El proceso innovador no puede ser caótico sino que requiere una buena administración para llegar a ser productiva
El pensador estratégico responde estas preguntas: ¿dónde estaba ayer? ¿dónde estoy hoy? ¿dónde quiero estar mañana? ¿cómo haré para conseguirlo? La capacidad de adivinar el porvenir es limitada, pero podemos anticiparnos si gestionamos y explotamos lo que ya sabemos. Para predecir es obligatorio viajar imaginariamente al futuro y luego regresar. El porvenir es el modo que tiene el futuro de intervenir en el presente.
Las predicciones son a menudo inconscientes, incorporadas en base conocimientos y experiencias. Lo que se aprendió aumenta la memoria. Ante lo que no fue registrado antes, habrá que hallar los conocimientos aplicables y aprender a manejarlo para cuando se vuelva a presentar.
Las empresas no tienen memoria
Por eso deben aprender a registrar sus aprendizajes, dejando rastros y huellas. Si bien anticipar el futuro exige conocer el pasado, no hay garantías de repetición. Ante lo nuevo lo obligatorio es registrarlo y aprender. Para lo impredecible hay que preparase.
Lo que facilita la predicción es que las necesidades suelen parecerse en distintas épocas sólo que se satisfacen de distinto modo. Cuando se olvida el pasado, la condena es repetir el error. Las empresas entrenadas para las tormentas, van a vender chalecos salvavidas a los improvisados.
El futuro es predecible porque el lenguaje también lo es. Si te dicen nubla.. ,puedes completar la frase. Debemos capacitarnos para anticiparnos a los cambios y adaptarnos, es una de las formas que asume la inteligencia. Por ejemplo, desarrollar la habilidad de entender las necesidades de los clientes antes que nadie, o la de detectar oportunidades inéditas, genera una ventaja que no puede contrarrestar la competencia.
Las estadísticas permiten anticipar y hay que usarlas antes de que sea tarde. El sistema de gestión del conocimiento debe funcionar como una caja única, que registra la información de la vida empresaria, revisa las acciones con miras a aprender y mejorar su desempeño futuro.
Las empresas realizan tareas repetitivas, por eso saben lo que ocurrirá mañana, y pueden ejecutarlas y evitar errores. La prioridad es que el conocimiento esté disponible como un libro abierto. Para eso deben resguardar su conocimiento crítico, transferirlo, mantenerlo actualizado, identificar el saber que van a necesitar y explicitar la estrategia que utilizarán para adquirirlo.
La proyección del futuro
El pensamiento tradicional opera hacia adelante usando el cálculo, la lógica y la experiencia. Al futuro posible se lo llama futurible. Es una secuencia razonable: si ocurre tal cosa ocurrirá tal otra. El pensamiento estratégico reformulado parte del futuro deseado y retrocede hasta lo que hay que hacer para que se produzca. Es un (futurable), futuro deseable. Cuando la guía es el pasado, la experiencia nos condiciona y nos hace conservadores. Para saber que ocurrirá en el futuro la mejor manera de averiguarlo es inventándolo.
Planear desde el futuro es partir del ideal y retroceder a los pasos precedentes que pueden llevar a materializarlo. Luego hay que observar la situación actual, definir el problema, seleccionar la mejor hipótesis y ejecutarla. En el pensamiento estratégico, para que la razón se combine con la pasión, se deben controlar las acciones con los resultados y cambiar sobre la marcha si no armonizan. El pensamiento estratégico remodelado ve la película desde el final, pero la película todavía no existe, se debe realizar. La Estrategia es el elemento clave de la gestión.
La ley de Murphy
El enemigo número uno del plan es el tiempo, porque cuanto más lejano esté el objetivo más falible será. El pensamiento estratégico busca reducir la incertidumbre. Es el segundo enemigo, pero es al mismo tiempo el que hace necesaria la estrategia.
Como dijimos sin una memoria eficiente, las posibilidades de repetir errores, reinventar lo que ya existe y desaprovechar prácticas exitosas se disparan. Pocas empresas tienen organizado lo aprendido a lo largo de su historia, de gestionarlo y, de forma proactiva, hacérselo llegar a sus colaboradores para que, cada vez que realicen cualquier tarea, tengan a mano el conocimiento institucional.
