Yo estudiaba tanto los éxitos como los fracasos. Como instructor empresarial para el éxito, se me presentaban ambos a diario. Estudié primero los fracasos porque me intrigaba que una persona con todas las herramientas necesarias no tuviera asegurado el triunfo. Había muchos de estos casos, y siendo que el 93% de las personas fracasan tenía mucho material para trabajar. Pero no me atormentaba la necesidad de que esto encajara en una estructura de pensamiento de aceptación general. Había un porqué para todo lo que le pasaba a esa gente; sólo tenía que descubrirlo. Era un simple análisis de causa y efecto. También estudié los éxitos, y descubrí algunos datos valiosos desde esa perspectiva, pero con frecuencia no hacían más que confirmar mis descubrimientos relacionados con aquéllos que fracasaban. Éste es el clásico método científico para llegar a la verdad. Yo sólo actué como periodista. El libro Padre rico, padre pobre hizo lo mismo y reveló algunas discrepancias en el mundo financiero, la más notable de las cuales es que una casa no es un activo sino un pasivo y, por lo tanto, no es una inversión.
Vincent Roazzi. Norteamericano. Autor del libro "La Espiritualidad del Éxito". En 1999, Vincent Roazzi recibió el premio ‘Líder del Año para Pequeñas Empresas’, otorgado anualmente por la Asociación Nacional de Líderes de Negocios, en reconocimiento a su ‘servicio de apoyo e inspiración para los pequeños negocios estadounidenses’.