¿Tienes una buena idea y estás convencido que podrías llegar a ser un buen negocio? Sigue estos 4 pasos para ayudarte a desarrollarla en la dirección correcta.
Está claro que no hay grandes negocios sin una idea. Sin embargo, sin un desarrollo adecuado, cualquier idea seguirá siendo solo una idea y nunca se convertirá en un negocio exitoso. Todos queremos poner en práctica nuestras ideas sin importar nada cuando estamos convencidos de que nos llevaran a nuestras metas.
Pero ¿cuáles son estas metas? Cuando emprendemos, queremos alcanzar nuestros sueños: realizarnos como personas, ser independientes, ser millonarios… Si quieres conocer más sobre cómo llegar a alcanzar estos sueños pincha aquí.
Si crees que acabas de tropezar con una idea que podría conducir al lanzamiento de un negocio, aquí hay algunos consejos para ayudarte a desarrollarla en la dirección correcta.
En primer lugar, debes traducir la idea a la realidad del mercado, aclarar su solución, definir sus beneficios únicos e identificar a su público objetivo.
Define tu audiencia
Incluso si tu idea es realmente grandiosa, podría no corresponder a las necesidades del mercado. Es por eso que lo primero que debes hacer es definir tu público objetivo: quienes serán las personas que comprarán y usarán tu producto. Una vez que definas las características de este grupo específico, es hora de escuchar y observar.
Si tu producto tiene como objetivo resolver un problema particular que enfrenta la industria, asegúrate de tener este problema en un mapa: sigue las fuentes de información de la autoridad específica de la industria, mantente al día con las últimas tendencias en el sector, consulta blogs publicados por influencers clave de la industria y escucha las conversaciones que suceden en su nicho.
Investiga y analiza tu idea
Antes de realizar cualquier jugada, debes examinar tu idea desde varias perspectivas. Primero, piensa en tus posibles clientes. Considera no solo a las personas que comprarán tu producto o a quienes interactuarán directamente con él, sino también a las personas influyentes que podrían desempeñar un papel en la forma en que tu producto se encuentra en el mercado.
Tómate un momento para examinar tu idea de una empresa. ¿Cuál será la personalidad? ¿Cuáles serán los mensajes clave? ¿Qué tipo de promesas les harás a tus clientes? ¿Cómo se beneficiará tu cliente con tu producto? Define lo que quieres que sea conocido.
La tercera capa es la competencia: incluso si esperas que tu idea sea realmente única, siempre hay alternativas. Echa un vistazo a la industria a la que apuntas y define quiénes son tus competidores primarios y secundarios, con qué frecuencia competirás con ellos directamente y qué tipo de mensajes crearás cuando compitas con cada uno de estos grupos.
Realiza un análisis FODA
Ahora es el momento de enfocarte en tu producto. Un análisis FODA es básicamente un análisis de las fortalezas (de tu servicio, producto o industria), las debilidades de tu producto o servicio (precio alto, diseño defectuoso), las oportunidades involucradas en tu proyecto y, finalmente, las amenazas potenciales para realizar tu idea (como por ejemplo, un mal entorno económico).
El beneficio principal de este tipo de análisis es que te permite ver los aspectos internos y externos de tu producto que pueden ser útiles o dañinos para su operación. En consecuencia, podrás detectar cualquier agujero y aplicarle un parche antes de lanzar el producto al mercado.
Crea un prototipo y pruébalo
Una vez que tengas una idea clara sobre tu producto, es hora de crear un prototipo que luego pueda distribuirse a los clientes potenciales para que lo prueben. Puedes hacerlo creando una encuesta de mercado, solicitando comentarios de figuras clave de la industria o creando sesiones de grupos focales; esto significa invitar a personas provenientes de diversos grupos demográficos para hablar sobre tu producto y orientarlo en la dirección correcta.
Todo lo anterior te dará una idea de la mente de tus posibles clientes. Sabrás cuáles son sus primeras impresiones del producto, por ejemplo, si el empaque y el marketing funcionan. Podrás recopilar comentarios en tiempo real sobre las fortalezas y debilidades de tu producto. Finalmente, utilizarás todo este conocimiento para pulir tu estrategia de marketing y tu producto antes del gran lanzamiento.
Convertir tu idea en un negocio real es un proceso largo y difícil, pero si lo haces, mejorarás significativamente las posibilidades de que tu producto se convierta en el próximo gran negocio de la industria.