La pandemia del Covid-19 impulsó abruptamente el teletrabajo. Claro que la mayoría de las empresas y empleados no estaban ni remotamente preparados. Compartimos la experiencia de Tomás Santoro que lleva un lustro teletrabajando.
La vida profesional tira mucho más que la vida personal, y en mi caso, haciendo teletrabajo, he mezclado las 2 mucho y he acabado haciendo las 2 MAL… Hasta que he descubierto cómo hacer teletrabajo BIEN…
Así que este post, por si te sirve, es para contarte mis 7 principales aprendizajes. En la gran mayoría coincido con mis compas de trabajo, en especial Alfredo (CEO), Mae (Marketing), Fer (ventas) y Loren (programación) que me han ayudado a hacer este post.
¡Empiezo!
Un cuarto aislado
Una casa, en el fondo son «4 paredes» por lo que, en mi caso, trabajar desde el salón hizo que mi casa entera se convirtiera en una oficina. Además mi mujer también teletrabaja, y empezó a hacer lo mismo, así que al poco tiempo en casa ya no se podía jugar, ni hablar, porque siempre podías molestar al otro. Y en la casa desapareció la familia. 🙁
Aislamos un cuarto para trabajar y, ese mismo día, la casa volvió a ser el hogar de la familia 🙂
Nota: Antes del aislamiento por coronavirus, muchos días yo iba a un coworking que tengo al lado de mi casa, pero mi mujer igualmente trabaja esos días desde el cuarto para así que la casa siga siendo para la familia.
Ducharme cuando suena el despertador
El primer error que hice cuando empecé a teletrabajar fue aprovechar para dormir un poquito más, para hacer cosas de la casa, para ver la tele, etc… Pero esas interrupciones mataron mi productividad.
Lo de ducharme según suena el despertador, fue el disparador que encontré para generarme el hábito de volver a tener los mismos rituales que tenía en la oficina.
Así que ahora:
Según oigo el despertador ->ME DUCHO -> me visto y desayuno -> entro al cuarto a trabajar -> Al terminar la jornada salgo del cuarto y dejo la notebook dentro. Es decir, sólo utilizo la utilizo dentro del cuarto.
Teléfono dentro del cuarto
Desde el salón de la casa empecé a hablar mucho más por teléfono que en la oficina.
Así que mi mujer y yo nos obligamos a hablar por teléfono dentro del cuarto. Las conversaciones inmediatamente empezaron a ser menos, de menor duración y más profesionales.
Refrigerador
No vas a poder contenerte jaja. Yo engordé de 80 kilos a casi 100 en los primeros 6 meses jajaj Ahora estoy en 78.
El truco que encontré para no engordar es NO PASAR HAMBRE. Es decir, COMER MUCHO pero DE LO QUE NO ENGORDA.
Descubrí que cuando me vienen las ganas de comer papas fritas, es ansiedad, así que tomo una fruta (o tortitas de maíz) y se me va la ansiedad y las ganas de comer papas fritas.
Limpiar
Haciendo teletrabajo la casa se empezó a ensuciar más y mucho más rápido. Al inicio, mi mujer y yo, nos propusimos limpiar siempre después de los desayunos/comidas/cenas pero no funcionó. La casa se volvía a ensuciar enseguida y la vida familiar se resentía mucho.
Ahora, nuestra regla es que si vemos algo sucio lo limpiamos en ese mismo momento. Sorprendentemente así incluso dedicamos menos tiempo a limpiar 🙂
Pedir perdón
La convivencia familiar y el teletrabajo es muy complicada.
Sabiendo por adelantado que van a surgir roces, la gran mayoría de las veces mi mujer y yo nos pedimos perdón al instante.
Positividad
Y como la fastidiamos más que antes, también nos culpábamos más que antes y se empezaba a ver todo un poco más negro. Pero como digo, con teletrabajo, es normal que haya más roces.
Así que empezamos a forzar un poquito más la positividad, para así generarnos el hábito y que en nuestra casa haya energía positiva 🙂
¿Más aprendizajes de teletrabajar?
El resto de aprendizajes son los mismos que en la oficina:
- Durante el trabajo: Hacer dailys, retrospectivas, trabajar con las herramientas adecuadas, intentar mirar lo mínimo whatsapp y redes sociales.
- Después del trabajo: Hacer deporte (ahora hago yoga en casa), quedar/llamar a amigos y familia (ahora por videollamadas jeje), no trabajar el fin de semana….
- Espero que te haya servido el post. Y de corazón ¡mucho ánimo y fuerza con la cuarentena.