Que la economía europea no acaba de despegar es un mantra que, como tal, nos llevan repitiendo durante años, y parece que con “…el no acaba de…” se nos quiere transmitir una especie de esperanza, de que estamos en el camino correcto y que simplemente la meta está más lejos de lo que todos, expertos y no, esperábamos. Sin embargo, el paso del tiempo y la repetición mes tras otro del mantra no hace más que levantar sospechas sobre que, quizás, el camino que tomamos no fue el correcto.
Las bolsas y economías europeas no dan el salto cualitativo que se esperaba de ellas y aunque las continuas medidas propuestas por Mario Draghi desde el BCE parecen siempre estimular en parte el consumo, toda medida superficial se acaba quedando en agua de borrajas. Y en este contexto, con unas bolsas débiles que no acaban de comportarse como de ellas se espera y las dudas económicas, ¿Cuál se supone que debe ser el mejor movimiento inversor que uno puede realizar? Pues bien, la verdad es que elegir un buen lugar donde colocar las inversiones es, cuanto menos, complicado.
Las recientes salidas a bolsa de compañías como Telepizza o Parques Reunidos mostraron que apostar a nuevos valores bursátiles no es la mejor opción. Ambos estrenos, aunque en mayor medida el de la cadena de comida rápida, sufrieron sonadas caídas y no mostraron confianza alguna, mientras que el resto del Ibex 35 tampoco ha sido un campo de rosas durante los últimos meses. Lo mejor, si uno sigue los análisis y noticias sobre el mercado en páginas como la de Blackwell Global, es alejarse de las bolsas si uno quiere, al menos, mantener cierta seguridad sobre sus inversiones.
Tampoco parece que el petróleo vaya a ser la solución. Y es que al parecer miles y miles de litros de crudo se encuentran en reservas por todo el mundo y al mínimo atisbo de desabastecimiento dichas reservas se vaciarán, volviendo a crear una sobreoferta del producto que lastrará de nuevo el precio del crudo. Y, aunque es cierto que su cotización acabará subiendo básicamente porque en América del Norte (Estados Unidos y Canadá) el fracking ya no resulta beneficioso, los precios tardaran dos, tres o cuatro años en volver a niveles altos de precio.
Por ello, en épocas como esta se pueden encontrar fuera de las bolsas ciertos valores que muestran una firmeza mucho mayor y que sirven, al menos, como puerto seguro donde atravesar una tormenta que cada vez se hace más larga. Uno de estos puertos seguros son los bonos soberanos de países como Estados Unidos o Alemania, dos de las grandes economías mundiales y probablemente las que cuenten con un menor riesgo de contagio. Su rendimiento anual es alrededor de un 2% y pocos activos hay tan seguros como ellos.
Otro de los valores siempre seguros y al que, de hecho, ha recurrido todo un especialista y magnate de la especulación financiera como es George Soros, es el oro. El multimillonario húngaro y muchos otros analistas y especialistas están convencidos de que un nuevo crash económico como el del 2008 está en el camino y por ello deciden resguardar sus inversiones en una materia prima de fiabilidad absoluta como es el oro.
Así que, por las opiniones de expertos que se pueden recolectar y por el horizonte gris (oscuro) que se presenta para las economías mundiales, con el fantasma del ‘Brexit’, el estancamiento general de la economía europea y las dudas sobre China y las economías emergentes, lo más recomendable parece refugiarse durante un tiempo en los valores seguros y los dos anteriores, el oro y los bonos alemanes y norteamericanos, parecen dos buenas opciones.
¿Con qué instrumento invertir?
Pese a que las noticias para el panorama inversionista en sí no han sido muy halagüeñas últimamente, lo cierto es que si por algún sitio han venido en muchas ocasiones ha sido por la parte de la evolución en instrumentos para la inversión. Y en este espacio, ha sido principalmente MetaTrader 4 la plataforma que se ha llevado la mayoría de los elogios: una aplicación para computadoras, tabletas o móviles que ha evolucionado hasta tal punto que la comodidad a la hora de usarla es igual de buena en cualquiera de las tres plataformas. Aunque, quizás, no sea la mejor época para invertir como si no hubiera mañana, lo cierto es que con plataformas como MetaTrader 4 da casi rabia el no hacerlo.