Dos latinoamericanas viajando por India y el sur de Asia, buscan acercar continentes contando historias sobre emprendimiento social, traspasando la brecha del idioma
Hace un año, la chilena Paz Bascuñán emprendió un viaje a lo desconocido para aprender y entender el mundo del emprendimiento social a nivel mundial. Con mucho temor disfrazado de valentía a no entender los acentos de africanos o asiáticos, o a sentir que no llegase a relacionarse con las problemáticas sociales, dejó su trabajo, familia y la comodidad de lo conocido para aventurarse en la India.
Por su parte, la mexicana Melina Bravo, cumplió uno de sus grandes sueños al comenzar su emprendimiento en Chile: una casa multicultural llamada Arborigen Co-living, en Temuco, un espacio que promueve la colaboración con un enfoque en sustentabilidad, que sigue en marcha gracias a la comunidad que se beneficia, ya que es el esqueleto y el corazón de dicha iniciativa.
Al poco tiempo en India, Paz se dio cuenta que su temor era infundado, que muchos de los problemas sociales que enfrentan países como Sri Lanka, Nepal o India, son muy similares a los que se ven enfrentados México, Colombia o Chile. Pero el temor a lo desconocido es real, porque más de un 80% de los países hispanohablantes no domina el inglés, idioma principal en el que se comunican los países asiáticos hacia el extranjero.
Así, Paz dejó la organización a la que llegó a trabajar a India para desarrollar una solución a este problema y en menos de seis meses Melina se le sumó. Juntas han fundado Ancla Latam, un proyecto que busca generar conciencia sobre los problemas sociales que se comparten en todo el mundo, involucrándose en Asia a nivel local, viviendo diferentes culturas. Junto con empresas sociales, proyectos inspiradores y colaboradores de distintas latitudes, motivan e impulsan a la comunidad latinoamericana, a través de difusión por redes sociales y acompañamiento virtual, para que tomen parte del desarrollo de su región.
Paz y Melina ya se han reunido con decenas de emprendedores sociales y agentes importantes del ecosistema emprendedor en Asia. Luego de su reencuentro hace dos meses, terminaron de darle forma al esqueleto de lo que será su aventura por India, Nepal y Bangladesh los próximos meses, en búsqueda de emprendedores sociales, proyectos inspiradores y financiamiento para seguir trabajando hacia Latinoamérica.