Uno de los líderes más representativos del siglo XX fue Mahatma Gandhi; sin hacer uso de la violencia, este “idealista práctico”, cómo él mismo se definió, logró grandes cambios en su país, la India. ¿Cómo lo logró?
De acuerdo con los especialistas, Gandhi cumplió tres habilidades de liderazgo: definió un propósito, tuvo disciplina y fue un ser íntegro y espiritual. Aquí explicamos cómo desarrolló cada una.
Definición de un propósito
La visión de Gandhi y su claridad para alcanzar sus objetivos fueron clave para lograr liberar a la India, sin usar la violencia.
Gandhi sabía que la producción de sal era una actividad exclusiva del gobierno británico en la colonia, por lo que para demostrar el derecho que tenían todos los indios a explotar los recursos naturales de su país, realizó una marcha de 350 kilómetros hasta el mar y extrajo agua salada.
Esto muestra que supo detectar las fortalezas de su enemigo, hizo que se convirtieran en una debilidad y aprovechó las áreas de oportunidad.
Disciplina
Mahatma Gandhi consideraba que los retos lo ayudaban a acercarse a sus metas. Su actitud era “hacerlo o morir”, es decir, debía liberar a la India o morir en el intento.
De esta forma, el líder siempre estuvo dispuesto a asumir las consecuencias de sus actos.
Una de las acciones más representativas de su disciplina son los prolongados ayunos a los que se sometía como una forma de protesta. Por ello su más representativa imagen es la de un hombre sumamente delgado, desnudo del torso, con una cabra y una rueca a los lados.
Integridad y espiritualidad
Asimismo, Gandhi buscó alcanzar sus objetivos siguiendo sus propios principios: integridad y espiritualidad. Este líder indio nunca dejó de creer en que el principio de no violencia era el camino ideal para liberar a su país de Gran Bretaña.
Con este ideal como bandera, encontró la forma de motivar a otros indios a integrarse al movimiento. Su personalidad, apacible y sabia, permitió que las personas simpatizaran con él y lo siguieran, pues conocían claramente sus métodos y sus objetivos. Además, Gandhi fue un gran orador: sus seguidores permanecían callados cuando él hablaba, poniendo atención en cada una de sus palabras.
Gandhi también fue un líder flexible que, sin abandonar sus principios, adaptaba sus estrategias a los nuevos retos que se le imponían.
Su espiritualidad fue impresa en cada una de sus acciones. Gandhi creyó que la mejor forma de combatir al odio y las armas eran el amor y la paz. Incluso, el líder indio consideró que sus enemigos eran sus amigos.
¿Qué habilidades de liderazgo de Gandhi puedes aplicar a tu vida diaria? ¿Cómo podrías relacionarte con tus empleados y colegas a través de las enseñanzas de este personaje?
Muy buena la nota, porque a Gandhi se lo vincula casi exclusivamente con la piedad y la no violencia, y muchas veces se olvida que fué uno de los grandes estadistas de la historia. El único capaz de derrotar sin armas al Imperio Británico.
Un líder, en resumen un ser humano, El excelente modelo de liderazgo de las empresas humanas, sociales, ciudadanas y medioambientales.
Gracias Jorge!
apliquemos sus métodos para dejar de lado al capitalismo sangriento actual