Fue cartonero y con sus ahorros consiguió armar la FM La Milagrosa, una radio que transmite desde la villa Ciudad Oculta, en Mataderos (Buenos Aires), programada íntegramente por los vecinos. Conocé su dramática historia y mirá el video
Juan Ramón Núñez fue reconocido el año pasado como «Emprendedor del año», premio que entrega la Youth Business International a jóvenes que, como él, se sobreponen a las peores situaciones. Con ahorros consiguió armar la FM La Milagrosa, una radio que transmite desde la villa Ciudad Oculta, en Mataderos (Buenos Aires), programada íntegramente por los vecinos.
«Todavía no lo puedo creer. La enorme felicidad que siento me hace estar en el aire, pero de a poco voy a ir cayendo en la realidad», escribe Juan en su blog «Impulsando mi proyecto». Su historia se conoció a fines de septiembre, cuando contó que cartoneaba para sostener su familia y su sueño, la radio.
Conocé su historia
La historia de este padre de 8 hijos es como la de muchos otros, una historia de sueños. Juan añoró sentarse detrás de un micrófono desde que era chico: «Siempre quise tener una radio, siempre fue mi idea tener una radio y más o menos con este mismo estilo, con un compromiso social que pueda servirle a quien tenga mayores necesidades que nosotros o las mismas».
La historia de amor entre Juan y la radio arrancó cuando tenía 23 años y quiso montar su propio estudio. Estaba ahorrando cuando Nidia, su primera mujer –con quien tuvo dos chicos– falleció de un paro cardíaco. Tiempo después, alguien le robó el dinero que había llegado a juntar, unos $ 15 mil. Por la tristeza, Juan sufrió un infarto y lo internaron. «Pesaba 32 kilos. No tenía plata, trabajo, ni músculos», recordó Núñez. Luego se casó con Carmen –su actual pareja-, «un ángel», dice Juan y se quiebra.
Llegó de Corrientes con su mujer, cuatro de sus hijos, 120 pesos y un panorama desolador: sin trabajo a la vista ni lugar donde refugiarse, se las ingenió como pudo. Vivió un tiempo en casa de un amigo porteño hasta que se enteró que un supermercado chino precisaba gente para seguridad. Probó suerte y abandonó al tiempo (le pagaban 300 pesos por una jornada intensa, de lunes a lunes), cuando supo que podía pagarse un terreno cartoneando.
Mirá el video
fuente: La Nación, Clarín, Perfil y Mendoza On Line
Nos encantó ver que por fin dieron importancia a las buenas obras y personas que tenemos en este país, nos impresiona el trabajo y la historia de vida de Juan, por eso mi yerno que es artista plastico realizó una obra homenajeando a Juan Ramón y a el le gustaria contactarse con Juan para enviarle su obra. Felicitaciones y sigan alegrando a las almas que desean un mundo mejor. Gracias