El capital social es el saldo de la cuenta corriente social y el dinero no sirve para nada en soledad. Para crear una mina de oro hay que tratar a los demás como desean ser tratados.
El progreso tecnológico no pudo solucionar el gravísimo problema de la desigualdad y se ha llegado una realidad de ricos cada vez más ricos y pobres cada vez más pobres. Se han buscado todo tipo de salidas pero con el transcurso del tiempo las cosas retroceden a su nivel inicial. Las soluciones son meros paliativos y siempre se retorna al nivel inicial.
Lo que las naciones no pueden lograr lo intentan hacer, con variadas historias de éxitos y fracasos, las empresas, los particulares y las organizaciones no gubernamentales.
Una nueva propuesta es investigar la idea de un banco de favores. Se trata de hacer un depósito inmaterial para atender una situación compleja y conectar a los actores con un propósito definido. El actor de la iniciativa facilita su diálogo e inicia la negociación. Si logra los fines que se propuso y las partes lo reconocerán como parte de la solución, este personaje habrá contribuido solucionar un problema y habrá mejorado su posición social.
El mundo está hecho de relaciones y quien las construye tendrá su red social, conocerá a quien necesite conocer y su influencia crecerá. Es una inversión de riesgo. Siempre habrá quien no devuelva un favor, que se crea superior y suponga que todo depende de su talento. Nunca será una persona confiable, progresará un poco, empezará a declinar, no estará frustrado ni realizado y será uno más lo que en realidad significa ser uno menos.
El personaje imaginario, mientras tanto seguirá invirtiendo: “Cultivo una rosa blanca, en junio como enero, para el amigo sincero, que me da su mano franca. Y para el cruel que me arranca el corazón con que vivo, cardo ni ortiga cultivo; cultivo la rosa blanca”.
Nada surge de la nada
Solo no se puede, hay que contar con buenas relaciones. Un principio de la riqueza social afirma: “los conocidos valen tanto como los conocimientos”.
1- Crea confianza. Toma las alegrías y tristezas del otro como si fuesen tuyas.
2- Cuida las reacciones. Mantén la calma sin alterar el buen juicio.
3- Sonríe. La sonrisa es un imán que anima e inspira seguridad.
4- Sé amable. Da las “Gracias” y pide “Disculpas”.
5- Tienes dos orejas y una sola lengua, es para escuchar el doble de lo que dices. 6- Recuerda el nombre del otro es la más dulce melodía que escuchará. 7- Los mejores oyentes usan el replanteo. “Veamos si comprendí lo que dijiste”. Luego transmite tu mensaje con el valor agregado.
6- Empatiza. Ponte en el lugar del otro.
7- Elogia. Alimenta sinceramente su ego.
8- Que se sienta importante. Salúdalo con entusiasmo. Debes interesarte para que se interesen en ti.
9- Comparte valores. Es la mejor forma de lograr compromiso. Honestidad, integridad, prudencia, reflexión, paciencia, justicia, amor, imaginación invocan a fuerzas que te acompañan desde la infancia.
10- Autoconocimiento. Deja que descubran algo por sí mismos sin darles órdenes.
11- Pídeles ideas. Permite que los demás se lleven el crédito y conseguirás lo que te propongas.
12- Da lugar al desafío. “Estoy seguro que lo conseguirás”. La gente progresa más cuando se le brinda feedback. 12- Haz favores. Depositando siempre podrás realizar un retiro.
13- Reconoce el mérito. De otro modo descubrirá que sólo intentas adularlo.
14- No te alejes del rebaño. Las personas se comportan como manada. “Si todos lo hacen yo también”, “Si varios clientes piensan bien de ti, debes ser bueno”.
15- Una imagen vale más que mil palabras. Una historia provoca imitación y llega más lejos que una teoría.
Cuenta corriente emocional
Es la que crece con amabilidad, honestidad, respeto, cumplimiento y disminuye con el mal trato, la traición y los reproches. Su saldo refleja el estado de una relación. Es más fácil decir lo que separa que lo que une. Las palmadas en la espalda brindan energía y confianza. Reconocer el mérito es signo de valoración. Pensar que se “sobreentiende” es la excusa para no advertir que cuesta reconocer. Un halago pesa menos que un reproche, un retiro de confianza equivale a varios depósitos.
El reproche pone al otro a la defensiva y lo lleva a tratar de justificarse.
La persona que desaparece hace olvidar el saldo de su cuenta: lo que no se usa se pierde. Quien está presente abre subcuentas de simpatía, coherencia, inteligencia, amistad; son valores que suman. Cuando escasean la cuenta llega a cero o queda en rojo.
