La firma de ‘streaming’ vive un gran momento reflejado en sus utilidades y número de suscripciones; para mantener el paso, Netflix debe apostar por más contenido original y a los mercados extranjeros.
Netflix está en racha: A principios de la semana pasada, el proveedor de servicios de streamingde video reportó que en el trimestre anterior su utilidad neta se cuadruplicó con creces hasta alcanzar 31.8 millones de dólares (mdd). Las suscripciones aumentaron a 40 millones en todo el mundo, con un fuerte crecimiento en el extranjero. Y con tres premios Emmy ganados este septiembre, parece que la compañía es hoy más fuerte que nunca. Algo que no deja de sorprender, dadas las tribulaciones públicas que atravesó hace dos años con el alza en los precios y una malograda separación de su negocio de DVD por correo.
El CEO Reed Hastings puede mantener la buena racha si sigue estas cuatro pautas:
Más contenido original
Netflix hizo historia recientemente al cosechar tres premios Emmy por la serie política ‘House of Cards’, incluyendo uno el de mejor director. Fue la primera vez que el premio se otorga a una cadena que no es de televisión. De hecho, el programa galardonado es en parte responsable de agregar tres millones de miembros durante el primer trimestre de 2013. Y aunque la compañía no revelará los datos, la comedia dramática ‘Orange is the New Black’ está en camino de convertirse, al término del año, en la serie original de Netflix más vista.
Con apuestas como éstas dando frutos, obviamente a Netflix le conviene producir más opciones, programas exclusivos que los espectadores no puedan encontrar en otra parte. De hacerlo, la compañía seguirá diferenciándose de servicios rivales como Prime Instant Video de Amazon y Hulu.
Atender a los mercados extranjeros
En pocas palabras, cuanto más atienda Netflix a los diferentes mercados internacionales, mejor. Aun cuando una gran parte de su catálogo tiene sin duda cierto atractivo internacional, y las series originales (como ‘Orange is the New Black’) probablemente se traduzcan a otros idiomas, la empresa necesita construir un catálogo internacional que atraiga a cada mercado. Después de todo, lo que es popular en la India puede no serlo en Italia. Con vistas al futuro, Michael McGuire, vicepresidente de Gartner Research, sugiere que Netflix considere desarrollar contenido original para sus mercados internacionales más populares, como por ejemplo Brasil. ¿Una estrategia costosa? Claro, pero es una apuesta que podría significar una enorme ganancia en suscripciones adicionales de la misma manera que ocurrió con ‘House of Cards’ en Estados Unidos.
Seguir negociando acuerdos
En el último año, Netflix no se ha quedado atrás a la hora de ampliar su catálogo de streaming de video, firmando acuerdos con Disney y Warner Bros por cantidades no reveladas. El convenio con Disney suministrará a los suscriptores estadounidenses nuevas películas; y gracias a los acuerdos con Warner Bros. tendrán acceso a diversos contenidos, incluidas temporadas completas de series y animaciones. En junio, la compañía también anunció un acuerdo de varios años con DreamWorks Animation para desarrollar programas originales para los suscriptores de Netflix, un convenio que incluye 300 horas de nueva programación. (Una serie original de dibujos animados llamada ‘Turbo F.A.S.T.’ se estrenará a finales de este año.) «El nuevo contenido debe, en parte, ayudar a compensar el boquete que quedó en la programación infantil de Netflix cuando el acuerdo con Viacom expiró este año», escribió Michael Pachter, analista de Wedbush Securities. Así que le recomendamos a Netflix seguir cocinando acuerdos.
Un alza de precios
¿Qué! Tranquilos, no estamos sugiriendo alzas como las que Netflix quiso aplicar en julio de 2011 (7.99 dólares para un DVD por vez, 7.99 dólares para streaming ilimitado, y ninguna opción combinada), pero Pachter afirma que el modelo de precios actual de la compañía es ideal para el crecimiento, pero malo para las ganancias en el largo plazo.
«Para que sea rentable de forma sostenida, creemos que Netflix tiene que elevar el precio, y ahí está el dilema: Netflix puede ser una empresa de alto crecimiento y baja rentabilidad, o puede ser una empresa de bajo crecimiento y alta rentabilidad», escribió Pachter, quien cree que no existe una avenencia entre las dos opciones. Tal vez tenga razón, pero Netflix podría aprender una lección de la visión largoplacista de Amazon y considerar postergar el aumento de los precios lo más que pueda, armando su catálogo de contenido original y acumulando más millones de usuarios fieles en los próximos años.
Y cuando se convierta en una experiencia sumamente rica y convincente, tal vez -sólo tal vez- muchos de los usuarios estén dispuestos a pagar un poco más.
JP Mangalindam
fuente: CNN Expansión