El fundador de la cadena de muebles Ikea, el sueco Ingvar Kamprad, murió a los 91 años, según informó la compañía.
La empresa dijo que Kamprad fue «uno de los más grandes emprendedores del siglo XX«.
Durante su carrera, el fundador de Ikea enfrentó cuestionamientos sobre sus vínculos pasados con los Nazis, los cuales calificó como «el error más grande» de su vida. Su participación la atribuyó a «estupidez» juvenil.
«Trabajó hasta el final de su vida, siendo leal a su propio lema: la mayoría de las casas están por hacerse», agregó la compañía.
Kamprad nació en 1926 en Smaland y fundó Ikea cuando tenía 17 años, con el dinero que le dio su padre como regalo por sus buenas calificaciones en la escuela, pese a ser disléxico.
Los diseños realizados por su compañía se volvieron muy populares en parte por su simplicidad y su bajo costo.
Ikea en cifras
La compañía empezó en 1943 y en la actualidad tiene 389 tiendas en todo el mundo.
El nombre procede de las iniciales de su fundador (IK), unidas con las iniciales del nombre de la granja en la que creció: Elmtaryd (E) y el pueblo cercano: Agunnaryd (A)
Las ventas minoristas de la empresa totalizaron US$43.000 millones en 2016.
Sus muebles planos se convirtieron en íconos de la industria, no sólo porque sus precios eran accesibles sino por sus prácticas instrucciones con imágenes y dibujos para armarlos.
5 IDEAS DE INGVAR KAMPRAD
1º- Asumir los errores
Solo aquellos que están dormidos no cometen errores.
Cometer errores es el privilegio de los activos. Son siempre las personas mediocres las que son negativas, que se pasan el tiempo demostrando que no estaban equivocadas.
Ingvar Kamprad ha reconocido en numerosas ocasiones el haberse equivocado muchas veces en su vida, especialmente en su juventud, cuando estuvo brevemente relacionado con los nazis. Pero como otros grandes emprendedores que hemos citado en el blog, el fundador de IKEA cree que los errores son inevitables y una gran fuente de aprendizaje para mejorar.
2º- Aprovechar el tiempo
El tiempo es tu recurso más importante. Puedes hacer tanto en diez minutos. Diez minutos, una vez pasados, se fueron para siempre. Diez minutos no son solo una sexta parte de una hora. Divide tu vida en unidades de diez minutos y desperdicia las mínimas posibles en actividades sin sentido.
Creo que para cualquier emprendedor, trabajador o generalmente para cualquier persona, este recordatorio del valor del tiempo es muy importante. Todos perdemos mucho tiempo en tonterías que no nos hacen ni mejores ni más felices. No se trata de dedicar todo el tiempo al trabajo, sino de intentar de que todo nuestro tiempo valga para algo.
3º- Gastar poco
Mejor ser un poco tacaño que tirar el dinero por la ventana.
Podría viajar regularmente en primera clase, pero tener mucho dinero no parece un buen motivo para despilfarrarlo. ¿Por qué elegir la primera clase? ¿Para que la azafata me regale una copa de champán? Si me ayudara a llegar más rápido a mi destino, entonces tal vez.
Ingvar Kamprad es conocido por su estilo de vida austero, algo que por supuesto aplicó en IKEA. La distribuidora internacional de muebles tiene una estrategia de costes bajos para poder ofrecer muebles a precios muy competitivos. Esto implica todos los gastos se controlan mucho, y que incluso lo ejecutivos viajan en turista.
4º- Ser un líder ejemplar y eficaz
La simplicidad y el sentido común deberían ser la base de la planificación y la dirección estratégica.
Si existe el buen liderazgo, consiste en dar ejemplo. Lo tengo que hacer para todos los empleados de Ikea.
Quizás la mejor demostración de liderazgo que hace el fundador de IKEA es actuando respecto al gasto de la misma forma que espera que lo hagan los empleados de la empresa. Además de dirigir con el ejemplo, la otra cosa que subraya es que la gestión tiene que ser sencilla y de sentido común, o lo que es lo mismo: eficacia.
5º- Mejorar continuamente
La mayoría de las cosas están por hacer.
El sentimiento de haber acabado algo es un somnífero muy potente. Una persona que se jubila pensando que ha hecho su parte enseguida se marchita. Una empresa que siente que ha alcanzado sus objetivos se estanca rápidamente y pierde su vitalidad.
Recuerdo que hace ya muchos meses publicamos un video de Pau Garcia Milà donde repetía una gran verdad: “Está todo por hacer”. Siempre hay que buscar la forma de mejorar, y trabajar para conseguir nuevos objetivos, porque el mundo no para de evolucionar.