La emoción es subjetiva, vale menos la realidad que la percepción. La gente confía más en lo que se hace que en lo que dices. La inteligencia espiritual crea la energía, la inteligencia emocional la convierte en ideas y planes, la inteligencia social se nutre de cuentas con saldo positivo: “Dime con quién andas y te diré quién eres”. Depositar en relaciones, realizar favores sin que se los pidan, comentar lo bien que se ve a alguien, ofrecer ayuda, son regalos emocionales. El capital social florece construyendo el éxito en el tejido social.
Warren Buffet donó su dinero a la fundación de Bill Gates. Su riqueza es saber quiénes serían capaces de arriesgarse por él. Se siente rico por sus relaciones, no por su dinero.
Hay ricos no devuelven a la sociedad parte de lo que reciben de ella. En el capitalismo los ganadores se quedan con todo. El capital social es el saldo de la cuenta corriente social y el dinero no sirve para nada en soledad. Para crear una mina de oro hay que tratar a los demás como desean ser tratados. Rockefeller dijo: “Pagaría más por la capacidad de saber tratar a las personas, que por cualquier otra”. Lo importante es saber que lo que uno es resuena tan fuerte en los oídos de tus relaciones que no pueden escuchar lo que les dice.
Ayuda efectiva
Es la que se logra sin seguir ayudando eternamente. Un obsequio no enseña a afrontar una situación y debilita al que da. Los planes sociales dan pescado pero no enseñan a pescar, generan contagio y crecen que los piden. Se deben cobrar más impuestos para otorgarlos y el contribuyente pierde capacidad de ahorro. Dar disminuye el sentimiento de culpa, insume recursos, hace perder capacidad financiera y no se convierte en un generador de riqueza. Su alto impacto inicial suele ser efímero y el beneficiario retorna a su realidad previa. A la larga agota recursos, deja de ser viable, traba la capacidad de ganar dinero y por ende no es sustentable.
Que sea positiva
No basta con procurar el bien del otro a costa del interés propio. No está mal donar pero la pobreza sigue, el pobre no la valora porque no requiere esfuerzo y lo lleva a pedir más porque cree que es fácil para quien lo da. Facilitar demasiado las cosas no permite crecer.
Hacerlo por él
Otra forma de colaborar es hacer por otros lo que no saben hacer. Así ante el mismo problema no sabrán resolverlo. El modelo sustitutivo priva de aprender y genera dolor bajo el amparo de la solidaridad compasiva. También genera dependencia que se nota en el desprecio por los resultados obtenidos. Se pierde la oportunidad de guiar para que aprendan.
Favores permanentes
Favorecer es brindar capacitación, ya que el conocimiento es el único bien que crece cuando se lo comparte. Hay que contener el impulso de dar asistencia, educar transforma la acción en una oportunidad que enriquece y estimula a crecer con ingresos dignos, y lleva a generar valor. Al dar recursos se agrega compartir conocimientos, habilidades y guía. El beneficiado ya no recibe una limosna por trabajar muchas horas excediendo una jornada normal, bajo condiciones extremas y no logrando más que lo mínimos necesario para subsistir.
Es muy costoso ser pobre para quienes lo son y para los países donde viven, por eso la clave es el esfuerzo que demande el favor constructivo. Nadie trabajará mejor ni va a poner más interés en aprender un oficio que quien recibe la oportunidad generar valor agregado. La diferencia está en que el guía puede contagiarle su pasión por hacer un trabajo bien hecho.
No hay mezquindad que se oponga al esfuerzo sustentable, ya que ayuda a todos a crecer.
Ayudar y transmitir valor
Regalando las cosas quedan como estaban antes. Ayudar educando hace que deje de ser necesaria la limosna y que enriquezca a todos los que forman parte.
Esta fórmula no genera vergüenza en quien la recibe ni es vista como clandestina o en busca de protagonismo. Transmitir valor de este modo es un fin más noble que hacerlo para lavar culpas, maquillar la imagen, demostrar poder u obtener beneficios impositivos.
La clave es el gana-gana entre oferta y demanda, que mejore al conjunto, brindando libertad, autonomía y capacidad de seguir creciendo con un modelo más evolucionado. Está muy claro que debe existir mucho más que un camino único para llegar a la raíz del problema.
Transmitir Valor
El proceso donativo se vuelve responsable cuando es evolutivo, deja a todos más cerca del objetivo y no permite dar un paso atrás, para que la historia no se repita.
El rol generador de valor es el que logra que el cambio ocurra. Un facilitador es quien tiene un conocimiento, una pasión o un talento para compartir y el deseo de usarlo para cambiar la vida de los necesitados, una coincidencia entre su don para compartir y quien lo necesita.
Además del fin benéfico el facilitador suma capital social y los líderes de la comunidad funcionan como validadores. La pobreza suele traer aparejada una debilidad en la personalidad, por lo que si la incorporación de valor es auspiciada por líderes sociales se impulsa el crecimiento, se diluye el desánimo y la sensación de estar en un callejón sin salida.
