Desde The Guardian, han entrevistado a dos jóvenes empresarios que fundaron sus negocios antes de los 30 años y que nos dan consejos de cómo convertirse en un CEO de los pies a la cabeza y cómo mantenerse en lo más alto de una compañía de éxito.
Saber dónde se mueve
Hay que saber el sitio donde uno trabaja para saber si el trabajo que está desarrollando hará que lleguemos a lo más alto, sin importar la edad que tengamos. Si somos capaces de tener un buen ritmo de trabajo y seguir los objetivos y los valores que nos hayamos marcado, conseguiremos que el éxito llame a nuestra puerta. Danny Waters, de Enterprise Finance dice: “Nunca pierda de vista quién es. Es muy importante que disfrute con lo que hace porque, si lo hace, logrará el éxito en cualquier cosa en la que se involucre«.
Asumir riesgos
Cuando se es joven, es más fácil arriesgarse con todo: no tenemos familia a nuestro cargo, ni una hipoteca ni nada parecido, por lo que todo lo que podamos perder es nuestro, mientras que las personas con más edad sí pueden tenerlos y tengan que pensar más en lo que hacen, para que nada de esto se vea perjudicado. Jonathan Samuels, de Dragonfly Property Finance dice que “las consecuencias de cometer un error son mucho menores cuando se es joven y podemos permitirnos una segunda oportunidad.” Ya saben, a mayores riesgos, mayores recompensas. Aprovéchese de eso.
El respeto se gana con trabajo
Ya sabemos que los jóvenes tienen que esforzarse más en conseguir el respeto de los demás. La edad conlleva conocimientos y responsabilidad, y también respeto, pero si usted es un buen trabajador, conoce el terreno y sabe cómo es el producto o servicio que quiere vender u ofrecer, los demás le respetarán porque saben que usted es una persona seria y responsable.
fuente: Marketing Directo
Desde The Guardian, han entrevistado a dos jóvenes empresarios que fundaron sus negocios antes de los 30 años y que nos dan consejos de cómo convertirse en un CEO de los pies a la cabeza y cómo mantenerse en lo más alto de una compañía de éxito.
Saber dónde se mueve
Hay que saber el sitio donde uno trabaja para saber si el trabajo que está desarrollando hará que lleguemos a lo más alto, sin importar la edad que tengamos. Si somos capaces de tener un buen ritmo de trabajo y seguir los objetivos y los valores que nos hayamos marcado, conseguiremos que el éxito llame a nuestra puerta. Danny Waters, de Enterprise Finance dice: “Nunca pierda de vista quién es. Es muy importante que disfrute con lo que hace porque, si lo hace, logrará el éxito en cualquier cosa en la que se involucre«.
Asumir riesgos
Cuando se es joven, es más fácil arriesgarse con todo: no tenemos familia a nuestro cargo, ni una hipoteca ni nada parecido, por lo que todo lo que podamos perder es nuestro, mientras que las personas con más edad sí pueden tenerlos y tengan que pensar más en lo que hacen, para que nada de esto se vea perjudicado. Jonathan Samuels, de Dragonfly Property Finance dice que “las consecuencias de cometer un error son mucho menores cuando se es joven y podemos permitirnos una segunda oportunidad.” Ya saben, a mayores riesgos, mayores recompensas. Aprovéchese de eso.
El respeto se gana con trabajo
Ya sabemos que los jóvenes tienen que esforzarse más en conseguir el respeto de los demás. La edad conlleva conocimientos y responsabilidad, y también respeto, pero si usted es un buen trabajador, conoce el terreno y sabe cómo es el producto o servicio que quiere vender u ofrecer, los demás le respetarán porque saben que usted es una persona seria y responsable.
fuente: Marketing Directo