Este reality que trata sobre el dueño de una pastelería enseña a los líderes de negocios a inspirar pasión y excelencia a su equipo.
Últimamente me he vuelto fanática del reality show Cake Boss, que transmite Discovery Home & Health. El programa gira en torno a Buddy Valastro, un repostero de ascendencia italiana, que es dueño de la pastelería Carlo’s, la cual se localiza en Nueva York desde 1910. Lo destacable de este negocio -y la razón por la que se creó un programa a partir de él- es porque hacen las masas más sorprendentes de la ciudad (¡y probablemente del mundo!); desde un pequeño circo con animales y malabaristas que atraviesan aros de fuego, hasta reproducciones de castillos y estaciones de trenes.
Pero además de la originalidad de sus creaciones, el show se centra en los obstáculos del día a día de dirigir un negocio. Buddy, de carácter fuerte y personalidad un tanto arrogante, tiene que administrar a su personal e inspirarlos a ir mucho más allá de lo imaginado; con la particularidad de que muchos de ellos son miembros de su familia.
Viendo Cake Boss se me ocurrió que independientemente del giro de negocio al que se dedique, todo emprendedor puede aprender de las vivencias de Buddy. Aquí algunas de sus enseñanzas:
1 Debes estar dispuesto a “mancharte” las manos. Buddy es el alma del negocio: piensa los diseños y define cómo ejecutarlos, pero también es un gran repostero. Como dueño de un negocio, especialmente en el comienzo, tienes que hacer parte de la talacha que permite generar resultados. Aunque debes aprender a delegar para su crecimiento, un jefe que conoce los procesos y entiende cómo funciona el negocio es mucho más eficiente y consigue el respeto de su equipo.
2. Inspira con tu pasión. Si tú mismo no estás emocionado por tu negocio, ¿por qué esperarías que los demás lo estén? Buddy irradia todo el tiempo pasión por su trabajo y constantemente emociona a su equipo de la misma manera. Con cada nueva orden hay un nuevo reto, y tanto él como su equipo se sienten motivados a hacer su mejor esfuerzo con todo cliente.
3. Establece valores, misión y visión ¡y comunícalos! Ser la segunda o tercera generación de una empresa no es nada fácil; pero Buddy demuestra que ésta puede ser incluso mejor que la original. Aunque la pastelería ha tenido numerosos cambios en sus más de 100 años de historia, Buddy siempre recuerda sus inicios, su historia y los valores que su abuelo y padre imprimieron en ella. Todos en Carlo’s no sólo conocen estos aspectos de la cultura empresarial, sino que la viven todos los días.
4. Reconoce el buen trabajo… y llama la atención cuando es necesario. Buddy es un jefe que se caracteriza por su honestidad: nunca le diría a un empleado “buen trabajo” a menos de que sea completamente cierto. Asimismo, su carácter hace que cuando alguien cometa un error, inmediatamente lo note y “obligue” a la persona a corregirlo. Tener esta actitud te ayudará no sólo a motivar a tu personal a la excelencia, sino a disminuir las equivocaciones que inician pequeño y con el tiempo se convierten en avalanchas de nieve.
5. Escucha a tu gente e impúlsala a ser creativa. Un buen líder escucha activamente y no sólo para conectarse de una manera más profunda con su equipo, sino también para detectar problemas, grandes ideas y áreas de oportunidad. Todo el personal de Carlo’s está bien capacitado y sabe lo que tiene que hacer; y Buddy comprende que del talento de cada repostero puede llevar a grandes innovaciones que dirijan a su compañía al éxito.
6. Entiende tu negocio mejor que nadie. Aunque tengas a muchas personas talentosas, con conocimientos específicos y áreas de expertise, como dueño estás obligado a estar al tanto de todo lo que ocurre en tu empresa. Recuerda que, finalmente, tu trabajo es dirigir los esfuerzos de todos para conseguir resultados, y si no conoces el camino no puedes guiar a los demás. Buddy sabe cocinar, hornear y decorar, y aunque no es el mejor en todo, al menos entiende bien qué pasos se deben seguir.
7. Siéntete orgulloso de tu trabajo. Si tú y tu equipo hicieron un gran trabajo, ¡celébralo con ellos! Nada produce mayor lealtad en una empresa que lograr que se pongan la camiseta y enorgullecerse de crear un buen producto o servicio. Cuando terminan un pastel, Buddy reúne a todo el equipo y los felicita por su labor; mientras tanto todos toman fotografías y sonríen, sabiendo que el esfuerzo valió la pena.
8. Diviértete. A pesar de que dirigir un negocio y administrar personal es bastante estresante y complejo, nunca dejes de disfrutar lo que haces; es clave que todos se diviertan haciendo sus tareas. Muchas veces, Buddy convierte las órdenes en juegos que si bien no quitan la seriedad del trabajo, sí permite que todos gocen los procesos y se sientan entusiasmados por ver el momento antes de entregar un pastel.
fuente: Soy Entrepreneur