Las franquicias sociales aplican el franchising a los problemas sociales, entre ellos la desocupación
La franquicia comercial, que en el mundo se denomina franchising, facilita la expansión de determinados tipos de negocios y, al mismo tiempo, es útil para empresas que carecen del capital para hacer inversiones directas en programas de expansión. El franquiciante (el generador de una franquicia) la otorga a terceros (franquiciados), quienes actúan como propietarios del negocio dentro de su territorio, con la expectativa de obtener beneficios inmediatos y seguros, porque saben que la actividad los produce en otras regiones. El franquiciante ha atravesado ya la curva de aprendizaje y conoce los secretos del éxito de su negocio. El formato de concesión transfiere dicha curva de aprendizaje al franquiciado.
Casi cualquier negocio que se pueda imaginar es adaptable al sistema de franchising. Generalmente se piensa en locales de comidas rápidas y restaurantes cuando se habla de franquicias, pero éstas cubren un amplio rango. Son ejemplos de franquicias los siguientes servicios: publicidad y marketing directo, construcción, sistemas de seguridad, ventas y alquiler de videos, también los servicios de copias e impresión, de personal doméstico, servicios de computación, lavanderías, mantenimiento de jardines, bienes raíces, hoteles y agencias de viajes.
La cultura del ejemplo
El cambio cultural aplicado a los negocios debe lograr velocidad, mejorar el cumplimiento, hacer sentir la sensación desafío, promover la simplicidad, aumentar la colaboración y el magnetismo de la empresa. Primero hay que cambiar el comportamiento de los líderes y para eso su modelo mental de la vieja cultura. Modificando su pensamiento cambiará su comportamiento y sus decisiones. Entonces la gente le atribuirá significado o simbolismo, difundirá el cambio y modificará su comportamiento para adecuarse. Esto reforzará el cambio cultural y llevará a nuevos resultados. Las personas son el activo, nada ocurre sin ellas. Lo que hacemos produce lo que tenemos y los resultados.
El modelo de la franquicia
En la escala de necesidades humanas, Maslow diseñó una pirámide en cuya base ubicó el comer y el dormir, luego la seguridad ante el medio y el futuro, los lazos sociales, el reconocimiento y en la cima el deseo de autorrealización y de trascendencia. La necesidad crea los problemas y es la madre del invento. Así, se generan los nuevos valores que definirán el tamaño de la pirámide. Ante la crisis de empleo y la incertidumbre, el sistema de franquicias proporciona la seguridad de pertenecer a una red, afianza las relaciones sociales y fortalece el reconocimiento por la mutua elección que hacen el franquiciante – que trasciende su obra – y el franquiciado que descubre un nuevo camino.
La motivación para la acción
Una franquicia debe surgir por identificación y no por mera conveniencia. A diferencia de una idea permite «ver para creer» antes de aceptar el modelo. Como relación, provee un espacio de libertad entre el maestro y el alumno. El “maestro franquiciante” ha envasado la fórmula de su éxito y se la transmite al alumno para lograr el mutuo beneficio y su expansión a la sociedad que recibirá los frutos.
La franquicia social
La franquicia social aplica el franchising a los problemas sociales. Se trata de trasladar la metodología de la franquicia comercial a la clonación de programas benéficos y exitosos para replicarlos en otras regiones. A este procedimiento al que se lo denomina franquicia social se lo usa también, alternativamente, para combatir el flagelo de la desocupación.
Cómo se financia
La franquicia social se conecta con proyectos sociales o comerciales. Así es como las Pymes pueden expandirse franquiciando la producción o comercialización de sus bienes o servicios entre sus empleados o profesionales externos que no pueden comprar una franquicia, la franquicia social trata de aprovechar la capacidad del individuo para generar resultados, compensando su falta de capital financiero con el aporte de activos intangibles (conocimientos, actitud emprendedora, experiencia, capital intelectual y social).
Objetivos
La franquicia social contribuye a la solución de necesidades sociales, manteniendo la calidad y la productividad. Al valor moral de una causa suma el valor estratégico de movilizar recursos hacia el bien público, haciendo de la filantropía una agencia de cambio social en vez de un negocio para quienes la administran. A la pasión por la causa, la franquicia social agrega inteligencia estratégica para alcanzar las metas.
La base de la pirámide
Ligada a la responsabilidad social empresaria, se busca que la inversión privada contribuya al desarrollo sustentable y a reducir la brecha entre ricos y pobres; intentando que los problemas de inequidad que crea el capitalismo se resuelvan dentro del sistema.
