Aunque las nóminas y los contratos publicitarios permiten a las grandes estrellas vivir por encima de las posibilidades de cualquier mortal después de retirarse, la limitada vida profesional de un futbolista obliga a los deportistas a asegurar su futuro.
Existen muchos caminos diferentes a la hora de seguir generando ingresos después de colgar las botas, pero una de las tendencias más extendidas es la creación de negocios entre los que abundan las empresas del sector de la hostelería y de la noche, con las discotecas como principal reclamo a la hora de invertir.
Las empresas de gestión inmobiliaria siguen dominando las apuestas de los futbolistas, pero los tiempos están cambiado. Las nuevas tecnologías han impregnado el imaginario colectivo de las nuevas generaciones, y los jugadores no han sido ajenos a la explosión de la nueva ola emprendedora de los últimos años, con el nacimiento de miles de startups y nuevos negocios de internet.
Precisamente en este tipo de empresas tecnológicas se han fijado las estrellas, decidiendo apostar en muchos casos por incipientes modelos de negocio, con la esperanza de generar ingresos más allá de sus propias carreras deportivas, aunque también con el ánimo de divertirse más allá del terreno de juego. Alejados de los sectores tradicionales, los futbolistas más jóvenes se están convirtiendo en auténticos business angels.
Los madridistas, muy activos:
El capitán portugués del Real Madrid no sólo posee una flamante línea de ropa, CR7, además de un club nocturno en el Algarve, la discoteca Seven. La estrella madridista también ha invertido parte de su fortuna en la startup portuguesa Mobitto, cuyo principal producto es una aplicación de mismo nombre, centrada en el sector de la fidelidad móvil. Además, Cristiano Ronaldo se ha convertido en embajador de la marca para apoyar la estrategia de marketing de la firma.
“Creo totalmente en el potencial del mercado de telefonía móvil, y confío en que Mobitto tenga un gran impacto en las interacciones entre las marcas y los clientes en el futuro. Sin duda marcará las diferencias”, afirmó Cristiano Ronaldo en 2012, transformado en un auténtico business angel.
No es el único jugador del Real Madrid que se ha interesado por los nuevos negocios de internet. También Álvaro Arbeloa -su hermano Yago es también un activo inversor- invirtió en un negocio de este tipo, Club Santa Mónica, un proyecto de venta de viajes privados a través de la red. La startup inició su andadura en 2010, con el principal auspicio financiero del fondo de inversión Cabiedes & Parters. A pesar de contar con 600.000 usuarios registrados, el outlet online entró en concurso de acreedores a finales de 2012.
Redes Sociales y Videojuegos:
Uno de los ejemplos más llamativos es el del jugador del Chelsea Juan Mata, que en su caso ha apostado por el mercado de las redes sociales a través de Perso.na, una plataforma al estilo Flipboard que integra Facebook, Instagram, Youtube, Tumblr y Vimeo para permitir a los usuarios mostrar al mundo cuáles son sus gustos en tiempo real.
Por su parte, el centrar del FC Barcelona, Gerard Piqué, se ha decantado por un sector completamente diferente, el de los videojuegos online. El internacional español es socio fundador, desde 2011, de la empresa con sede en Barcelona Kerad Games, cuyo objeto social es el “diseño, producción, ejecución y comercialización de juegos online para todo tipo de redes y dispositivos”.
Muy involucrado en el proyecto empresarial, el pasado mes de marzo la firma lanzó su primer producto, Golden Manager, un videojuego basado en el concepto de gestión del veterano PC Fútbol, en este caso desarrollado en HTML5 para jugar en web.
Sin embargo, la oferta del mercado a la hora de invertir es ilimitada, y aunque se visulmbra un cambio en la tendencia, existen sectores mucho más jugosos a la hora de rentabilizar el patrimonio obtenido en los estadios, hasta tal punto que es raro el caso de un futbolista que no sea socio de una empresa. Los fondos de inversión y las firmas de gestión de carteras bursátiles son un clásico, y exjugadores como Fernando Hierro (Ferrosor), Roberto Carlos (Rodasil Inversiones) o Iván de la Peña (Peñasen) han probado sus mieles.
El sector inmobiliario también es una opción recurrente. En ese sentido, Íker Casillas posee, junto con sus padres, la empresa Ikerca, dedicada a la gestión de inmuebles y plazas de garaje. También Leo Messi fundó con su progenitor la compañía Limecu, que según sus estatutos sociales de dedica a la “compra, arrendamiento y venta de terrenos rústicos y urbanos”. En el pasado, otros jugadores retirados como Raúl González, Michel Salgado o Valery Karpin también se convirtieron en nuevos señores del ladrillo a través de distintas sociedades.
En esa misma línea, muchas opciones de los futbolistas a la hora de invertir tienen que ver con sus gustos personales y el arraigo a su tierra. Sergio Ramos está empeñado en la apertura de un mercado gourmet en Sevilla, el Mercado de San Pedro, aunque el proyecto todavía no ha cristalizado. Por su parte, Andrés Iniesta ha apostado por el sector vinícola, fundando en Fuentealbilla (Albacete) con su familia la Bodega Iniesta. El propio Ronaldo Nazario también invirtió en el negocio de los vinos en 2007, concretamente en las bodega Cepa 21, adscrita a la Denominación de Origen Ribera del Duero.
Fuente: elConfidencial.com Por David Pérez
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