Steve Jobs dejó finalmente el día a día de Apple. Todos los inversores nos preguntamos qué pasará de aquí en más. Las pistas que nos da el caso Disney.
Si miramos los retornos que Apple le dio a sus accionistas durante la última década, podemos decir que la empresa de la manzanita es el mejor amigo del inversor. En la nota que publicamos la semana pasada llamada “Cómo convertir $10.000 en $300.000 en diez años” mostrábamos como Apple había incrementando su precio en un 4.000% durante la última década.
Este impresionante crecimiento se dio en gran medida gracias al aporte de su fundador, Steve Jobs. Su visión, estilo, estrategia y liderazgo permitieron que Apple hoy sea una de las empresas más valiosas del mundo.
Pero dos días después que publicamos esa nota Jobs anuncia que finalmente deja la presidencia de Apple por sus conocidos problemas de salud. Información sobre esto la encuentran en la nota “Steve Jobs renuncia como CEO de Apple”.
Si bien el anuncio no es una sorpresa y Jobs viene adelantando esto desde hace mucho tiempo, es inevitable preguntarse hoy acerca del futuro de Apple sin Jobs. ¿Podrá la compañía seguir creciendo sin el liderazgo e innovación de su carismático líder?
Tim Cook, el nuevo CEO, tendrá un lindo desafío por delante. Seguramente los próximos dos o tres productos que lance la empresa tendrán todavía el “toque Jobs”. Pero lo que viene después de estos lanzamientos es lo que todo el mundo estará evaluando en detalle. Los analistas reconocen a Cook como un excelente hombre operativo pero no están tan seguros que pueda liderar a Apple en su continua innovación.
La experiencia Disney
Con un desafío similar al que hoy enfrenta Apple tuvo que lidiar el gigante del entretenimiento Disney algunas décadas atrás. El CEO de Disney, el mítico Walt Disney, tenía una impronta similar a la de Jobs. Era un visionario, una celebridad y estaba tan identificado con la marca Disney que hasta llevaba su apellido…
Walt Disney murió el 15 de diciembre de 1966. Ese día las acciones de Disney cotizaban a un precio de US$ 69 en Nueva York. Este precio, si lo ajustamos por los “splits” que tuvo la acción y los pasamos a dólares de hoy, representaría US$ 1,02 hoy. El viernes pasado Disney cerró a un precio de US$ 32,40. Un rendimiento extraordinario a pesar de que el líder de la empresa no estaba más.
Por supuesto que este no fue un camino fácil ni simple para Disney. Fue un camino lleno de obstáculos. En el año 1971, unos pocos años después de la muerte de Disney, la empresa abrió su primer parque temático en Orlando. Este parque fue manejado por el personal operativo de la empresa de la “misma manera que lo hubiera manejado Walt”.
Pero faltaba la creatividad y la innovación de Walt Disney. Y el parque no lograba levantar su negocio definitivamente. Tuvo que llegar un nuevo y renovado management liderado por Michael Eisner para lograr llevar a Disney a nuevos horizontes.
Ese nuevo liderazgo de Disney no solo logró expandir el negocio de los parques sino que también encontró nuevas fuentes de ingresos como la venta de merchandising y la venta de videos y DVDs. Hoy Disney es líder en la industria de entretenimientos mundial, siendo dueña no solo de los conocidos parques de diversiones, famosas películas y emblemáticos personajes sino también de exitosos canales de televisión como ESPN o ABC.
¿Cómo hizo el nuevo CEO de Disney para lograr esto?
La clave de este crecimiento no fue querer reemplazar a Walt Disney. Sino simplemente promover a personas con diferentes talentos y ponerlos a trabajar en forma unida para desarrollar productos y experiencias únicas. Un líder de la envergadura de Jobs o Disney no se puede reemplazar. Sólo el trabajo de un equipo compuesto por personas talentosas puede asegurar el progreso.
Ese es el principal desafío de Apple hoy.
Paradójicamente Steve Jobs hoy es accionista del 7,4% de Disney y de esta forma no sólo es miembro de su directorio sino también es el mayor accionista de Disney. Jobs se convirtió en accionista de Disney cuando vendió su empresa Pixar Animation Studios por US$ 7.400 millones a Disney en mayo de 2006. Diez años atrás, en el año 1986, Jobs le había comprando Pixar a George Lucas por solo US$ 10 millones.
Como vemos, Jobs no sólo hizo excelentes negocios para Apple, sino también para sus propias finanzas personales. Los inversores esperan que esta sana costumbre siga presente en esta nueva Apple sin Jobs.
Le deseo una excelente semana de inversiones.
Federico Tesore
Fuente: Inversor Global
CONSULTORIO EMPRENDEDOR SOBRE PLANIFICACIÓN FINANCIERA
Dudas y consultas sobre finanzas – ¿Porque usar los servicios de un planificador Financiero? Tenga hoy su entrevista sin cargo y obtenga una opinion externa al respecto de su nivel de proteccion actual.
ESCRIBINOS A: [email protected] Asunto: PF