Cientos de trabajos científicos aseguran que el conocimiento es poder y que, por eso, los hombres naturalmente no desean compartirlo. Pero, ¿qué pasa entonces cuándo familias que enfrentan un mismo desafío, se juntan para ayudarse unas a otras? ¿Cuál es la fuerza que las impulsa a compartir lo que saben?
A Ian le faltó oxígeno en el parto y a causa de ello padece una encefalopatía crónica no evolutiva, que limita sus movimientos y su habla. Su mamá, Sheila encontró un novedoso dispositivo llamado Tobii que le cambió la vida ya que le permite a Ian “hablar con la mirada” y hoy trabaja para que el Tobii, como cualquier otra tecnología que mejore la calidad de vida de las personas con discapacidad, sea accesible a todos.