La clave del cambio radica en contar con un talento, una habilidad, un conocimiento y confiar en uno mismo para lograr que se multiplique. Además se precisa alguien respetado y valorado que les diga: “Ahora vayan y muestren que son capaces”. Es un líder de opinión, un referente, que pondera el esfuerzo de quienes aceptan enriquecerse en valores para cambiar su realidad.
El fin y los medios
Teniendo los recursos todavía sigue habiendo un trastorno por resolver, un problema que reclama atención ya que la emoción positiva es tan solo un instante fugaz.
Se precisa tener un propósito claro y ponerlo en evidencia, contar con licencia social para operar, ser preferido sobre otras opciones, contar con un diálogo franco y abierto para saber que se está avanzando. Si se puede hacer mucho más no hay motivos para dejar de hacerlo
El aporte de un problema resuelto es lo que debió ser, pero antes no se reclamaba por el prejuicio de que la ayuda no se reclama, solo se agradece cuando alguien la ofrece.
Si hay algo parecido a la magia en los favores es cuando la magia se hace presente, atrapa por el encantamiento y se disfrutan los resultados obtenidos.
Planeamiento sustentable
La comunidad como sistema debe progresar como para que sus integrantes tengan herramientas para salir de su estado de vulnerabilidad y se los equipe con lo necesario para que puedan desempeñar sus tareas de manera cómoda como segura y se los guíe en su progreso, en el aprendizaje de los gajes del oficio y en los secretos que deben dominar a través de un trabajo lento y arduo al principio, pero grato y reconfortante al final.
El enriquecimiento productivo y convergente lo promueve la conveniencia mutua sin la relación de dependencia que suelen generar otros formatos de beneficios. Se transmite un valor capacitante al que lo recibe para que lo utilice, un valor que no se agota, que crece con el uso y progresa cuando se comparte ya que la práctica hace al maestro. Hacerse libres y capaces de avanzar y de contagiar a otros en el progreso, permite al aportante revalidar su licencia social, pasar el examen de la aprobación de la comunidad donde se construyen relaciones profundas, con nutrientes poderosos y con un posicionamiento de reputación en la mente colectiva.
Construcción del vínculo
El actor social con el progreso de su tarea llegará a enfrentar decisiones relativas a grupos con los cuales podría sentir que le quitan foco de su razón de ser. La ayuda es una potente herramienta constructora de valor que permite construir redes que evolucionan junto con quienes las conforman. El proceso se divide en 5 pasos:
1. Detección y diálogo.
2. Seleccionar talentos facilitadores.
3. Transmitir valor.
4. Validar.
5. Comunicar.
Alinear la ayuda con la estrategia permitirá que el resultado pueda considerarse como enriquecimiento mutuo, simultáneo, abarcador y sustentable en términos de valor y desde diferentes ópticas. El vecindario sabrá que es un método aplicable cada vez que se detecte una oportunidad de ayuda, definida por un diálogo entre conocidos, lo que facilita la confianza desde el arranque. La validación por un actor social reconocido y la comunicación transparente sobre las personas capacitadas y listas para brindar valor, aporta transparencia, un valor clave del que implica que no sea necesario seguir haciendo favores a futuro.
Favores internacionales
La Conferencia Río 2012 sobre Desarrollo Sustentable de la ONU, según el Pacto Global de Sustentabilidad abarcó a los193 estados miembros y discusiones abiertas. El resultado fueron 17 objetivos distribuidos en Personas, Planeta, Prosperidad, Paz y Asociaciones con 169 metas hacia 2030. Los 17 objetivos buscan alinear la ayuda para potenciarla en el planeta. Se destaca la importancia de la cobertura sanitaria universal para mejorar la salud, la cohesión social y el desarrollo humano y económico sostenible. Reconoce que la carga y la amenaza que representan las enfermedades no transmisibles a nivel mundial es uno de los principales obstáculos al desarrollo sostenible en el siglo XXI. La irrupción del corona virus en 2020, demuestra que la tarea a realizar es urgente e imprescindible.
Cambiar los determinantes sociales y ambientales de la salud, son importantes para crear sociedades inclusivas, equitativas, productivas y sanas, para lograr el el derecho de todos a disfrutar del más alto nivel posible de salud física y mental. Convertir a la educación y a la salud en políticas de Estado son las llaves para atacar en forma sustentable el drama de la desigualdad. Seguir con el actual sistema de producción, es volver a construir un puente con las mismas fallas, que hicieron que se caiga, así no habremos aprendido que tenemos una casa única, donde cualquier daño al medio ambiente nos afecta a todos. Educación y salud son la industria pesada de cualquier nación ya que fabrican los ciudadanos del futuro
Excelente articulo para la reflexión y para ponerlo en practica