Cuatro días después de que su padre, el rey Juan Carlos I, anunciara su abdicación, el todavía Príncipe de Asturias reiteraba su más firme apoyo a aquellos que intentan emprender.
El rey Felipe VI, decía en el foro Red de Enviados Europeos de las pymes, que hay que dar «nuevas oportunidades» a los emprendedores que han tenido experiencias no exitosas, porque de su fracaso pueden surgir proyectos e iniciativas con «más fuerza, optimismo y oportunidades».
El todavía Príncipe aseguraba que «los datos nos demuestran que los empresarios que reinician su actividad tras una primera experiencia no exitosa, corrigen y crecen sobre sus errores, abordando con mejores expectativas los siguientes intentos».
Unas palabras que no eran nuevas. De hecho, en marzo de 2012 el Príncipe ya pedía en la entrega del XIV Premio Nacional Joven Empresario, ya pedía la colaboración de todos para ayudar a «animar a los mejores y no dejar en la cuneta a los que les va peor o tienen menos oportunidades».
Esfuerzo
Y es que para don Felipe el esfuerzo de los emprendedores «aporta claramente un beneficio colectivo», como recordó el pasado 19 de mayo en la clausura de la campaña ‘Todos somos empresa’, de la Cámara de Comercio de Sevilla.
Felipe ya había reclamado a los responsables empresariales en noviembre de 2012, en la inauguración de la Asamblea General de Cámaras de Comercio, que dirigieran todos sus esfuerzos a «identificar y apoyar a los jóvenes en sus ideas, espíritu y proyectos emprendedores» porque los empresarios «son quienes generan la mayor parte del empleo.
Don Felipe, como Príncipe, también ha apostado por un cambio de mentalidad en España que contribuya a que se creen más empresas. En mayo de 2001, en la inauguración del ‘Salón de la creación de empresas’ decía que para fomentar la creación de nuevas entidades productivas debía modificarse la «actitud de la sociedad hacia la figura de los emprendedores» y también las «políticas de organismos e instituciones» para ese colectivo.
En 2012 insistía en el Alumni Forum de IE Business School que era preciso «reivindicar el valor social del empresario y la labor emprendedora como factores de gran importancia para superar la crisis», pues, según Felipe VI, «el espíritu emprendedor actúa catalizador del crecimiento económico al potenciar la creación de empresas y generar empleo».
Defensor de las pymes
El nuevo monarca también ha sido un firme defensor de las pymes, a las que ha calificado de ?elementos esenciales del nervio empresarial?. Por eso, el pasado mes de mayo demandaba que se apoyara «de la manera más efectiva posible» a las pymes, pues «deben ser las nuevas protagonistas» de la presencia exterior de la empresa española.
Una presencia exterior que don Felipe considera imprescindible. «La internacionalización no es hoy en día una opción, sino una obligación», ha dicho en varias intervenciones el hasta ahora Príncipe, que ha recorrido países latinoamericanos y diversos lugares de Estados Unidos para apoyar a las empresas españolas en esos países.
Don Felipe, que ha reconocido en numerosas ocasiones «la labor que en España y en todo el mundo están realizando muchas firmas españolas» que «han impulsado la internacionalización de la economía española», ha afirmado que el sector exterior constituye «un apoyo fundamental para la superación de la crisis».
Tiempo de oportunidades
El nuevo monarca ha afirmado en foros donde ha intervenido que «momentos difíciles como los actuales posibilitan dar pasos a oportunidades que pueden ser aprovechadas con una mayor implantación en mercados más amplios».
La innovación también está en el centro de las preocupaciones de don Felipe, que el pasado mes de abril, en la clausura de una cumbre sobre I+D+i de la CEOE, decía que la innovación es un factor clave junto a la formación y la internacionalización para crear crecimiento económico en España, aumentar la productividad y generar empleo de calidad.
Su preocupación por el desarrollo tecnológico se puedo ver el pasado mes de febrero en la visita que hizo al Salón Internacional de Emprendimiento ‘4 Years From Now (4YFN)’, organizado en el marco de la Mobile World Capital Barcelona, donde dio su apoyo a la industria tecnológica y defendió que se establezcan en España más centros de excelencia e innovación para favorecer la consolidación de las start-ups.
Formación
La formación de los jóvenes es otra de las preocupaciones de Felipe VI, que cree que «la economía tiende a un modelo basado en la sociedad del conocimiento, lo que exige una mayor y mejor cualificación para diferenciarse y progresar».
El entonces Príncipe decía en mayo de 2013 que el papel de las universidades debe ser formar a los jóvenes para adquirir las habilidades que les permitan encontrar trabajo.
Durante la entrega del XVIII Premio Joven Emprendedor de la Asociación Independiente de Jóvenes Empresarios de Cataluña, insistía en que había que mejorar la formación de los jóvenes, ya que ?buena parte del paro juvenil tiene su causa en la falta de una adecuada preparación de nuestros jóvenes?.
«La formación es un requisito esencial para desarrollar ideas emprendedoras, pero también para relanzar el empleo juvenil», afirmaba Don Felipe, que también ha insistido en sus intervenciones como Príncipe en la necesidad que las empresas mantengan sus políticas de responsabilidad social y de hacer de España una referencia en esta materia.
fuente: El Economista
Cuatro días después de que su padre, el rey Juan Carlos I, anunciara su abdicación, el todavía Príncipe de Asturias reiteraba su más firme apoyo a aquellos que intentan emprender.
