A pesar de la frustración, existen fórmulas que te permitirán superar con mayor rapidez un fracaso, e incluso, sacar provecho de éste.
En un sistema competitivo como el actual, es imposible que todos alcancen el éxito. Mientras un grupo de personas puede presumir sus buenos resultados, otros sufren al no alcanzar sus objetivos. Ante tal situación resulta imprescindible que las personas, sobre todo los líderes, sean capaces de superar los momentos de frustración que vienen después de un fracaso.
Lamentablemente estamos lejos de hacerlo. Según Ben Dattner y Robert Hogan, de Harvard Business Review AL, aproximadamente 70% de las personas tiene un tipo de personalidad que reacciona de manera inadecuada cuando las cosas salen mal.
“Algunas personas son extrapunitivas, siempre culpando a otros injustamente. Otras son impunitivas, que niegan que exista un problema o que tuvieron algo que ver con él. Y otras son intrapunitivas, juzgándose con demasiada rudeza e imaginando fracasos donde no los hay”.
Para suerte de todos, esto tiene solución. El ejemplo más actual es el del CEO de Apple, Steve Jobs, quien en 2005, durante una ceremonia de graduación en la Universidad de Stanford, dio un discurso que inspiró a líderes de todo el mundo.
«Woz y yo creamos Apple en la cochera de mis padres, cuando tenía 20 años. Trabajamos mucho, y en diez años alcanzó los 4,000 empleados y fue valuada en dos mil millones de dólares. Un año después de haber lanzado nuestra mejor creación -la Macintosh- fui despedido. ¿Cómo te pueden echar de la empresa que tú has creado? Realmente no supe qué hacer durante algunos meses. Fue un fracaso muy notorio, e incluso pensé en huir de Silicon Valley», relató en aquella ocasión el destacado empresario.
«Pero algo comenzó a abrirse paso en mí, aún amaba lo que hacía -continuó-. Había sido rechazado, pero aún estaba enamorado, así que decidí comenzar de nuevo. No lo vi así entonces, pero resultó ser que el que me echaran de Apple fue lo mejor que jamás me pudo haber pasado. Había cambiado el peso del éxito por la ligereza de ser de nuevo un principiante. Me liberó para entrar en uno de los periodos más creativos de mi vida», dijo Jobs, tratando de convencerse que no habría alcanzado el éxito que hoy tiene, si no hubiese sido por sus fracasos.
Según el empresario, un fracaso puede convertirse en un escalón hacia el éxito.
¿Cómo recuperarse?
Para Dattner y Hogan, el primer paso es cultivar la “autoconciencia”; diversos test de personalidad pueden ayudarte a evaluar tu estilo de interacción.
A continuación, se debe cultivar la conciencia política, para entender mejor cuáles son los mensajes que los demás están recibiendo.
Una vez identificados los malos hábitos, puedes avanzar hacia respuestas más adaptativas. “Usted debería asegurarse de escuchar y comunicarse bien, reflexionar sobre la situación y las personas involucradas, pensar cuidadosamente antes de actuar, buscar lecciones cuando se cometen errores”, dicen.
Héctor Ramírez, jefe de Recursos Humanos de Lan -elegida en 2008 como la mejor aerolínea de Latinoamérica- tiene también una propuesta.
El primer paso -dice- es entender el contexto de un fracaso. Y es que las personas deben entender que en el mercado actual, la oferta es tan amplia que nadie resulta indispensable. “Uno debe tener claro que si no estás respondiendo al desempeño que se espera, siempre habrá problemas”.
Lo segundo es aceptar el error: «Es necesario mirar hacia adentro y decir, ¿qué me pasó? Asumir la culpa y sacar las conclusiones que te puedan llevar a aprender de ese fracaso. No buscando responsables de forma desesperada, o tratar de ser víctima, sino que al contrario, aprender de lo que pasó”, aconseja Ramírez.
Eso te ayudará a alcanzar no sólo el éxito profesional, sino a vivir plenamente. El objetivo es ver a los fracasos no sólo como una equivocación, sino como un área de oportunidad que te reta a aprovecharla.
Y tú, ¿cómo te recuperas de los fracasos?
fuente: Alto Nivel
Buen artículo, motivador..
Saludos!