El concepto de sharing economy es una tendencia creciente a nivel mundial, la cual en la actualidad ya comienza a formar parte de la cotidianidad a través de distintas aplicaciones en internet.
Ésta se define como el hecho de compartir bienes de poco uso para poder tenerlos sin hacer una inversión de lleno. Este esquema económico tiene su auge por medio de plataformas digitales que ayudan a que la sociedad comparta sus bienes con las demás personas. Un gran ejemplo de esto es la compañía Uber, misma que pone a disposición de sus clientes una amplia gama de distintos automóviles para que ellos puedan circular por las urbes sin necesidad de poseer un auto propio.
Sustentando lo anterior la consultora británica Euromonitor mostró en un reciente estudio que la llamada Sharing Economy es una de las ocho grandes tendencias que formarán el nuevo consumismo, impactando de manera contundente los sectores de turismo, bienes raíces, industria automotriz, supermercados y hasta la millonaria industria de la moda.
Para conocer un poco más acerca de esta tendencia económica que comienza a crecer a pasos agigantados alrededor del globo, Forbes Life conversó con Ytzia Belausteguigoitia y Lucía Martínez-Ostos, Co Fundadoras y Directoras de Troquer, una plataforma mexicana en linea que comienza a impulsar la economía compartida y el comercio cíclico a través de la compra y venta de artículos de lujo de segunda mano.
Comenzando a compartir
El proyecto de Troquer, ahora una empresa, nace de la inquietud de Lucía Martínez-Ostos de siempre juntarse con un grupo de amigas para intercambiar ropa y a la vez ver su guardarropa lleno y no saber que ponerse.
“Me fui a Nueva York y me di cuenta que ahí había muchos emprendedores, así que aterrice la idea le dije a Ytzia que justo estaba buscando una socia como ella porque yo soy más el lado creativo, pero la parte financiera y de estructura era totalmente su perfil. Le encanto la idea y nos dimos cuenta que había una necesidad enorme de un proyecto de negocio como éste.” comenta Martínez-Ostos.
Complementando a Lucía, Ytzia señala que Troquer surge al ver una enorme necesidad en el mercado y detectar que la evolución de compra ha cambiado 360° a comparación de hace 20 años.
“Nos hemos dado cuenta que la idea en el mercado es genial y tiene muchísimo potencial de crecimiento, y Troquer como empresa cada vez se vuelve más fuerte”, cuenta Belausteguigoitia
Siendo el internet el sustento principal de la economía compartida Troquer inicia como una página de internet en donde la idea es que los artículos a la venta se vean de forma diferente a los de una tienda vintage o de segunda mano.
En este sentido Lucía dice que: “Es difícil tener la misma calidad y volumen en un espacio físico, estamos limitados a eso por que en una tienda online puedes tener el volumen de ventas que desees si tienes un buen servidor.”
De igual forma Troquer no dejó de lado la construcción de un Show Room donde los clientes puedan ir a ver las prendas de forma física, y a su vez probárselas.
“Como entendemos el comportamiento humano y como se han dado cuenta en Europa y en Estados Unidos, la multicanalidad es una cosa que llegó para quedarse. Antes se veían como dos negocios completamente diferentes, el tener una tienda en online y otra offline, hoy en día ya se está repensando. Todos los canales deben existir porque todas las personas tienen diferentes formas y/o actitudes de compra, entonces para nosotros el online es camino y el offline es lo que te da confianza”, señala Ytzia.
Justamente en este sentido de compartir ambos canales Ytzia y Lucía se consideran pioneras en México, ya que ambas comentan que no existe para ellas una competencia pura que combine ambos puntos de venta. Sobre esto Ytzia comenta que “hay quienes no comparan con Mercado Libre o con una tienda vintage que son cosas completamente distintas; una está de un lado y la otra del otro y Troquer está en medio, tal vez más con una tirada hacia lo online pero también con presencia física.”
Por otra parte los consumidores de Troquer son un 85% mujeres y un 15% de hombres que compran para sus esposas o para ellos mismos. Las fundadoras hace hincapié en que sus clientela femenina va desde los 18 años hasta lo 60, convirtiendo a Troquer en un mercado sumamente amplio. De igual manera comentan que el año pasado en donde se concentraba la mayoría de su población consumidora rondaba entre los 35 y 45 años, y hoy los segmentos de 25 a 35 años se encuentran en el mismo nivel.
Rompiendo paradigmas
¿Cómo se realiza una selección de moda de segunda mano? Las directoras nos detallan el proceso de compra y venta en Troquer, el cual funciona de la siguiente manera:
- Las personas que quieren vender sus prendas en Troquer hacen una cita en el Show Room.
- La potencial vendedora deja sus prendas en el Show Room para que el equipo de Troquer haga una curaduría y decida que artículos se quedan y cuales se van.
- Las prendas que se quedan se autentifican, y una vez hecho este proceso se mandan al área de descripción y fotografía.
