por Dr. Horacio Krell*
Introducción: definición y contexto
En un mundo interconectado, el progreso tecnológico redefine las reglas de juego en economía, política, educación y relaciones humanas.
Actualmente, reaparece el espíritu de los 90 incrementado y acelerado con la invención de internet, de las redes sociales y de la inteligencia artificial.
En el mundo soplan nuevos vientos. Se respira otro aire. La sumatoria de Trump + Musk parece un paso importante en la fusión de la democracia con la tecnología y combina el poder político con el poder digital. La función en el gobierno de Musk tendrá como meta la revolución del Estado para optimizar su eficacia y su eficiencia.
Ejemplos Globales
- Estados Unidos:
- o La influencia de figuras como Elon Musk trasciende el ámbito empresarial, impactando áreas como la exploración espacial (SpaceX), la movilidad sostenible (Tesla), y las comunicaciones globales (Starlink). Estos avances muestran cómo la tecnocracia está dirigiendo las prioridades del país hacia la innovación.
- o Políticos como Donald Trump aprovecharon las redes sociales para crear una conexión directa con la ciudadanía, marcando un cambio en cómo se ejerce el liderazgo.
- China:
o La tecnocracia china se caracteriza por el uso masivo de la inteligencia artificial para gestionar grandes poblaciones. Ejemplo: el sistema de crédito social y el uso de big data para la planificación urbana y la seguridad.
o Las «zonas de innovación tecnológica» como Shenzhen actúan como laboratorios de experimentación económica y tecnológica, impulsando su liderazgo global en 5G y comercio electrónico. - Estonia:
o Este pequeño país europeo es un modelo de tecnocracia digital. Su sistema de e-Residency permite a cualquier persona del mundo establecer negocios virtuales en Estonia. El voto electrónico y los servicios públicos completamente digitales reflejan una integración avanzada de tecnología en la gobernanza. - Singapur:
o Conocido por su meritocracia, este país combina una economía de mercado con tecnologías avanzadas de urbanismo, transporte y salud pública. Sus estrategias de planificación demuestran cómo la tecnocracia puede ser eficiente y equitativa.
Valores Claves de la Tecnocracia
- Libertad e Innovación: La tecnocracia desafía la burocracia tradicional, abriendo camino a soluciones creativas y adaptativas.
- Meritocracia: Los mejores talentos y las ideas más innovadoras lideran el camino, transformando sectores enteros.
- Velocidad y Adaptación: La aceleración tecnológica exige respuestas rápidas de gobiernos y sociedades.
- El Cliente-Ciudadano en el Centro: Desde la experiencia del usuario en plataformas digitales hasta políticas públicas personalizadas, la tecnocracia redefine el concepto de servicio al ciudadano.
Impacto en la Sociedad y la Biología Humana
La tecnocracia no solo transforma sistemas externos, sino también la naturaleza humana. Tecnologías como Neuralink prometen una integración directa entre cerebro y dispositivos, planteando interrogantes sobre la evolución del ser humano.
Para capturar al cliente se requiere un nuevo modo de ser y de hacer caracterizado por enfrentar el riesgo, antisistema, competitividad y escala global, entre otros.
Hoy 6 de las 7 principales compañías del mundo son tecnológicas: Apple, Nvidia, Microsoft, Alphabet (Google ), Amazon y Meta (Facebook) y están llegando al poder formal y a la real politik.
Reflexión Final
Si se estropea algo, ¿cuál es la solución más efectiva para solucionarlo? ¿Entregarlo a un conocido para que se ocupe o contratar a un experto? En la esfera política, ¿se debe asignar un cargo público a un especialista en la materia o elegir a alguien que sea miembro del partido político del gobierno?
En la tecnocracia los cargos públicos no son ocupados por ‘gente de partido’, sino por profesionales en cada una de las materias. Esta idea ya la defendió Platón con su ideal de sociedad, en la que proponía que «cada uno haga aquello en lo que es mejor».
La tecnocracia puede convertirse en una poderosa herramienta para el progreso si se gestiona con visión ética y estratégica. Sin embargo, también plantea desafíos: desigualdad digital, privacidad y el riesgo de concentración de poder unos pocos.
No va a tardar el crecimiento de la inteligencia artificial en los asuntos humanos. Lo que pase pasará más rápido. Y todos debemos adaptarnos a esa velocidad si queremos ser protagonistas y no meros espectadores de la realidad.