Si eres de esas personas que trata de evitar el trabajo en equipo porque crees que no es lo tuyo, seguro ya te habrás dado cuenta que aunque no lo desees, la gran mayoría del tiempo deberás organizarte con más personas para echar a andar un proyecto.
De hecho, con la creciente competencia, en la actualidad la mayoría de los individuos y empresas se ven obligados a aumentar la productividad mediante la promoción del trabajo en equipo.
Así que si deseas ser competitivo, tu mejor apuesta será dejar de huir y, mejor, dedicarte a buscar maneras de hacer que eso que “no es lo tuyo” se convierta en tu mejor herramienta. ¿Te preguntas cómo?, a continuación te daré algunos consejos para lograrlo.
Sé un líder
En todo grupo es primordial que exista un líder, una persona que sea el ejemplo de buen desempeño y ponga las prioridades del grupo por encima de la suyas.
El líder será la piedra angular del equipo porque motivará a todos.
No necesariamente debe ser quien tiene todas las respuestas, sino la persona que sepa dar lo mejor de sí y sacar lo mejor del resto.
Cuando estés trabajando en equipo debes adoptar una actitud positiva, motivar y saber reconocer a todos tus compañeros de trabajo.
Para un funcionamiento óptimo, el organizador del trabajo debe ser un líder, sin embargo eso no significa que el resto de los integrantes no puedan serlo.
Mientras más líderes tenga un equipo de trabajo mejor.
Fomenta la comunicación
La comunicación permite establecer una conexión entre dos o más personas alrededor de un mensaje.
Una buena comunicación es la base para el éxito de cualquier equipo de trabajo, ya que a través de ella los integrantes pueden compartir información e ideas para solucionar problemas abordándolos desde diversas perspectivas.
Una manera efectiva de fomentar la comunicación es proporcionarle a cada integrante las herramientas que requiere para comunicarse con el resto y el tiempo para hacerlo.
Ya sea en una junta o en una conversación vía chat, todos los integrantes deben tener un momento designado para expresarse y el resto debe escuchar con respeto y sin interrumpir.
Aprovecha la diversidad
Los equipos homogéneos operan eficientemente porque rara vez están en desacuerdo, sin embargo, después de un tiempo su trabajo carecerá de creatividad y será poco innovador.
Al realizar las actividades procura que las personas con diversos puntos de vista e intereses expresen sus ideas para generar un trabajo de mayor calidad.
Establece reglas claras y cúmplelas
Al principio de todo trabajo en equipo es necesario que todos los integrantes tengan claras cuáles serán las reglas a las que deben apegarse y qué se espera y no de ellos.
De esta manera se evitarán confusiones respecto a lo que está permitido, lo que no se tolera y los alcances y límites en las responsabilidades de cada persona.
En el caso de que seas el organizador del equipo debes asegurarte de que todos entiendan las reglas, si no eres el organizador pero crees que algunos puntos no están claros o inconclusos debes preguntar tantas veces como sea necesario.
Evita tomar decisiones de forma prematura
Actuar con prudencia al tomar decisiones significa que te otorgas tiempo suficiente para juzgar una realidad y tomar decisiones respecto a ella de forma óptima.
La reflexión de los actos que se realizan permite dimensionar los resultados y seleccionar el camino que reporte el mayor beneficio o, en su defecto, aquel que perjudique en menor medida.
Debes fomentar esta forma de tomar de decisiones tanto en las acciones individuales como las del equipo, pues tomarte un tiempo para analizar el siguiente paso es una de las maneras más efectivas para asegurar el éxito.
Realiza evaluaciones periódicas
Cuando se está trabajando en equipo, los resultados, buenos o malos, se diluyen entre todos los miembros y aunque es importante que permanezca la visión de la colectividad y se realicen evaluaciones grupales.
También es importante que cada uno de los individuos involucrados evalué sus acciones como individuos para poder determinar qué es lo que está o no ayudando al trabajo en equipo.
No es posible mejorar sin detenerse a hacer un análisis del desempeño, todo grupo e integrante debe estar dispuesto a autoevaluarse y escuchar al resto sobre los aspectos que puede mejorar a futuro, esto les permitirá obtener mejores resultados.
Recuerda, la habilidad para trabajar en equipo es muy valorada, tanto en el ámbito laboral como en la vida cotidiana.
En más de una situación, trabajar con más personas para lograr un objetivo en común es la clave para el éxito.
Selene Santes
Muy bueno. Como sugerencia agregaría un punto:
– define metas altas. Cada uno de nosotros se motiva cuando el desafío es bueno. Eso además genera equipo al ser evidente que la meta es tan alta que sólo colaborando se puede alcanzar.
Saludos