El cuerpo calloso: el cable que comunica a los hemisferios cerebrales
Como desarrollar el trabajo en equipo de los hemisferios cerebrales.
Los métodos como la mayor riqueza del hombre
La materia prima del cerebro: la materia gris.
Modulo IV
Descubra a su genio interior en el marco de la teoría de las inteligencias múltiples
Lo que no se mide no se puede mejorar
Logre autoestima: su capital invisible.
Marketing personal: aprenda a venderse a sí mismo.
Modulo V
Empowerment: el poder interior.
Orientación vocacional y profesional.
Inteligencias complementarias: espiritual, emocional, creativa, ejecutiva,
social y digital.
Como potenciar la sinergia entre el sistema nervioso humano y el digital.
Modulo VI
Como convertir espíritu en materia.
YO S.A una fábrica de ideas y relaciones productivas en el cerebro.
Educar es sacar lo mejor de nosotros mismos.
Antecedentes. Se sabe mucho sobre neurociencias, pero sus aportes, surgidos a partir de la década del cerebro (1990-2000), no llegaron a la educación. El informe Pisa de OCDE ubica a la región en el puesto 59 entre 65 países en comprensión de textos, ciencia y matemáticas. El test se realiza con chicos de 15 años, que son el futuro de un país.
El cerebro es uno solo y deben entrenarse todas sus funciones e integrar las áreas para que el todo resultante supere a la suma de las partes. En lugar de trabajar al 10% de su potencia, se puede llegar a utilizar hasta el 100% de su capacidad.
Leer es la tecnología genérica más importante. La escritura y la lectura fueron creadas hace mucho tiempo por el hombre y son muy necesarias para la adquisición de las modernas tecnologías. Sin embargo la vida moderna y la facilidad que brindan los medios audiovisuales para informarse hacen que se lea cada vez menos. Aun quien conserva el hábito de la lectura carece de tiempo y su modo de leer lo aprendió en la escuela primaria, mientras que el conocimiento creció de manera exponencial.
Utilizando mejor las capacidades que tenemos se puede aumentar la velocidad de lectura, la comprensión y la concentración. También aprender a escuchar y observar, dominar técnicas de estudio y memoria, recuperar la información y comunicarla en forma oral y escrita. Muchas veces las fallas al rendir exámenes y en la vida, se deben a trabas en la capacidad expresiva.
Recibimos kilómetros y kilómetros de información y sólo tenemos metros en la práctica de la comunicación. Es necesario mejorar el marketing digital en las redes sociales y la autoestima (un capital invisible pero que está presente en cualquier logro significativo).
Desarrollo de la inteligencia. Es necesario mejorar desde el punto de vista creativo y estratégico. Comienza descubriendo la vocación hasta su desarrollo y puesta en práctica. Sumando a la teoría de las inteligencias múltiples, las inteligencias complementarias (emocional, creativa, estratégica, ejecutiva, social, digital y comercial), se puede aprender a convertir el espíritu en materia, facilitando la creación de una fábrica de ideas en el cerebro y participando de fábricas de ideas que funcionan a nivel internacional.
Para ello es necesario aprender técnicas neuróbicas (entrenamiento neuronal) , mnemotécnicas ( técnicas de memoria) y para crear ideas y aplicarlas (brain storming), entre otras. Conviene poner el énfasis en la PNL (programación neurolingüística), para programar el crecimiento desde la situación actual a la deseada, basada en que lo que se desea se puede alcanzar. Para motivarse es necesario compararse con un modelo de excelencia. La causa del bajo rendimiento no está en el cerebro sino en cómo se lo hace funcionar.
Benchmarking. Es compararse con el modelo y preguntar: ¿Qué puedo mejorar? ¿Cuál será mi modelo? ¿Qué diferencia nos separa? ¿Cómo cerraré la brecha? El peligro es elegir el camino incorrecto. La clave está en qué se hace y en cómo se lo hace. Elegir el blanco es crucial. Es lograr eficacia en la elección de la ruta y eficiencia para llegar al destino.
Los programas “Sólo por Hoy” de la inteligencia son tips cortos de fácil lectura acompañados de una imagen, para aplicar al mejoramiento del cerebro. Incluye un link con una nota optativa para los que quieren profundizar en la temática del día. Un acertijo diario entrena la creatividad en cerebros habituados a la rutina.
*Respuestas a los ejercicios:
1- son 6 letras F.
2- son 20
3-
4- Esta es una de las soluciones:
5) La edad mental es el resultado obtenido en el test. Cuando menos edad obtenga mejor es el rendimiento.
Economía del conocimiento. Ante la aceleración de los cambio tendemos a pensar qué pasará en el futuro, pero el cambio es un protagonista del presente. Somos poco conscientes de los sacudones vertiginosos que venimos experimentando. En este contexto, la reinvención es un imperativo de supervivencia y la «zona de confort» un sitio peligroso. Los ciclos de tecnología y conocimiento se acortan dramáticamente, y tanto, que nos obligan a entrar en el aprendizaje permanente. Antes bastaba con estudiar y lograr un título, hoy un profesional que no se actualiza se torna obsoleto en poco tiempo. Los países que atrasan suman a las fallas en educación la falta de capital de riesgo por las trabas a la importación o seguridad jurídica, eso dificulta su acceso a la cuarta revolución industrial.
La primera revolución pasó de la producción manual a la mecanizada, entre 1760 y 1830; la segunda, en 1850, trajo la electricidad y la fabricación en masa. La tercera, en 1950, llegó con la electrónica y la tecnología de la información y las telecomunicaciones. La cuarta se basa en las nanotecnologías, neurotecnologías, robots, inteligencia artificial, biotecnología, drones, impresoras 3D, sistemas de almacenamiento de energía. La fábrica automática inteligente no será un nuevo desarrollo, sino el encuentro de los que ya existen, nuevos sistemas que serán construidos sobre la infraestructura de la tercera revolución digital pero con un rasgo diferencial: la velocidad, el alcance y el impacto. Tal velocidad no tiene precedentes y afectará a todas las industrias, países y personas.
Las fábricas inteligentes se basarán en redes inteligentes que podrán autocontrolarse, a lo largo de su cadena de valor. El peligro es que podría acabar con millones de puestos de trabajo. Esto significa que beneficiará a los que aprendan inteligencia situacional: es el tipo de inteligencia que permite innovar y adaptarse a los cambios. Para que un país se convierta en global debe globalizar la educación. El desafío individual y colectivo pasa ahora por convertir a cada país en un país global y en convertir al ciudadano medio en un ciudadano del mundo global. Pensar globalmente y actuar localmente es el imperativo de la época. Esto implica que para superar los problemas de todo el mundo se debe empezar actuando por lo más cercano, por el propio entorno y por uno mismo.
Dr. Horacio Krell. Ceo de Ilvem, mail de contacto [email protected]