Como dice el refrán, «Lo importante no es llegar sino mantenerse», por eso los emprendedores tienen que aprender a tomar decisiones para que su startup sea duradera.
En el mundo de las startups, es fácil caer en el hábito de actuar más rápido que a conciencia. A medida que avanzas por los primeros días de caos, presta atención a las decisiones que tomas sobre tu producto, equipo y operaciones; piensa en cómo esas decisiones te influirán no solo mañana, sino en 5 años.
No hay nada como la satisfacción que viene de identificar una solución inteligente para un problema del mercado. Desafortunadamente, la alegría de ese “¡ajá!” puede llevar a decisiones precipitadas, como gastar cientos de billetes en un dominio web para ver al final que tu idea no es plausible legalmente. O gastar horas y horas en quedadas con inversores para descubrir que otra persona ya tiene mercado con tu misma idea desde hace seis meses.
Aquí tienes 5 formas de asegurarte de que tu startup tendrá presencia duradera en el mercado:
1. Espera tu momento
Comenzar un negocio es parecido a poner tu casa a la venta. Sin importar cómo de impresionante sea tu casa, el tiempo importa, y mejor para ti si puedes aparecer cuando el mercado está candente. Aunque tengas una muy buena idea de negocio, puede no ser el mejor momento para presentársela a tu audiencia, lo cual puede ser duro cuando estás ansioso por empezar. Presta atención a las señales: de qué hablan tus clientes potenciales, cómo otros negocios en la industria lo están haciendo, etcétera. Este tipo de investigación te ayudará a determinar el momento más estratégico para lanzar y hacer crecer tu negocio, y evitar una decisión precipitada.
2. Gasta en calidad
Cuando empiezas, es muy tentador seleccionar a los vendedores que te dan las cuotas más rápidas y baratas. Pero a veces, lo barato sale caro. Piensa en lo que sacrificas por el camino.
Como fundador, me encontré teniendo que elegir entre una manufacturación china o una doméstica. Después de algunos errores, me di cuenta que invertir en materiales de mayor calidad me llevaría a productos mucho mejores y a clientes mucho más satisfechos a largo plazo. Cuando tomes decisiones críticas sobre tus partners y tu producción, considera siempre si la ganga es la mejor opción.
3. Documéntalo todo
Incluso si sois solo dos personas, todo (partnerships, clientes, operaciones…) debe ser documentado de alguna forma. Los nuevos empleados que se incorporen a tu empresa necesitarán saber sus políticas, certificaciones y contratos. Si esa información solo existe en tu cabeza, será complicado para los nuevos entender de qué va y contribuir efectivamente. Puede parecer tedioso, pero ser meticuloso desde el principio te ayudará a asegurarte de que la empresa funciona bien a medida que va creciendo.
4. Conoce a dónde va cada moneda
De forma similar, los fundadores deben priorizar en contabilidad, ya que esto lleva a la credibilidad y viabilidad, o no, de tu empresa. Si no tienes las habilidades para hacerlo tú, contrata a alguien para que lo haga. Si quieres mostrar a un inversor o potencial empleado que tu empresa es viable y que tiende a crecer, tienes que demostrar control sobre tus finanzas y mostrar que mides tu crecimiento financiero.
5. Proporciona un sistema de apoyo fuerte a tus empleados
Los empleados que se sienten atraídos por nuevas empresas tienden a prosperar en el ritmo caótico de la vida y el sentido de la aventura. Sin duda, los empleados también necesitan sentirse valorados y saber que su trabajo es seguro para sentirse motivados y trabajar a diario. Asegúrate de que tu equipo sabe qué se espera de ellos. Crea manuales del empleado con descripciones claras de trabajo para dar a tus empleados sensación de seguridad. Ten meetings de forma regular para pulir planes y proyectos. Muestra a tu equipo que estás involucrado en su crecimiento, especialmente también cuando a alguno le surjan necesidades personales especiales; esto incrementará su fidelidad y retención, lo cual es crucial para la longevidad de tu empresa.
La próxima vez que tengas un impulse de emprendedor, recuerda tomarte tu tiempo para convertir tu idea en un negocio. Es lo mejor para convertir el momento “¡ajá!” en una empresa con tendencia a escalar.