En India, Unilever se unió con pobres que venden sus productos. Para promover su jabón para la ropa, desarrolló un producto no contaminante -ya que las mujeres lavan en el río- y asociada con una ONG de microcréditos, convirtió a familias enteras en franquiciados sociales intermediarios y con este cambio logró maximizar el impacto social.
Recursos creativos
Sin depender de las donaciones es posible detectar recursos locales y oportunidades. En la India, se desarrolló una franquicia para asistir a niños de la calle. Childline los conecta con servicios sociales y el programa crece. La franquicia incluye marca, línea de ayuda gratuita, software, capacitación y un capital de arranque.
Fabricar franquicias sociales
Mientras crecen los emprendedores sociales, surgen en cascada nuevas ideas que proporcionan una fuente de energía y recursos renovables. Cuando se perciben las necesidades, la conciencia social las plantea como problemas a resolver. Y como el problema es el motor de la inteligencia, la mente humana encuentra su misión social cuando logra transformarlo en oportunidad.
Males sociales
El mal de Alzheimer crece en todo el mundo y por el momento no tiene una solución a nivel médico. Esta enfermedad trae trastornos irreparables no sólo al enfermo sino también a su familia. La decisión de enviar a un familiar a un asilo es difícil, pero se deben tener en cuenta las condiciones de salud y el entorno. Puede ser una decisión difícil de tomar y muy emotiva.
Sybille Wiedmer vive en Zúrich, Suiza, y se prepara para visitar a su madre que vive en un asilo en la ciudad tailandesa de Chiang Mai. Su madre, de 91 años, padece esa demencia y vive alli desde hace varios años, pero apenas tiene recuerdos del presente. Sólo hay que echar un vistazo rápido a las cifras y es fácil adivinar por qué algunas familias se están planteando llevar a sus seres queridos tan lejos. Los costos del cuidado de los mayores son más bajos en Tailandia y la reputación de la calidad del servicio es muy alta. Para su hija Sybille, un factor clave para enviar a su madre allí fue el trato que recibiría. Es mucho más individualizado y la tratan con cariño.
La gente cada vez vive más y los problemas de salud crónicos relacionados con la edad son cada vez más frecuentes. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que en 2050 el número de personas que superen los 80 años se habrá cuadruplicado hasta los 395 millones. Y, según las estadísticas, a esa edad una de cada dos personas tiene la demencia.
A eso se le suman las conclusiones de un informe de la Sociedad del Alzheimer británica que muestra que alrededor del 80% de los residentes en asilos de ancianos tienen demencia o problemas de memoria significativos y está claro que las necesidades van a aumentar. La seguridad social británica ha sido golpeada por revelaciones de abusos a ancianos y a personas a las que se les dejó morir de hambre y sed. Por el contrario, Tailandia tiene una cultura arraigada del cuidado a los mayores. Los residentes en el asilo gozan de una calidad de cuidados por un precio que no tienen en su país de origen. Pueden tener tres o cuatro cuidadores por persona y puedes organizarlo de forma que sea así 24 horas. Eso no es posible en Europa. Sybille Wiedmer trató de atenderla en su casa pero, como muchos familiares de enfermos de demencia, llega un momento en el que se hace imposible. Pasaba la mayoría del tiempo cuidándola día tras día. Eso complicó mucho la situación; la cosa se puso muy fea. Pese a que muchos familiares se sienten muy culpables por mandar a sus familiares a residencias, la decisión, en muchos casos, se les va de las manos. A mucha gente le gustaría cuidarlos, pero no pueden. Pese a la distancia, Sybille habla con su madre por Skype todos los días y la visita, al menos, dos veces al año. Con una generación que tiene entre 40 y 50 años y se encuentra en una crisis en la que tiene que apoyar simultáneamente a sus padres de avanzada edad y a sus hijos, cada vez más personas pueden acabar siendo cuidadas como Elisabeth en un lugar muy alejado de su hogar.
