Pasión, personas, persistencia. También se le puede decir PPP. Las tres palabras aparecen en cada frase de Facundo Garretón, fundador y CEO de InvertirOnline.com (IOL) y un curioso del universo de las inversiones. Porque si bien la mayoría de sus incursiones fueron en la línea digital (desde Tucumán BBS, proveedor de Internet; hasta WeHostels, una de las apps para viajeros que recibió fondos por US$ 2 millones) también apostó en otros emprendimientos, como GoodPeople, negocio dedicado a los deportes extremos.
Cursaba un posgrado en la Universidad de California cuando Garretón leyó el libro “The Lexus and the Olive Tree”, de Thomas Friedman. “Planteaba que el mundo cambiaba por la democratización de la tecnología, la democratización de la información y la democratización de las finanzas. Y cómo Wall Street había ido hacia el mainstream y cualquiera podía comprar y vender acciones, cuando hace 20 años solo los especialistas invertían en la Bolsa.
Eso me despertó el bichito. Vi una oportunidad y así surgió la idea”, cuenta Garretón, en diálogo con Apertura.com, sobre el nacimiento de lo que tiempo después fue InvertirOnline.com, que durante 2012 operó US$ 40 mil millones.
¿Qué cuestiones mira en una empresa antes de invertir?
Las personas son lo primero; su pasión (más allá de los sentimientos; es decir, las características técnicas) y la persistencia. Son esas personas que más allá de muchos “no”, van a seguir adelante. Eso para mí es importante.
¿Cómo sabe que el producto o servicio que brinda puede tener buena repercusión en el mercado?
No tengo idea. Me enfoco en las personas. Hay inversiones que hice en personas que cambiaron el modelo. Lo importante son las personas que pueden cambiar el proyecto para adaptarse. Entré a una empresa de un chico que originalmente era una guía para viajeros (una app).
A mí el modelo no me gustaba, pero sí las personas que lo ejecutaban. No veía dónde iban a generar ingresos. Después el emprendedor lo fue cambiando y virando al hospedaje compartido entre mochileros. Pero tampoco me cerraba. Y después se convirtió para enfocarse en los hostels y ahora es WeHostels, una de las más apps más bajadas.
¿Qué errores cometió y ya tiene en cuenta a la hora de apostar por una empresa?
Aprendí los primeros errores a los golpes y están vinculados al equipo con el que manejaba la empresa. Por ejemplo, la empresa proveedora de Internet la manejaba con algunos amigos. Yo soy ingeniero informático y manejaba la administración.
Y mi socio era administrador de empresas, y manejaba los sistemas. Todo al revés. Un día se auditó la empresa y saltaron cosas poco prolijas porque teníamos 20 años y no teníamos experiencia. Ahora, con IOL, contratamos a los mejores consultores y al mejor equipo.
¿En qué medida tiene en cuenta el capital humano?
El capital humano es lo más importante. Si contrato personas que van a depender de mí, tienen que ser más inteligentes que yo. Si no me deslumbran con su inteligencia… Lo más importante son las personas.
A la hora de invertir, ¿Destina un monto grande en un solo emprendimiento o pequeñas cantidades en muchos proyectos?
Yo como inversor ángel apuesto a distintos emprendimientos. Lo óptimo es diversificar en la mayor cantidad de proyectos; más en un inversor ángel.
En ese punto de vista es mejor tener muchos proyectos de vista teniendo en cuenta el fracaso de los emprendedores. No hay recursos infinitos, por eso uno tiene que elegir bien. Yo decido invertir en personas, en emprendedores con capacidad de innovación.
Pero ojo, que visión sin ejecución es alucinación; porque muchos emprendedores quieren hacer muchas cosas en paralelo, y la falta de enfoque hace que no puedan ejecutar como deban ejecutar. Pasión, Personas y Persistencia, son las tres P de mis inversiones. Un equipo de personas, con pasión y persistencia para durar en una maratón a largo plazo.
¿Cuándo es buen momento para salir del proyecto?
No me gusta entrar a un proyecto cuando se volvió super cool ni cuando se vino para abajo. A veces entré en la cresta de la ola y a veces cuando no había ola. Trato de darle valor agregado al emprendedor y voy a salir en el momento en que deje de darle valor agregado al emprendedor y cuando él ya está para una nueva etapa. Pero sí tiene mayor tracción, acompaño. De las ocho empresas que invertí como ángel, salí de dos.
¿Qué regla de oro tiene siempre a mano?
Pasión, personas y persistencia.
Autor: Joaquín Garau
Fuente: Apertura.com