El rey Felipe VI, decía en el foro Red de Enviados Europeos de las pymes, que hay que dar «nuevas oportunidades» a los emprendedores que han tenido experiencias no exitosas, porque de su fracaso pueden surgir proyectos e iniciativas con «más fuerza, optimismo y oportunidades».
El todavía Príncipe aseguraba que «los datos nos demuestran que los empresarios que reinician su actividad tras una primera experiencia no exitosa, corrigen y crecen sobre sus errores, abordando con mejores expectativas los siguientes intentos».
Unas palabras que no eran nuevas. De hecho, en marzo de 2012 el Príncipe ya pedía en la entrega del XIV Premio Nacional Joven Empresario, ya pedía la colaboración de todos para ayudar a «animar a los mejores y no dejar en la cuneta a los que les va peor o tienen menos oportunidades».
Esfuerzo
Y es que para don Felipe el esfuerzo de los emprendedores «aporta claramente un beneficio colectivo», como recordó el pasado 19 de mayo en la clausura de la campaña ‘Todos somos empresa’, de la Cámara de Comercio de Sevilla.
Felipe ya había reclamado a los responsables empresariales en noviembre de 2012, en la inauguración de la Asamblea General de Cámaras de Comercio, que dirigieran todos sus esfuerzos a «identificar y apoyar a los jóvenes en sus ideas, espíritu y proyectos emprendedores» porque los empresarios «son quienes generan la mayor parte del empleo.
Don Felipe, como Príncipe, también ha apostado por un cambio de mentalidad en España que contribuya a que se creen más empresas. En mayo de 2001, en la inauguración del ‘Salón de la creación de empresas’ decía que para fomentar la creación de nuevas entidades productivas debía modificarse la «actitud de la sociedad hacia la figura de los emprendedores» y también las «políticas de organismos e instituciones» para ese colectivo.
En 2012 insistía en el Alumni Forum de IE Business School que era preciso «reivindicar el valor social del empresario y la labor emprendedora como factores de gran importancia para superar la crisis», pues, según Felipe VI, «el espíritu emprendedor actúa catalizador del crecimiento económico al potenciar la creación de empresas y generar empleo».
Defensor de las pymes
El nuevo monarca también ha sido un firme defensor de las pymes, a las que ha calificado de ?elementos esenciales del nervio empresarial?. Por eso, el pasado mes de mayo demandaba que se apoyara «de la manera más efectiva posible» a las pymes, pues «deben ser las nuevas protagonistas» de la presencia exterior de la empresa española.
Una presencia exterior que don Felipe considera imprescindible. «La internacionalización no es hoy en día una opción, sino una obligación», ha dicho en varias intervenciones el hasta ahora Príncipe, que ha recorrido países latinoamericanos y diversos lugares de Estados Unidos para apoyar a las empresas españolas en esos países.
Don Felipe, que ha reconocido en numerosas ocasiones «la labor que en España y en todo el mundo están realizando muchas firmas españolas» que «han impulsado la internacionalización de la economía española», ha afirmado que el sector exterior constituye «un apoyo fundamental para la superación de la crisis».
Tiempo de oportunidades
El nuevo monarca ha afirmado en foros donde ha intervenido que «momentos difíciles como los actuales posibilitan dar pasos a oportunidades que pueden ser aprovechadas con una mayor implantación en mercados más amplios».
La innovación también está en el centro de las preocupaciones de don Felipe, que el pasado mes de abril, en la clausura de una cumbre sobre I+D+i de la CEOE, decía que la innovación es un factor clave junto a la formación y la internacionalización para crear crecimiento económico en España, aumentar la productividad y generar empleo de calidad.
Su preocupación por el desarrollo tecnológico se puedo ver el pasado mes de febrero en la visita que hizo al Salón Internacional de Emprendimiento ‘4 Years From Now (4YFN)’, organizado en el marco de la Mobile World Capital Barcelona, donde dio su apoyo a la industria tecnológica y defendió que se establezcan en España más centros de excelencia e innovación para favorecer la consolidación de las start-ups.
Formación
La formación de los jóvenes es otra de las preocupaciones de Felipe VI, que cree que «la economía tiende a un modelo basado en la sociedad del conocimiento, lo que exige una mayor y mejor cualificación para diferenciarse y progresar».
El entonces Príncipe decía en mayo de 2013 que el papel de las universidades debe ser formar a los jóvenes para adquirir las habilidades que les permitan encontrar trabajo.
Durante la entrega del XVIII Premio Joven Emprendedor de la Asociación Independiente de Jóvenes Empresarios de Cataluña, insistía en que había que mejorar la formación de los jóvenes, ya que ?buena parte del paro juvenil tiene su causa en la falta de una adecuada preparación de nuestros jóvenes?.
«La formación es un requisito esencial para desarrollar ideas emprendedoras, pero también para relanzar el empleo juvenil», afirmaba Don Felipe, que también ha insistido en sus intervenciones como Príncipe en la necesidad que las empresas mantengan sus políticas de responsabilidad social y de hacer de España una referencia en esta materia.
fuente: El Economista