Si bien por su facturación anual apenas superaría el puesto 1.900 del ránking de las 2.000 empresas con mayor volumen de ventas de la revista Forbes, la utilidad que logró en el último ejercicio (de casi el 25%) es la envidia de más del 90% de las 100 líderes de ese listado, cuyos márgenes, en su mayoría, oscilan entre el 5 y el 10 por ciento. La Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA) es una multinacional con un producto estrella, la Copa del Mundo, que es el evento deportivo más masivo del planeta. Alemania 2006 sumará una audiencia televisiva de 30.000 millones de espectadores, contra los apenas 3.500 millones de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. Más del 90% de los ingresos de la FIFA provienen de la venta de derechos del Mundial. Comercializados en cuatro categorías –televisión, patrocinio, licencias y hospitalidad (permisos que otorga a empresas para hacer promociones en eventos de la entidad)–, sirven para financiar la organización de competiciones y dinero girado a las asociaciones nacionales (72% de sus gastos anuales).
Por Alemania 2006, facturó 1.700 millones de euros, entre derechos de televisión (1.200 millones) y el aporte de 15 sponsors oficiales (500 millones). Dado que estas ventas se hicieron por períodos (en este caso, 2003-2006), los montos se diluyen en su balance anual. Aún así, el rubro Copa del Mundo 2006 aportó el 48,4% de sus ingresos en 2005: u$s 354 millones por TV y u$s 157 millones, en concepto de marketing.
En el pasado ejercicio, auditado por KPMG, la FIFA embolsó 874 millones de francos suizos (713,6 millones de dólares), con un superávit de 214 millones (u$s 174,7 millones) y capital propio por 461 millones (u$s 375,2 millones). Un resultado "sin precedentes", resalta en la memoria el titular de su Comisión de Finanzas, Julio Humberto Grondona. Según Don Julio precisa a sus 207 accionistas (las asociaciones nacionales afiliadas al organismo que preside el suizo Joseph Blatter), "gracias a este resultado positivo y a su holgada liquidez", se habrá repartido un total de 300 millones de francos suizos (más de u$s 244 millones) entre los 32 participantes de Alemania 2006. En función de los ingresos garantizados contractualmente, la multinacional de la pasión ya presupuesta u$s 3.000 millones para el período 2007-2010. Obtendrá u$s 1.900 por derechos televisivos. El resto, por marketing y licencias. Al cabo de ese período, lograría un gol de u$s 450 millones, con u$s 850 millones en fondos propios.
Pero la FIFA aún no oyó el silbato final de Alemania 2006. Entre otros aportes variables, la entidad se aseguró que, si los ingresos por la retransmisión por radio y televisión del Mundial superan los pagos mínimos garantizados, podrá reclamar el 50% de ese excedente. También, tiene derecho al 70% si se supera el techo previsto para la facturación por hospitalidad (270 millones de francos suizos). Además, acordó con Yahoo! retener el 40% del dinero que genere el website oficial de la Copa y que supere los u$s 8,5 millones. En tanto, Electronic Arts pagará regalías adicionales del 5,5% sobre la facturación neta de los juegos FIFA y Mundial 2006, si venden más de u$s 1.600 millones.
Los países también la envidian
El éxito económico y comercial del reciente Mundial de Fútbol fue una muestra más del dinero que moviliza un deporte que se convirtió en la "decimoséptima economía mundial", con un volumen de negocios estimado en 500.000 millones de dólares anuales. Según un informe de la consultora Deloitte & Touche Corporate Finance, existen en todo el mundo unos 240 millones de jugadores pertenecientes a 1.500.000 equipos afiliados en forma directa o indirecta a la FIFA. Para tomar una real dimensión del negocio, sólo 25 países producen anualmente un Producto Bruto mayor que la industria del fútbol en su conjunto.
Con la mente en Sudáfrica
Aún no se acallan los ecos de Alemania 2006 y la FIFA ya está cerrando negocios con la mira puesta en Sudáfrica 2010. El banco First National Bank (FNB) cerró contrato con la entidad y será el primer sponsor nacional confirmado para el próximo Mundial. La institución financiera pagará US$ 30 millones por el acuerdo, que también incluye a la Copa de las Confederaciones 2009.
Por otra parte, los sudafricanos también se aseguraron los derechos de TV. La emisora pública SABC es la nueva dueña de ese privilegio para todas las competencias de la FIFA hasta el año 2014. A partir de ahora, SABC será la encargada de renegociar los derechos de transmisión, por cable, por aire y por radio, con las compañías de TV de cada uno de los países interesados.
Otro que no se quiere quedar afuera es McDonald’s, que garantizó su presencia en las dos próximas ediciones de la Copa del Mundo.
Fuente: El Cronista/ Cidade do Futebol