- Una vez listas las fotos de la prenda, éstas son subidas inmediatamente a la página de Troquer.
- Cuando la prenda se vende la dueña recibe una comisión; ésta puede ser depositada en una cuenta bancaria, ser donada a una fundación, o quedarse dentro de la página como crédito Troquer buscando hacer un consumo cíclico de que la vendedora ahora también se vuelva compradora de la plataforma.
“Nosotros no pagamos por las prendas y no somos dueñas de las cosas que están aquí, todo está a consignación”, aclara Martínez-Ostos.
En cuanto al por qué las compradoras deciden comprar en Troquer y no en una Boutique de lujo, Lucía menciona que “es una situación en la que todos ganamos, gana la vendedora la que va a dejar las cosas aquí por que esta monetizando su guardarropa esta dejando cosas que ya no va a usar y esta haciendo dinero de eso, también gana la compradora porque decimos que estamos democratizando la moda de lujo, marcas que no son fáciles de adquirir porque son cosas bastante caras las puedes conseguir aquí en un precio mucho más barato y también con muy poco uso.”
En este sentido, de ser una plataforma que permite ganar a todos, Ytzia nos habla un poco sobre la economía compartida. “Nos estamos moviendo hacia esta tendencia a nivel mundial, la economía compartida está en Uber, Airbnb, WeWork, está en todas estas plataformas que lo que hacen es que toman todos estos bienes inútiles o poco utilizados y los ponen a trabajar en una comunidad. La idea es que saques provecho de los bienes que posees; por lo que a nosotros nos encanta decir que ya no necesitas tener ropa porque la intercambias en Troquer. Nos estamos insertando en una tendencia global que es el sharing economy que va de forma natural con la manera en la que han crecido los Millennials, es decir que comprar usado a diferencia de hace 20 años que era un tabú ahora es una gran oportunidad de adquisición para esta generación, ya que les parece formidable que en vez de gastarse 50 mil pesos en una bolsa, se puedan gastar 15 mil pesos por la misma bolsa en un gran estado.”
Siendo Troquer una plataforma de lujo que se rige por medio de la compra y venta de artículos de segunda mano, las fundadoras se han dado a la tarea de romper con esos paradigmas con los que la gente en la cotidianidad asocia las palabras “segunda mano”.
“Fue un proceso de decir cuáles son los preceptos con los que asocias segunda mano, uno de los principales es pensar en una tienda oscura, que huele a naftalina y donde las cosas están arrumbadas. Esto es lo que quisimos romper, por lo que encuentras que las piezas están perfectamente bien presentadas, estéticamente, tanto en la página como en el Show Room, hay una curaduría y cuando alguien nos visite encontrará algo rápido y fácil. Todo lo que no encuentras en una tienda de segunda mano lo encuentras en Troquer, y justamente cuidamos muchísimo la autentificación, la limpieza de las prendas, que estén en buen estado, y que no huelan mal”, cometa Belausteguigoitia
También cabe destacar que también se pueden encontrar artículos completamente nuevos; de hecho en su página se pueden ver las prendas por distintas categorías de uso que se dividen entre: Nuevo con etiqueta, Nuevo sin etiqueta, Estrenado un par de veces y Usado con onda. Estas categorías le dan un valor agregado, al ser una plataforma completamente honesta con sus clientes.
Las piezas más vendidas en Troquer son las bolsas y más las Louis Vuitton; esto dice Ytzia que es “porque México es una país aspiracional y tiene una acepción del lujo mucho más importante. Entonces las piezas que muestran más la marca y su iconografía se venden más rápido que una bolsa de la misma marca que no tiene tanto logotipo en sí misma. La bolsa Louis Vuitton quiere decir que tienes el poder adquisitivo y buen gusto.”
“Cada vez nos hemos vuelto mas selectivas con las cosas que vendemos para cuidar el sello de calidad de Troquer”, nos dice una de las fundadoras de esta plataforma donde se encuentran marcas como Gucci, Prada o Hérmes.
Otros beneficios y retos
Las fundadoras y Directoras de Troquer platican que otro de los beneficios y con lo que comenzó el atractivo del proyecto fue trabajar con guardarropas del celebridades, que hasta hoy día siguen formando parte de la marca.
“El hecho de que existan personas que conocen Troquer y que son influencers es que le dan confianza a una marca; por lo que comenzamos con esta estrategia. Ahora tenemos a la venta el clóset de celebridades para que quienes se identifiquen con ellos puedan adquirir las prendas. Tiene que ver más con un tema de identidad de quienes compramos”, remarca Ytzia.
De igual forma Ytzia comenta que en México las plataformas de comercio digital aún enfrentan varios retos como el poco volumen de tarjetas de crédito. Lucía agrega que también es muy difícil crear una buena relación con las empresas de envíos en donde se vea de nuevo el tema de ganar-ganar. Las compras realizadas en Troquer llegan a tu casa aproximadamente cinco días después del pedido; así mismo existe la opción de devolución.