Los dos retos más importantes y complejos que están enfrentando las organizaciones hoy en día, son en primera instancia el hecho de que cuatro generaciones están conviviendo en los mismos lugares de trabajo: Baby Bummers, generación x, millennials y la generación z. En segundo lugar la cuarta revolución industrial ha puesto en primera línea la tecnología y la digitalización, es una nueva manera de hacer las cosas a través de las Apps, el internet de las cosas, la aparición de nuevas formas de pagar las transacciones diferentes a los billetes y la forma en que nos comunicamos en la cotidianidad; todo al alcance de un click..
En este nuevo panorama, los líderes que eran adecuados e incluso sobresalientes diez años atrás, ya empiezan a verse obsoletos, hoy en día se necesitan líderes muy dotados académicamente, al menos con una especialización, maestría e incluso doctorado en diferentes áreas y con énfasis en el área funcional donde se estén desempeñando, adicionalmente deben movilizarse adecuadamente en medio de la tecnología, de otra forma van a obstaculizar los procesos, que hoy deben ser agiles y dinámicos y tener al menos dos idiomas ya que de lo contrario van a perder contacto con las más importantes oportunidades del mundo empresarial.
Pero hasta este momento solo sería un líder más, ya que estos requerimientos de tipo técnico es lo mínimo que debe tener un líder para ser considerado por las organizaciones, lo que realmente va a marcar la diferencia son líderes con un arsenal de competencias blandas que les permitan inspirar a sus equipos de trabajo.
Para entrar en esta materia, voy a definir desde mi perspectiva lo que significa inspiración, ya que dejarla implícita podría sonar para algunos como un romanticismo más, que solo quedaría expuesto como un “saludo a la bandera”.
Inspiración es lo que logra un líder cuando es capaz de conectar a los miembros de su equipo, con el propósito superior de la organización, que cada colaborador entienda desde su puesto de trabajo, como está contribuyendo en primera instancia a la generación de valor para la organización y en segundo lugar, tal vez, más trascendental, como está contribuyendo a crear bienestar y valor a los usuarios finales, sentir el orgullo y satisfacción de que por medio de su trabajo, está contribuyendo al bienestar y crecimiento de la humanidad y del medio en el cual viven en el día a día.
Cuando profundizamos un poco en como un líder logra inspirar a su equipo de trabajo, surgen algunas preguntas que nos ponen a reflexionar:
¿Cómo se comunican los líderes inspiradores? Son realmente generosos dando información, pero al mismo tiempo son cercanos y abiertos a tener conversaciones tanto de tipo laboral como personal, sus oficinas siempre están abiertas, no hay barreras que impidan el acceso a ellos.
¿Cuáles son sus competencias? Además de las técnicas descritas antes, estos líderes son muy competentes en la forma como planean y coordinan el trabajo del día a día, permitiendo a sus colaboradores dar lo mejor de si, su mejor contribución. Delegan hasta donde las políticas de la empresa se los permite y en quienes son competentes en cada tema en específico. Son visionarios, entienden los objetivos estratégicos de la organización, son competentes para lograrlos y los comunican abundantemente a sus equipos de trabajo.
¿Qué tan coherentes son? La coherencia es uno de sus principales atributos, siempre hay una sincronizada relación en su forma de hablar y en su forma de actuar, lideran con el ejemplo.
¿Cómo agradecen? Están pendientes de reconocer el trabajo sobresaliente pero al mismo tiempo hacen un manejo adecuado de los errores que naturalmente se comenten en el ejercicio profesional. Son líderes que invitan al emprendimiento intraempresarial, la gente se atreve ya que tienen claro que si logran buenos resultados van a ser reconocidos, pero si cometen un error, se va a construir a partir de este, su líder los apoya y los acompaña para que no vuelva a suceder.
¿Buscan y valoran la opinión de otros? Aquí, el líder “Sabelotodo” se ve anacrónico y obsoleto, el líder inspirador tiene claro que es parte del equipo, que es el llamado a sacar lo mejor de sus colaboradores y que la verdad está en sus equipos de trabajo, finalmente ellos son los expertos.
¿Formulan una visión compartida? Esto es lo que buscan todo el tiempo este tipo de líderes, como entablar frecuentes conversaciones alrededor de la visión, que todos la entiendan, que sea una visión realmente inspiradora, que les permita trabajar como equipo de trabajo en el cual cada uno tiene funciones específicas, pero van juntos como familia, como equipo en busca de una mismo propósito.
El líder inspirador entonces, es aquel que reúne unas impecables capacidades técnicas y un kit de competencias blandas que les permite tener equipos de trabajo que no están en una organización haciendo lo mínimo para no ser despedidos, o colaboradores que están simplemente comprometidos, lo que logran es colaboradores con un propósito superior, inspirados y dispuestos a dar lo mejor de ellos para hacer evidente la ventaja diferencial de la compañía, lo cual la hace sostenible, visionaria y arquitecta de prosperidad y riqueza para la sociedad y el mundo.