Galicia ocupa el primer puesto entre las comunidades autónomas con mejores perspectivas empresariales para este año. Las previsiones sobre la cifra de negocio en 2006 son las más optimistas de España, ya que el número de empresas que consideran que mejorarán su facturación durante el presente ejercicio es 63 puntos superior a las que estiman un retroceso, cuando la media española está en torno a los 53 puntos.
Los resultados proceden del estudio Perspectivas empresariales para 2006. Comunidades autónomas, realizado por las Cámaras de Comercio con encuestas realizadas, a finales de 2005, a casi 4.000 empresarios de toda España y a alrededor de 600 emprendedores gallegos.
Los resultados del estudio sitúan a Galicia entre las comunidades más optimistas para 2006, empatada con el País Vasco, en donde el número de empresarios que consideran que este año será mejor que el anterior supera también en 63 puntos al de quienes piensan lo contrario. En tercer lugar se sitúan, con 61 puntos más para los optimistas, las comunidades de Andalucía y Madrid, mientras que el tercer lugar es para Asturias y Murcia, con 60 puntos.
La media española es de 53 puntos, mientras que en la Unión Europea quienes creen que sus negocios van a mejorar con respecto al año pasado apenas supera en 33 puntos al resto. En el último puesto se encuentra La Rioja, en donde los empresarios optimistas apenas superan en 22 puntos a los pesimistas.
Según este estudio, la evolución de la cifra de negocio de las empresas gallegas a lo largo de 2005 fue más positiva que la media española y mucho más favorable que la de la Unión Europea, por lo que se mantienen las expectativas para este año del 70% de los empresarios, especialmente dentro del sector servicios.
En lo que se refiere a las ventas nacionales, los empresarios gallegos son un poco más cautos, aunque se mantienen las perspectivas positivas que se dieron en 2005, por encima de las previsiones nacionales y las de la UE.
En las exportaciones, el año pasado la cautela fue el principal sentimiento expresado por los emprendedores gallegos, ya que apenas el 50% confiaba en mejorar los resultados del ejercicio anterior. Para 2006, sin embargo, este porcentaje se acerca casi al 70%, más favorables que las expectativas del resto de España (45%) y la UE (40%). En este sentido, apenas llega al 2% el porcentaje de empresarios que esperan un retroceso en las exportaciones gallegas
La creación de empleo es uno de los aspectos más negativos del estudio. Mientras que en 2005 se superaron las expectativas en este terreno, con un comportamiento más positivo que el que se registró en el resto de España y en la Unión Europea, para este año los gallegos estiman que habrá una menor creación de empleo.
Quienes consideran que se mejorarán los resultados del año pasado no llegan al 40%. Por el contrario, la mayoría de los empresarios se inclinan por un mantenimiento de las plantillas aunque permanecerán las diferencias positivas con las medias nacional y europea. Según el estudio, el mayor dinamismo se producirá dentro del sector servicios.
Por último, el informe de las Cámaras de Comercio analiza también la tasa de inversión que, durante el último año, superó las previsiones, mejorando las medias española y de los países de la Unión Europea. Las expectativas para este año apuntan a una pérdida de intensidad en el ritmo inversor, tanto en Galicia como en Europa, aunque se mantendrán las diferencias positivas de la comunidad autónoma con respecto a la Unión Europea. En este sentido, el aspecto más positivo que refleja el informe es la tendencia a consolidar las inversiones.
En los últimos nueve años, la economía gallega ha mantenido un diferencial de crecimiento positivo con respecto a la Unión Europea y al resto de España, lo cual pone de manifiesto una convergencia en términos de Producto Interior Bruto (PIB) respecto a estos dos espacios económicos.
En estos últimos años, las expectativas de los empresarios gallegos siempre han sido más optimistas, excepto en los años 2002 y 2003, en que los emprendedores del resto de España preveían una mejor evolución de sus negocios que la que se percibía en Galicia.
Las previsiones de los hombres de negocio gallegos siempre han superado con creces, casi el doble, a la de los empresarios de la Unión Europea que, sin embargo, han ido mejorando desde el año 2003.
Las expectativas de las empresas gallegas para este año apuntan a una evolución en línea con los años anteriores, es decir, los empresarios gallegos se muestran más optimistas que sus homólogos españoles y europeos.