La incertidumbre fue la norma siempre. Nadie consiguió todavía predecir el futuro. Las herramientas que tenemos son lo que sabemos acerca del pasado y lo que aprendemos del presente. Anticiparse a lo que vendrá y saber utilizar lo que se tiene. El pensamiento estratégico ordena los conocimientos y recursos para achicar diferencia entre el plan y los resultados. La estrategia se mueve en la reflexión y en la acción, pero otorga prioridad a la segunda. Según la ley de Murphy todo lo que puede salir mal va a salir mal, para vencerla hay que ser cuidadoso en los detalles.
El intelectual y el hombre de acción
El intelectual trabaja con palabras e ideas y el hombre de acción con personas y cosas. Ambos deben reunirse para tener éxito o uno mismo ser los dos. El concepto de creacción es la unión de la creatividad, el plan y la acción. La estrategia del líder es lograr que se concreten sus propósitos enfrentando a los competidores que quieren lograr sus mismos objetivos.
La diferencia entre Estratega y Planificador es que este no conoce el resultado ni cuenta con instrumentos para prevenir los desvíos. El estratega debe lograr un pensamiento donde la Acción garantice que la Reflexión se cumpla, y que la reflexión incorpore la lógica de la Acción.
Ninguna Estrategia debe transitar ese camino sin tener claros sus objetivos.
La construcción del ferrocarril que conectó a Boston con el río Hudson, en siglo XIX implicó hacer un túnel de cinco millas. El objetivo se volvió una pesadilla pero no quedó otra que seguir adelante. Si se hubiera conocido antes el grado de dificultad, probablemente el tren no se hubiera materializado, y la costa este no hubiera tenido el desarrollo económico que tuvo. El éxito provino del fracaso.
La economía del comportamiento
Es la que combina la economía con la psicología. La ansiedad -que las políticas económicas combaten- es un motor motivacional, que genera proyectos en mayor medida que un escenario de equilibrio, certidumbre y calma.El límite de la planificación, es lo inesperado, la curiosidad, la duda, la desconfianza en las certezas y la fuerza creativa que genera opciones en lo que parece impermeable al cambio, con imaginación, pensamiento lateral y audacia.
Desde 90 -la década del cerebro- las neurociencias saben qué pasa en nuestro cerebro mientras piensa. Hay dos formas de resolver problemas. Una analítica, dando pequeños pasos y construyendo lentamente la solución, o la discontinua donde aparece de pronto la revelación.
En el «pensamiento lateral» la respuesta llega de golpe y luego parece obvia.
Las respuestas a los grandes desafíos que enfrenta la humanidad (pobreza, escasez, contaminación) -que constituyen el shock del futuro- llegarán de la mano de soluciones «fuera de la caja», por lo cual hay que indagar en este tipo de procesos y fomentarlos desde la educación, las políticas públicas y la dinámica académica. La creatividad siempre llega en forma sorpresiva, cuando nos abrimos y cuestionamos lo establecido.
Dicen que a un pionero visionario se lo distingue porque lleva las flechas en la espalda. Las paradojas como vías sinuosas, son moneda corriente en la economía de las ideas y la innovación. Es necesario poder ver más allá. Una característica del genio es ver opciones en donde nadie ve. «Fuera de la caja» son las respuestas para los desafíos de la humanidad. Como dijo Pasteur el azar sólo favorece a las mentes preparadas.
La juventud paga bien
Nuestro sistema educativo, donde todo está planificado al milímetro, no ayuda a prepararse para una vida que es todo lo opuesto, ya que no se sabe que pasará mañana. El gran desafío para los países emergentes es cómo hacer para enriquecerse antes de llegar a «viejos». El problema es que se educa como en el siglo XIX a estudiantes del siglo XXI, para hacer frente a los desafíos que se presentan.
Los alumnos no aprenden a innovar sin echar por tierra lo ya construido, a adoptar nuevas metodologías, a sentirse protagonistas del cambio, a desafiar el status quo, introduciéndose en otras disciplinas. Es necesario motivarlos sin dejar de cumplir con los objetivos de aprendizaje.
La innovación está sumando un actor en la comunidad educativa: el «artista vinculante» y su tarea es introducir la lúdica y la creatividad en las materias como preparación para el aprendizaje y la convivencia en el aula, y con la comunidad. El rol de este artista es ponerse a disposición para el aprendizaje de contenidos curriculares, facilitar experiencias al servicio del proyecto escolar y del reforzamiento de vínculos entre escuela, espacios de atención primaria de la salud y espacios culturales y deportivos; para permitir abordajes complejos. El arte alienta la curiosidad, ésta impulsa a la creatividad y eso es lo que logra la innovación individual y colectiva, con mayor bienestar emocional y felicidad.
