tomado del libro «El arte de la guerra para Ejecutivos» de Donald Krause
Aunque no existen pruebas de que anotara personalmente sus reflexiones, cerca de 100 años después de su muerte, el gran guerrero chino Cao Cao reconstruyó cuidadosamente un texto sobre estrategia militar en el que se recogían las enseñanzas de Sun Tzu. El gran éxito que alcanzó Cao Cao en la guerra, aplicando los métodos de Sun Tzu popularizaron mucho el texto, tal cual el boca a boca de nuestros días.
A lo largo de los tiempos, varios jefes militares han atribuido sus victorias y éxitos militares a los principios de Sun Tzu. Por otra parte, debido a la existencia de cierta similitud entre el mundo de la guerra y de los negocios y dado que la sabiduría que encierra el texto se puede aplicar en muchas situaciones de negocios y política, los dirigentes y líderes de todo el mundo, especialmente los asiáticos, estudian y llevan a la práctica la obra de Sun Tzu.
Los siguientes 10 principios de Sun Tzu constituyen la base del éxito competitivo.
Aprender a combatir: En la actualidad la competencia es mayor, más agresiva e inevitable. En las situaciones competitivas no debemos permitir que nuestras emociones rijan nuestros actos. Solo permanecerá en el mercado la organización que esté debidamente preparada en todos sus niveles.
Muestra el camino: El Liderazgo, el Líder marca el camino con el ejemplo, se involucra y se compromete; con sus clientes internos y externos. Sun Tzu nos dice que el liderazgo determina por sí solo el éxito. Confucio creía que el liderazgo eficaz proviene de siete características: la autodisciplina, la decisión, el logro, la responsabilidad, el conocimiento, la cooperación con los subordinados y el ejemplo.
Hazlo bien: Toda ventaja competitiva se basa en la ejecución eficaz. La Planificación es importante, pero los actos son la fuente del éxito. Los ganadores son los que hacen lo correcto en el momento correcto. Avanza cuando sea ventajoso y detente cuando no lo sea.
Conoce los hechos: Para alcanzar el éxito debes disponer de información confiable y suficiente. Solo así se tomarán las decisiones oportunas y adecuadas.
Espera lo peor: Prepárate para lo inesperado, no supongas que la competencia no atacará, la competencia siempre está presente, aún no atacando. Obsérvela de cerca y centra tus recursos en sus puntos flacos. Refuerza las áreas débiles de tu organización
Aproveche el momento: Una victoria se puede lograr con una acción rápida. La innovación y la velocidad son decisivas. Para vencer haz las cosas de modo sencillo, siempre que puedas. No derroches tu tiempo y tus recursos.
Quema las naves: Cuando todos los integrantes están unidos para conseguir un propósito; nada los detiene. Las personas se motivan por las expectativas de triunfo; prepárelas, impúlselas y trátelas bien. El líder triunfador empuja a su equipo hacia delante y después quema las naves tras ellos. La motivación y el compromiso son las claves del liderazgo.
Házlo mejor cada vez: La mejora continua e innovadora, pueden representar la victoria o la permanencia en el mercado. La innovación es la única arma que te vuelve invencible. El poder de la innovación hace segura tu victoria.
Empujamos todos juntos: La organización, la formación y la comunicación son las bases del éxito, son las armas para lograr la victoria. Empléalas cuidadosamente: así siempre las personas estarán en su posición y sabrán que hacer ante cualquier situación.
Que no adivinen tus intenciones: Tu organización será más fuerte, si tu competencia sabe menos de lo que ustedes desean lograr. Cuanto menos sepa un competidor dónde quieres centrar tu atención, mas fuerte serás tú. Sé sutil en tus estrategias, así tu competencia no será capaz de prevenirse contra ellas.