Numerosas empresas rusas que se definen como firmas de capital riesgo están aumentando su presencia en Boston y Silicon Valley. Las autoridades policiales americanas creen que tras ellas está el Kremlin.
Algunas startups americanas que buscan fondos para financiarse sin preocuparse del origen o naturaleza de los inversores podrían estar incurriendo en un riesgo para la seguridad nacional. Es el temor que tiene el FBI (Federal Bureau of Investigation) y que ha manifestado públicamente en un artículo publicado en el diario local y de negocios Boston Business Journal.
En el documento dos agentes especiales del FBI, Lucía M. Ziobro y Vincent B.Lisi, advierten a las startups del área de Boston (una de las zonas de EE.UU con la concentración más alta de empresas de tecnología y con muchas de ellas centradas en defensa) y a las instituciones académicas de que algunos espías y scammers rusos se estarían haciendo pasar por firmas de capital riesgo. Lo cierto es que en los últimos meses parece haberse dado un crecimiento de este tipo de sociedades en zonas como Boston y también en Silicon Valley.
El FBI de Boston opina que “las supuestas razones ofrecidas por los socios rusos enmascaran su verdadera intención, que es tener acceso a tecnología clasificada, sensible y emergente de las startups”. Asegura, además, que estas “ofertas que parecen lucrativas en un principio” son solo el reclamo que usan estas compañías rusas “a menudo financiadas por su gobierno”.
Ziobro apunta a la fundación Skolkovo como una de estas firmas. El FBI sospecha que esta organización serviría como un medio para que el gobierno ruso pueda acceder a la “investigación de información sensible o clasificada, instalaciones de desarrollo y tecnologías de doble uso con aplicaciones militares y comerciales”.
Las instituciones no están muy de acuerdo con las acusaciones del FBI y el prestigioso MIT (Instituto de Tecnología de Massachusets) defiende la colaboración con la fundación y el Skoltech (Instituto Skolkovo de Ciencia y Tecnología) para construir relaciones intelectuales en un entorno transparente y abierto.
El RVC (Russian Venture Company), fondo creado por el gobierno ruso en 2006, ha querido limar asperezas con un comunicado oficial: “Estamos convencidos de que las firmas de capital riesgo rusas y las empresas estadounidenses seguirán siendo buenos socios de negocios y esperamos que el artículo no recibirá la confirmación oficial”.
por Alberto Payo
fuente: ITspresso