Crear experiencias inusuales y buscar inspiración donde menos imaginas puede motivar a tus empleados a generar buenas ideas.
Cuando los empleados llegan a una reunión de “lluvia de ideas” en MBooth, una agencia de comunicación en Manhattan, ven confeti en las mesas, posters con frases como “Dime una idea inspirada en la electricidad del mundo”, y una foto del actor Ryan Gosling que tiene escrito, “Hey chica, ¿qué harás para que compre ahí?” Se les da un plumón a cada uno y 10 minutos para escribir ideas en las paredes.
Esta experiencia, completamente inusual, está hecha para ayudarlos a pensar fuera de la caja.
Andrew Rossi, director creativo de MBooth, es el responsable de hacer de la agencia un centro de innovación. Rossi obtuvo este puesto en 2009 cuando las ideas frescas estaban empezando a escasear. “Los clientes se mantienen con nosotros por mucho tiempo”, dice. “Estábamos pensando en los mismos clientes una y otra vez, y nuestras ideas estaban estancándose”.
En ese momento, Rossi empezó a investigar cómo funciona la creatividad y reajustó el proceso creativo de MBooth, lo que le hizo ganar el premio ‘Agencia Creativa del Año 2012” (‘2012 Creative Agency of the Year’) otorgado por el Holmes Report.
Rossi te comparte tres consejos que pueden ayudarle a tu compañía a diseñar y ejecutar formas originales de alcanzar sus metas. Aplícalos en tu negocio:
1. Establece parámetros para enfocar tus ideas
Irónicamente, tener demasiada libertad puede inhibir la creatividad. Los límites ayudan a que tu memoria funcione correctamente, dándote ideas más profundas y amplias. “Demasiadas veces, las personas comienzan desde algo muy general”, dice Rossi. “Eso provoca mucha presión. Es mejor anclar una idea en algún lugar determinado”.
Mientras haces una “lluvia de ideas”, enfoca tu pensamiento en hacer preguntas específicas. Por ejemplo, si estás buscando nuevas estrategias de marketing, enlista 10 cosas que podrías hacer en Facebook o cinco ideas que involucren el crowdsourcing. Juega con una variedad de notas y escribe todo lo que te venga a la mente, no importa qué tan pobre sea la asociación entre ellas.
2. Busca inspiración en lugares poco esperados
Para pensar fuera de la caja, necesitas impulsar a tu cerebro a que haga conexiones que normalmente no haría. Para lograrlo, debes buscar inspiración que parece que no tiene relación alguna con el problema en particular.
Rossi, en continuas ocasiones, provoca a su equipo diciéndoles palabras inesperadas, como ‘piña’ o ‘brillantina’ para una empresa automotriz. “Nueve de cada 10 veces, las ideas que le encantan a la gente son generadas por relaciones ridículas y hechas al azar”, afirma. Para encontrar estas ideas, observa las imágenes más populares en Pinterest o las tendencias en Twiiter, o dándole clic a “Voy a tener suerte” en Google, por ejemplo.
3. Enfócate en la calidad, no en la cantidad
Mientras generas ideas, desenchufa a tu editor interno. Agota todas tus buenas ideas y empieza a dar sugerencias que a primera vista parezcan absurdas o incorrectas. Recuerda, siempre puedes convertir una mala idea en una buena si la canalizas adecuadamente.
Rossi afirma que las competencias rápidas y amigables ayudan a la gente a mostrar ideas sin juzgar ni ser juzgados. Una vez, puso billetes de 100 dólares en el centro de la mesa y le dijo a su equipo que podrían tomar uno cada vez que dieran una idea. “En 15 minutos generamos 100 ideas”, dice. “Y 50 de ellas fueron realmente interesantes”.
Nadia Goodman
fuente: Soy Entrepreneur