Martin Parlato, CEO y Fundador de Posibl., reflexiona sobre el inmenso potencial para cambiar el mundo que tienen la web y las nuevas tecnologías.
Dijo el reconocido científico Alan Kay que «la mejor forma de predecir el futuro es inventarlo».
Y sí, siempre es buen momento para mirar hacia adelante y ver hacia donde vamos. Pero para emprender un viaje, siempre debemos entender desde donde partimos.
El mundo de hoy es muy diferente al mundo de hace unos pocos años atrás. Hoy la moneda de cambio es la información, en un mundo donde internet nos brinda una enorme cantidad de contenidos compartidos a cada minuto. A su vez, estamos entrando en la cuarta revolución industrial, que supone un fenómeno sin precedentes en la historia de la humanidad, con las nuevas tecnologías como protagonistas de este proceso.
En el mundo también existen hoy más de 7.000 millones de habitantes, de los cuales más del 30% utilizó internet para finales de 2015. Uno de cada 4 habitantes utiliza redes sociales. El número de usuarios de redes sociales se pronostica alcance los 2.500 millones en 2017. Un avance sin dudas arrollador, pero que no puede dejar de lado otra serie de datos significativos que pertenecen al mundo «real». El mundo en que vivimos.
Aproximadamente 1.200 millones de personas viven con menos de 1 dólar diario y 2.400 con menos de 2. Sí, en el mundo de hoy. Para 2016 se proyectan mas de 7.000 millones de celulares en el mundo. Eso significa que habrá más personas con acceso a un celular que al agua potable, la educación o a la electricidad.
El contraste de estas diferentes realidades, nos invita a pensar de un modo más profundo e inventar un nuevo futuro como decía Alan Kay, poniendo estas herramientas al servicio de todos para poder usar las redes e internet para conectarnos de verdad, y no ignorar el sufrimiento que no esta cerca de nosotros. Que existe y es real. La pregunta correcta entonces, quizás no es «Hacia donde va el mundo» sino «Hacia donde debería ir?».
El sentido común (que no es el más común de los sentidos) y los valores esenciales con los que nacemos y nos son transmitidos en los primeros años de vida, deberían ayudarnos a centrar la prioridad en disminuir esta gran cantidad de vidas en esa situación y los efectos de la pobreza que hay en ellas, como el analfabetismo, discriminación y marginación entre otros.
La web hoy representa una oportunidad para ponernos en movimiento y superar estos desafíos. Claramente es una oportunidad de cambio e igualdad entre todos. Pero internet es tan responsable de este cambio, como también la formación y la creación de conciencia lo son por parte de todos los actores que le damos vida a este nuevo mundo.
Algunas de las mentes más brillantes de la humanidad como Stephen Hawking, Elon Musk o Bill Gates, han alertado sobre riesgo en que la humanidad se adentre sin limites o controles en ciertas tecnologías, como por ejemplo la Inteligencia Artificial, a través de frases como «La IA puede poner fin a la humanidad» (Stephen Hawking) o «Con la IA estamos liberando al demonio» (Elon Musk).
La línea divisoria entre entre los humanos y las máquinas, es cada día más delgada y será puesta a prueba en los años que vienen. Eso nos invita a pensar de manera profunda y poner al servicio de estas herramientas, nuestro propósito, nuestra conciencia, nuestra humanidad.
Estos conceptos no pueden no ir de la mano. Las máquinas, los celulares, las tablets, los cables y las computadores son incapaces de transformar esta realidad si no van acompañadas de una sociedad capaz de utilizarlas para elevar sus fines al máximo. Entonces, la verdadera revolución, es la revolución de la conciencia.
La web y las nuevas tecnologías, se convierten hoy en una responsabilidad de todos. Ciudadanos, organizaciones, gobiernos y empresas tenemos la oportunidad y la gran responsabilidad de convertir a nuestra generación en una generación que impacte en la vida de todos de un modo positivo, frente a este fenómeno mundial capaz de generar un cambio de alto impacto; quizás el de mas alto impacto en nuestra historia, dada la velocidad y capacidad de reproducción de un mensaje a través de sus medios.
Promover el trabajo en equipo, la solidaridad, el amor, la colaboración y compasión a través de internet o la tecnología, como también fuera de ella, nos permitirán alcanzar una sociedad verdaderamente feliz. Poner el potencial de estas nuevas tecnologías al servicio de la humanidad y los problemas que ella enfrente, son esenciales para afrontar estas batallas.
Hoy es tiempo de poner el sentido común en el centro de la escena y evolucionar de un modo que nos beneficie en conjunto. En este sentido, internet puede ser una plataforma única para este cambio. No todo esta perdido. Ciertos fenómenos están ocurriendo en el mundo web e impactando en la sociedad. Estamos en presencia del empoderamiento del ciudadano, que forma parte de la innovación, de la creación de ideas e impulsando avances en el desarrollo. La colaboración asomó hace un tiempo en diferentes industrias y cada día va tomando más vuelo. Sharing economy, Crowdsourcing, Crowdfunding, Filantropía, Nuevas formas de Democracias y mucho más.
Pero a la par, otras fuerzas crecen aun mas rápido. Se vienen tiempos en los que internet estará cada dia más presente en nuestros vidas dominando nuestros celulares y su experiencia por completo, con funcionalidades que generan un nivel de inmediatez nunca visto en la creación de contenidos.
Hagamos una pausa. Respiremos hondo. Y preguntémosnos con total sinceridad: Cuánto de esto es lo que realmente necesitamos? Cuáles son nuestras metas? Hacia donde soñamos ir y cómo? Cuánto de esto es superfluo y cuanto necesario?
Estas preguntas crean una necesidad. La necesidad de respuestas. La necesidad de balance. En un era de tantas presiones, tanta confusión, tanto ¨contenido¨ sin contenido y tanto ruido, es importante no perder de vista que generar impacto social a través de la tecnología y la web, son el ¨ground zero¨ de una gran oportunidad para todos. Hay 7.000 millones de habitantes en el mundo y contando. Hay 7.000 millones de sueños. Cubrir esa demanda, es sólo cuestión de voluntad, para que en la era de las redes sociales, hayamos logrado ser ¨verdaderamente sociales¨. Dificil de alcanzar, pero realizable.
«COMIENZA HACIENDO LO QUE ES NECESARIO, DESPUÉS LO QUE ES POSIBLE Y DE REPENTE ESTARÁS HACIENDO LO IMPOSIBLE» (San Francisco de Asís)
El futuro de la humanidad está atado al futuro de internet y la tecnología. No olvidemos mantenernos humanos durante ese viaje.
Podemos subir la vara, podemos hacerlo. No perder de vista que fuimos concebidos con la capacidad de crear, puede ayudarnos en este viaje hacia el futuro. Internet y las nuevas tecnologías, no son ¨internet y las nuevas tecnologías.¨ Somos nosotros, los usuarios. Los de todo tipo. Hacia donde decidamos ir juntos, internet y la tecnología irán. Y como en el comienzo de nuestras vidas, todo comienza con un primer paso.
Martín Parlato. CEO y fundador de Posibl. @martinparlato. Debido a su historia familiar llena de momentos dificiles que le tocaron atravesar a partir de la pérdida de gran parte de su familia y todos sus bienes materiales, Martín ideó Posibl. para inspirar impacto social y unir fuerzas con individuos, influenciadores y organizaciones para empoderar a aquellos soñadores que mueven el mundo