La atleta se retiró con una medalla de oro en el Mundial de Atletismo tras marcar un hito en el salto con pértiga. ¿Cómo lo logró? Aprendiendo de su fracaso.
Todo mundo la conoce, su gran atractivo físico y su inigualable capacidad atlética marcan a esta campeona en su exitosa carrera. Con doce años en el mundo atlético, esta mujer cuenta con una de las carreras deportivas más completas en el mundo del deporte: dos campeonatos olímpicos, siete títulos mundiales y 28 récords mundiales, todo para engalanar la modalidad del salto con pértiga.
Ella, la única que ha logrado estar por arriba de la barrera de los cinco metros, se retiró de las pistas con una medalla de oro en el Mundial de Atletismo en Moscú, enseñándonos que la constancia y el esfuerzo son claves para lograr el éxito y para hacer realidad los propios sueños. ¿Cómo logró marcar una diferencia? Aquí su historia y sus claves de éxito.
No siempre se termina en el mismo sitio donde se empieza
A muy temprana edad, Yelena Isinbayeva tuvo que experimentar el fracaso. Con sólo 14 años de edad tomó una de las decisiones que marcarían su vida para siempre. “Mi sueño era ser una gimnasta olímpica, sin embargo, fue muy difícil para mí. Mi altura y mi físico no lo permitieron, tuve que comprender que la gimnasia se había acabado para mí (…) No siempre se termina en el mismo sitio donde se empieza”.
Pero eso no la detuvo. Le gustaba el deporte y su familia fue una parte fundamental en su desarrollo. A sus 31 años de edad, esta atleta de origen ruso asegura que una de las claves que la han llevado al éxito es su familia. “Cuando logro una nueva marca sé que mi familia y mis amigos me siguen por televisión y les supone una alegría. Eso me llena”.
De acuerdo con las declaraciones que le brindó a un periódico cubano, aseguró que sus padres han sido un gran ejemplo de perseverancia y esfuerzo, pues sin ellas, no hubiera llegado hasta donde se encuentra.
Orgullosa de ser mujer
¿El sexo débil? Para nada. Isinbayeva ha llegado hasta donde nadie hubiera pensado. Durante el Mundial de Atletismo en 2012, celebrado en Estocolmo, la atleta rompió su propio récord –por 28° ocasión- al arrojar en la pizarra 5.01 metros en su salto, un centímetro más que su marca realizada en el año anterior.
Con el cielo como límite, esta mujer se ha encargado de divulgar lo orgullosa que se siente de ser mujer. “Creo que la mujeres seguirán jugando papeles destacados en el deporte, no sólo por sus actuaciones, sino también a favor de su desarrollo”.
Su indiscutible belleza la ha llevado a ser reconocida no sólo en el mundo deportivo, sino también en las pasarelas. Isinbayeva se retira no sólo con el oro en salto con garrocha, sino como una de las deportistas más guapas de todos los tiempos y de las más carismáticas.
A continuación, algunas reglas que han llevado a esta mujer a la cima del éxito.
No existen los límites. Con la famosa frase “Sólo el cielo es mi límite”, esta atleta asegura que cada día es un escenario perfecto para retarse a uno mismo y traspasar nuestras propias fronteras, tal como lo ha hecho ella 28 veces.
El que mucho habla, poco hace. Para este personaje, no existe mayor garantía que los hechos, “a mí no me gusta hablar; me gusta hacer”, comentó la atleta durante uno de los mundiales donde fue campeona. De esta forma, asegura que de nada sirve decir las ideas cuando estas se quedan en el aire, lo mejor es prepararse para demostrar con hechos lo que se busca.
Se necesita competencia. Para muchos profesionistas la competencia es una de las peores pesadillas, para Isinbayeva la competencia es una inspiración. “Si tuviese rivales más fuertes, seguramente sería mejor”.
Hay que ver las cosas de manera objetiva. “Nunca me relaciono con mis contrincantes, no creo en la amistad entre dos personas fuertes que pelean por un lugar mejor”. Esta también es una frase que se aplica en el mundo de los negocios: “si quieres triunfar, deja la amistad a un lado”.
El sacrificio como bandera. En numerosas ocasiones, la atleta aseguró que su vida diaria estaba llena de limitantes y sacrificios, sin embargo, también aseguró que era necesario para alcanzar lo que ella esperaba. “Me sacrifico mucho y no disfruto la vida como una mujer normal. Pero eso sí, nunca me quejo, simplemente estoy muy contenta con lo que hago (…) seguro que me divertiré cuando me retire”.
Amar lo que uno hace. Desde muy joven demostró su pasión por el deporte, ahora al anunciar su retiro para poder ser mamá, esta atleta ha comentado que nunca renunciará a lo que más ama, que una de las claves más importantes para alcanzar las metas personales, es hacer con amor y pasión lo que uno busca realizar en la vida.
Así, Yelena Isinbayeva, la atleta más carismática del último decenio, puso un remate de oro a su gloriosa carrera deportiva con su tercer título mundial de pértiga. Quiso regalar a su público un nuevo récord mundial, el que habría sido el número 29 de su carrera, pero la atleta de Volgogrado no pudo con los 5,07 cuando, sola en competición y tras haber celebrado su triunfo con saltos de alegría, intentó, sin éxito, superar los 5,07 metros.
Pero se fue como una reina, ante el aplauso de 40.000 espectadores en el estadio Luzhnikí y las miradas del mundo que aplauden su retiro para empezar una nueva faceta en su vida: la maternidad.
fuente: Alto Nivel
«Nunca me relaciono con mis contrincantes, no creo en la amistad entre dos personas fuertes que pelean por un lugar mejor»
Es la mejor frase que he leído!