Procter & Gamble anunció un nuevo plan para la utilización de plástico derivado de la caña de azúcar, sustentable y renovable, en empaques de sus productos de belleza y cuidado personal. En Argentina podrá verse plasmada esta prueba piloto, a realizarse en el plazo de dos años, a través de la marca Pantene Pro-V®, y en otras partes del mundo también se impulsará la experiencia con las marcas COVERGIRL® y Max Factor®.
La utilización del plástico derivado de la caña de azúcar representa un significativo avance en la fabricación de empaques sustentables, ya que proviene de una fuente renovable, a diferencia del plástico tradicional que es elaborado en base a petróleo. El nuevo material se elabora mediante un innovador proceso que transforma la caña de azúcar en polietileno de alta densidad (HDPE), un tipo de plástico que puede utilizarse para el packaging de productos de consumo masivo. Una de las grandes ventajas de este material es que su proceso de producción permite a través de la caña de azúcar, capturar el gas carbónico de la atmósfera y transformarlo en plástico, reduciendo así el efecto invernadero y combatiendo en forma efectiva el calentamiento global. Además, este tipo de plástico es 100% reciclable.
P&G se abastecerá del plástico derivado de caña de azúcar a través de Braskem S.A., cuyas plantas están ubicadas en Brasil. La compañía espera desarrollar el plan piloto dentro de los próximos dos años, esperando que los primeros productos e stén en las góndolas durante 2011.
Reemplazar el plástico derivado del petróleo en sus empaques por uno reciclable al 100%, es una iniciativa muy importante para contribuir con el cuidado del medio ambiente ya que reduce los residuos plásticos. Con esta propuesta, P&G demuestra su compromiso con la sostenibilidad, y cada vez son más la empresas comprometidas con el medio ambiente.