Hay que tener la habilidad de acompañar la diversidad de aprendizajes individuales de los alumnos, hacer buen uso pedagógico de las herramientas tecnológicas, diseñar planificaciones basadas en la indagación y generación de preguntas que inviten al razonamiento, al pensamiento crítico y a la participación, a proponer actividades donde los alumnos traten problemas reales, trabajen en equipo y por proyectos.
A veces se confunde innovación con cambios en los diseños curriculares o con la inclusión de las nuevas tecnologías. La tecnología en sí misma no es una innovación sino una herramienta muy potente que puede ser mal o bien usada, o estructurada del mismo modo que cualquier otra.
La tecnología es necesaria pero no suficiente para transformar sistemas educativos ya que no hay garantía de que su uso mejore el sistema.
Las TICs facilitan la creación de ambientes propicios para el aprendizaje, donde se pueden adaptar estrategias modernas e interactivas, motivadoras y desafiantes. El uso de juegos interactivos, está siendo incorporado gradualmente a las aulas como herramienta pedagógica de alto potencial. Cada niño trae consigo una profunda curiosidad y potencial, y esta curiosidad innata conduce su interés para comprender su mundo y su lugar en él.
Es que para ellos, la escuela debería ser un gran atelier donde bucean, aprenden y reflexionan. La resolución de un problema puede darse a través del arte o la música. La idea es ser conscientes de las habilidades que cada uno tiene. La escuela donde se vive en un ambiente de alegría, agradable y sostenedor – a partir de un trabajo en equipo- crea un clima de búsqueda constante y eso marca un modelo. Es una comunidad de aprendizaje colectivo, de transformación y participación. El alumno es el protagonista de los proyectos y el encargado de llevarlos adelante.
Gusto por la rebeldía
El conocido educador brasilero Paulo Freire, ya sostenía a fines del siglo XX la necesidad de profundizar la autonomía de los alumnos. Lo necesario es que, aun subordinado a la práctica, el educando mantenga vivo el gusto por la rebeldía que, agudizando su curiosidad y estimulando su capacidad de arriesgarse, de aventurarse; de cierta forma lo inmuniza contra el poder aletargante. En este caso es la fuerza creadora del aprender, de la que forman parte la comparación, la repetición, la comprobación, la duda rebelde, la curiosidad no fácilmente satisfecha; es lo que supera al falso enseñar. La ventaja significativa del hombre es haberse tornado capaz de ir más allá de sus condicionantes.
Fin del trabajo de por vida
Emprender e innovar serán fuentes importantes de creación de valor y riqueza ante la disminución del empleo. Muchos emprendedores de hoy, serán los trabajadores autónomos del mañana, vendedores de sí mismos puestos a competir y diferenciarse, obligados a asimilar nuevas competencias para sobrevivir en un contexto cada vez más complicado y cambiante.
Deberán poseer la capacidad de navegar en el universo del conocimiento de las profesiones del futuro. Los buscadores de talento se dirigen a los que poseen una gran variedad de destrezas, gustos e intereses, que pueden formular ideas disímiles que les permitan intervenir mejor sobre el contexto. No hay una sola versión de lo que es el talento y esto expande el espacio de las posibilidades cuando las oportunidades parecen acotarse.
El desarrollo del talento es el pilar emocional, coloca al individuo en el centro. El pilar racional es gestionar por procesos y por resultados.
La mejor estrategia es desarrollar el talento alineando el foco de atención y el comportamiento, para lograr interacciones que generen los resultados esperados – la asignación de importancia-.
Los pilares para tener talento
Conocerse, gestionarse, conocer a los demás, gestionar las relaciones, motivarse y progresar. El más talentoso se contacta con individuos más talentosos que él. Talento es esfuerzo. Para Edison un genio es un 10% de inspiración y un 90% de traspiración. Y también contacto social: dime con quién andas y te diré quién eres. La educación de hoy es la clave del futuro donde lo único permanente es el cambio. Educar es la industria pesada de cualquier Nación, porque es la que fabrica los ciudadanos innovadores del futuro.
Excelente artículo, muy enriquecedor para el aprendizaje y la reflexión