Perfil de un franquiciado
La sustentabilidad y rentabilidad de los diferentes conceptos que operan bajo el formato de franquicia, serán viables en la medida en que se pueda establecer una serie de relaciones entre los distintos agentes del mercado. Las características que deben poseer el personal que conforme la unidad básica de la franquicia, es decir, franquiciante y franquiciado, deben ser las apropiadas para llevar adelante la empresa. El perfil del franquiciado será determinante en el éxito o fracaso de la red. El franquiciado ideal debe poseer una mezcla de habilidades y destrezas, que lo caractericen como un ser de espíritu emprendedor y a la vez como una persona con fuerte apego a las normas, es decir, es aquel agente que se encuentra en un término medio entre dos extremos: por un lado, la persona con clara mentalidad empresarial y alto grado de iniciativa y por el otro, la persona dócil con la iniciativa suficiente para tomar las decisiones que son de su exclusiva competencia.
Esto es así, porque en la relación de franquicia, se establece un equilibrio que puede llegar a quebrantarse si el franquiciado es en extremo pro-activo o en extremo dependiente. Por esto, el punto medio entre estos dos límites garantiza la operación y explotación del concepto de negocio en términos favorables para las partes, dejando de lado los posibles inconvenientes y discrepancias que puedan resultar de la cotidiana operación.
La franquicia social para el trabajo
La franquicia social es la aplicación del concepto de franquicia comercial para clonar una experiencia exitosa internacional (social o humanitaria) a nivel local. Ilvem ha creado una franquicia social para combatir el flagelo de la desocupación. En un taller gratuito ofrece incrementar la capacidad individual de generar resultados por cuenta propia, compensando la falta de capital financiero para instalar una franquicia, con el desarrollo de activos intangibles (conocimientos, actitud emprendedora, experiencia, capital intelectual y social).
De ese modo el franquiciado optimiza su nivel intelectual (velocidad y comprensión en la lectura, técnicas de estudio, memoria, concentración, oratoria, liderazgo, inteligencia y marketing personal) y al mismo obtiene una franquicia social que le permite trabajar como coach educativo o comercial. Las terapias cognitivas, basadas en la educación de la mente y en las neurociencias, son una herramienta muy importante para el desarrollo personal como también para prevenir enfermedades mentales. No se conocen casos de Alzheimer en ajedrecistas famosos.
El caso de las monjas francesas
Un estudio de 1986 con 678 monjas, detectó por qué algunas envejecían de forma saludable, conservando sus facultades mentales intactas y otras no. Se eligió una comunidad religiosa para asegurarse de que el envejecimiento saludable no podía atribuirse únicamente a un mayor cuidado de la salud. Las monjas de la comunidad tenían estilos de vida parecidos tanto si se habían licenciado en la universidad como si no. Los ingresos no eran un factor a tener en cuenta, no fumaban y disfrutaban de la misma asistencia sanitaria, estilo de vida y alimentación. A las religiosas les hicieron estudios neuropsicológicos anuales y muchas donaron sus cerebros para su posterior estudio.
Una mejor educación protege del mal de Alzheimer o retrasa su aparición. Y aunque sea sólo por esto hay que tenerlo muy en cuenta ya que los avances científicos pueden dar en la tecla en cualquier momento. El depósito de sustancias que provocan el mal está presente, pero la reserva cognitiva puede eludir el mal o diferirlo. Las monjas francesas tenían la neuropatalogía sin tener su manifestación clínica.
Por la reserva cognitiva, el cerebro puede acomodarse, esa es la clave. La capacidad intelectual puede ser igual pero algunas personas pueden tener más o menos reserva, el entrenamiento es clave para prevenir el Alzheimer. Entrenar la mente da mayor plasticidad y hay que realizarla mucho antes, durante toda la vida. Las franquicias sociales derivan de las comerciales, pero se pueden combinar cuando un individuo tiene ideas que pueden ser universalizadas En este mundo global donde la tecnología está generando problemas sociales quizás se puedan revertir los problemas que aquejan a la humanidad usando la tecnología para revertir los daños que ella misma engendra.
La interacción entre los problemas sociales e individuales, así como la existente entre la economía y la sociedad, hacen que sea muy importante que las herramientas de inteligencia social y comercial se armonicen para disminuir la creciente brecha entre ricos y pobres.
Felicidades por ésta página web!
Quisiera saber si ustedes tienen una base de datos de las franquicias sociales que existen en México y Brasil?
Lo necesito para efecto de un tema de investigación doctoral sobre franquicias sociales, con la finalidad de aportar un mayor conocimiento científico al tema y de la mano incentivar a las empresas sociales a replicar sus modelos de impacto social a través de una franquicia.
Espero me puedan apoyar, agradezco de antemano su atención