Hay aspectos que no debes descuidar al momento de pensar en el negocio propio. Compartimos 4 claves que debes tener siempre presente para mitigar los riesgos de fracaso.
Hay personas que han trabajado todas sus vidas como empleados y ven como una posibilidad extremadamente lejana el hecho de convertirse en dueños de sus propios negocios, mientras otros saben que es la única manera de obtener la libertad financiera y todos los beneficios que vienen con esta.
Ambos pensamientos son completamente comprensibles. Los dos tienen que ver con la crianza, la educación recibida y también la personalidad del individuo. Esas ganas de cambio que puedan tener aquellos que no desean conformarse con lo que se les ha entregado y están dispuestos a hacer lo que sea necesario para alcanzar sus metas, pueden venir de distintas maneras.
Si te has dado cuenta de la importancia de generar tu propia fuente de trabajo y quieres convertirte en empresario, mira estas ideas de negocio que se encuentran en auge en la actualidad.
También es necesario tomar en cuenta que para tener un negocio propio no basta solamente con tener las mejores intenciones. Se necesita mucho más que solamente eso. Hay unos aspectos que siempre debes tener presentes cuando estás pensando en invertir, sin importar el tipo de negocio que tengas en mente. A continuación, sabrás cuáles son esos:
1.- El dinero no lo es todo
Si estás esperando reunir una cantidad considerable de dinero antes de tomar la decisión de invertir es importante que sepas que el capital no lo es todo. De hecho, el dinero lo puedes conseguir de diferentes maneras: a través de inversores, con socios, recolectas, ahorros y más.
El dinero se puede gastar en un segundo -con un clic- o a lo largo de semanas, dependiendo de la administración que se le dé. Lo que es verdaderamente valioso son los modelos de negocio que tienen la capacidad de multiplicar lo que se invirtió en él desde un principio. En vez de estar preocupado buscando dinero de todas las maneras posibles, es preferible que te enfoques en encontrar una buena oportunidad que se ajuste a al mercado y a tus capacidades.
2.- Forma equipo
Que hagas todo el trabajo tú no te hace más o menos emprendedor. De hecho, formar equipo demuestra inteligencia y estrategia. Cuando estés en la búsqueda de candidatos para agregar a tu equipo de trabajo necesitas elegir a personas que compartan valores contigo.
Además, trata de encontrar personas con cualidades/habilidades/destrezas/profesiones diferentes a las que tú ya posees. Así el equipo será multidisciplinario y mucho más preparado. Si tu equipo no es grande desde el principio no te preocupes, puede haber equipos desde dos personas, lo importante es que se comporten como uno solo, con un objetivo en común en la mente y que cada miembro aporte algo importante a la organización.
3.- No emprendas en algo solo porque está de moda
Tener un negocio es básicamente como tener un hijo. Necesita atención, inversión de tiempo, energía y dinero, así que porque algo se encuentre en boga no es una razón con el suficiente peso como para que se convierta en el objeto de tu emprendimiento.
Esto no quiere decir que descartes buenas oportunidades solo porque hay muchas personas hablando de ellas. Esto quiere decir que optes por informarte y conocer todo lo inherente a las oportunidades que se te presenten en lugar de hacer una elección solo por la emocionalidad o dejándote llevar por lo que pueden decir los otros.
Cuídate de los “modelos de negocio” que parezcan muy buenos para ser verdad ya que en muchas ocasiones tu sospecha puede ser cierta. Ten un poco de perspicacia, esto hará que no seas un blanco fácil para personas más experimentadas.
4.- El camino no será fácil
Y esto no lo digo para evitar que lo hagas, sino al contrario, para que sepas lo que te viene. Si confías en tus capacidades crees que puedes lograrlo será así. Tu pensamiento crea y determina gran parte de las cosas que pasarán en tu vida.
Por otro lado, esta no es una condición sine qua non. A muchas personas les pasa que abren su primer negocio y todo va viento en popa sin mayores contratiempos, pero la mayoría de los emprendedores tiene obstáculos y dificultades que pueden hacer que se rindan si no tienen la suficiente disciplina, determinación y perseverancia que se requiere para los negocios.
Cuando sabes que se te pueden presentar complicaciones estarás más preparado para enfrentarlas y además tu pensamiento trabajará por adelantado para prevenir situaciones que puedan volverse conflictivas.
Ten en cuenta estos 4 principios cuando estés en camino a crear tu propio negocio y verás cómo tus posibilidades de éxito se incrementan.